Juntando a papá y a mamá

II. Los problemas de una mentira y la solución.

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Al día siguiente, Leon se había preparado para ir a visitar a su amiga, ya que se enteró de que estaba embarazada y de alguna forma quería ayudarla porque podría estar triste y eso afectaría a su bebe, salió de su departamento, bajo por las escaleras dirigiéndose directamente al estacionamiento; saco sus llaves para buscar su vehículo que era una camioneta gris, subió y se fue rumbo al edificio "Rokert" donde sabía enterado que su antigua compañera vivía allí. Quería que esto fuese una sorpresa para ella, ya que hace mucho que no se hablan, él quería saber algunas cosas sobre el novio de Claire y del bebe que estaba esperando, sin duda fue una noticia inesperada y por su curiosidad quería averiguar más sobre el tema.

Cuando Leon llego al lugar, revisando la dirección "Calle Brooklyn 567 entre Walas 556", observo todo su alrededor; todavía había vida en Washington, porque el virus –C ya fue controlada hace un par de años atrás. —Espero que todo esto se solucione—murmuro al avanzar unos pasos más para entrar al edificio, como Sherry le dio algunos datos durante esta mañana por mensajes de texto, este se guiaba buscando el número y la letra alfabética –"6M sexto piso, al fondo y dobla a la izquierda."- Puede que no sea buena guía pero le servía de algo esta pequeña dirección dentro del lugar. —Bueno, creo que es este—decía al levantar su mirada al número que tenía la puerta, toca el timbre y se queda esperando.

Mientras del otro lado, Jake con su piyama celeste puesta estaba recostado en el sofá buscando canales para poder distraerse —Nada-Nada, muy tonto, demasiado cursi—repetía el joven al tocar los botones del control remoto, su novia estaba sentada en el sofá mediano de color blanco, se encontraba leyendo un libro, estando tan concentrada que el timbre interrumpió su lectura y se alarmo un poco.

—Jake ¿puedes abrir la puerta? —pidió la chica al cerrar el libro.

—Ha...—suspiro un poco cansado —Como digas.

Se levantó del sofá caminando descalzo hacia la puerta, pregunto quién era y al saber la respuesta solo sonrió de lado, miro la hora 11:30 a.m no vio a la pelirroja levantarse de su cama. —Hola Leon. —saludo al dejarlo entrar.

—Hola Jake, ¿Cómo has estado? —pregunto mientras pasaba al departamento.

—Bien, por el momento. —respondió al cerrar la puerta despacio.

—Hola Leon—saludo Sherry en voz baja y fue directamente a abrazarlo.

—Ha pasado tiempo Sherry y ¿Claire? ¿En dónde está? —interrogo al no verla en el living.

—Ella sigue durmiendo, ¿Quieres que vaya a despertarla por ti? —decía con una leve sonrisa.

—N-No deja que iré yo, quiero darle una sorpresa a ella y al bebe—interrumpió este al dirigirse a la habitación de su amiga.

—Hey! Creo que estas en serios problemas—le hablo Jake estando de brazos cruzados.

—No creí que Leon cayera en eso—insinuó extrañada —Además no tenía otra mentira.

—Podrías haberle dicho que estaba enferma, eso siempre funciona.

— ¿Tú crees? —dijo dudando. —No lo sé, espero que esto logre unirlos.

—Es mejor que esperemos que pasa después ¿no? —sugirió al sentarse nuevamente en el sofá y agarrando el control remoto.

—Está bien, Jake—asintió con la cabeza, se acercó hacia él y lo beso en su frente.

Leon al entrar en esa habitación, estaba viéndola dormir tan tranquila: se veía tan linda ¿linda? Es su mejor amiga debería tener cuidado con lo que piensa, noto que se movió un poco y eso hizo que dejara a un lado sus pensamientos, no creyó encontrarla de dormilona, camino silenciosamente asomándose hacia la ventana que estaba cubierta por las cortinas verde claro de un solo tirón corrió las cortinas dejando entrar los rayos del sol.