Un ramen instantaneo

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Hola a todos, este es mi primer Fanfic, amo a esta pareja, espero les guste esta pequeña "comedia romántica" sobre esta pareja tan dispareja, cualquier error o faltas de ortografía sean bienvenidos, hay que enriquecer la lectura.

Por favor recuerden que es mi primera vez haciendo esto, no sean muy duros pero si sinceros y acepto muy bien los consejos, así que no duden en darlos y espero que disfruten de los capítulos. Ninguna imagen que mostrare me pertenecen

ADVERTENCIA POSIBILIDADES DE SPOILER CONFORME AL MANGA ACTUAL DE BUNGOU STRAY DOGS LEER BAJO SU JUICIO.

...

POV - Autora.

Las calles de una Yokohama tranquila eran el sitio perfecto para el día libre de nuestro joven detective Atsushi, con Kunikida en prisión por la trampa tendida por "las ratas" el presidente Fukuzawa le había dejado a Atsushi descansar pero nuestro joven felino al ser inexperto en la cocina y sin ingredientes para su amado Chazuke se dispuso a caminar.

A sus alrededores, las calles eran tranquilas, un sábado común, podría ser, era su primer día libre después de todo, sin su compañera Kyoka quien acompañaba a Yosano de compras, regreso sus pasos con dirección a su casa pero entre sonrisas y relajación el joven tigre se paró en seco, su estómago dolía, ya pasaban de la hora de comer ―¿Que voy a comer hoy? ― El chico tigre se había olvidado por completo de la comida y siendo Kyoka quien cocinaba no le quedo de otra más que entrar al supermercado que quedaba cerca de su casa ― Debería comprar para hacer Chazuke... Pero Kyoka dijo que estaría con Yosano-san, ¿Que debería comprar? ― Se decía Atsushi cabizbajo, pero entre aquellas palabras fue descuidado y sin previo aviso choco con la persona de enfrente a su persona ― Lo sient... o... ― Fue todo lo que pudo pronunciar antes de que su cara se pintara de pánico

 ―Jinko  - dijo aquella persona frente de él

― Akutagawa - respondió nuestro joven tigre dando unos pasos atrás

― No pienso atacarte, solo muévete, me estorbas - dijo el peli-negro

― ¿No vas a atacarme? 

―Solo vine de compras, deja de molestar y piérdete - añadio molesto aquel peli-negro mientras se confundía con la multitud

Atsushi solo logro suspirar de alivio y siguió su camino, pero no era lo mismo con nuestro querido Mafioso pues, el encontrarse de esa manera con el tigre que odia no era común, le siguió con la mirada, "¿Estará siguiéndome por órdenes?" pensaba el mafioso sin quitarle la vista de encima, cuando vio a aquel albino chico brincando en un exhibidor para poder alcanzar una caja de ramen instantáneo, las comisuras de sus labios se movieron postrando en su rostro una sonrisa casi imperceptible, aquella escena le parecía la más graciosa que había visto en su vida pero ahora tenía un pretexto para acercarse a aquel albino que le molestaba en aquel lugar

―Jinko - hablo seco y seguro provocando que el chico tigre volteara a verle asustado

― Pensé que no ibas a atacarme

―No lo haré - dijo mientras con un pequeño hilo de Rashoumon lograba bajar aquella caja de ramen para dejarlo caer en la cabeza del albino

― Gracias - sonrio Atsushi mientras sobaba su cabeza

― ¿Porque comes algo como eso? ¿Te burlas de mí? - dijo serio Akutagawa

― ¿Eh? ¿Burlarme? No, claro que no ¿Por qué lo haría? - decía Atsushi mientras comenzaba a entrar en pánico ¿Que le molestaba a aquel mafioso? 

―  Si comes ramen no serás lo suficientemente fuerte, si no mataré por 6 meses podrías esforzarte más y no burlarte de mí - menciono aquel mafioso sin más

― No me burlo de ti, Kyoka-chan salió y no se cocinar - señalo Atsushi alterado haciendo que su voz llegará a los alrededores así como la mirada a aquellos dos personajes
―  Idiota ahora llamas la atención, eres un desastre - dijo molesto  el mafioso marchándose de la escena

Sin más, Atsushi volvió a suspirar pensando en las palabras del mafioso, si Akutagawa estaba incluso cuidando su alimentación para hacerse más fuerte, el debería también esforzarse más. Con movimientos de cabeza de un lado a otro simplemente se dirigió a la caja, intento buscar a aquel mafioso para evitar otro encuentro pero en ninguna lugar más lo vio, Atsushi solo se dispuso a pagar y salir del lugar o eso planeaba

Al salir del supermercado solo tuvo que dar dos pasos para verlo, Akutagawa estaba recargado en la pared con sus ojos cerrados pero al escuchar la puerta este los abrió y miro a aquel chico tigre que tanto le hacía molestar

― Vamos - dijo Akutagawa
―¿Qué? ¿A dónde? - Atsushi temblaba ¿A dónde lo quería llevar? Pero lo que más le intrigaba era... ¿por qué el perro de la Port Mafia estaba actuando así? Iban a pelear, eso era seguro
― Tú casa, te enseñaré a hacer algo decente - dijo Akutagawa
― ¡¿EH?! - grito sin motivo o razón, solo salio

Atsushi se encontraba sentado en su recibidor sin expresión alguna, completamente aturdido y sin ninguna palabra mientras que Akutagawa sacaba una olla de cocina, aquel mafioso solo le había dicho que debía saber cocinar y lo hizo caminar entrando como si nada a su departamento

―¿Realmente esto está bien? ¿Si viene Kyoka-chan? ¿Me regañaran por estar con él en mi departamento?¿Porque Akutagawa me ayuda? - Atsushi solo podía formular aquellas preguntas en su mente mientras frotaba sus manos en su cabeza con desesperación

― Oye, si te quedas allí no aprenderás nada Jinko - las palabras de Akutagawa le sacaron de su mente y lo regresaron al presente,su enemigo estaba en su casa como si fueran grandes amigos 

― Lo siento - se disculpo Atsushi mientras se levantó y se puso al lado de Akutagawa, el segundo nombrado por su lado solo sonrió al ver la expresión de su albino acompañante, aquel chico estaba en otro planeta como si fuese a morir en cualquier instante, estaba preocupado, asustado, cada emoción que detectaba en su rostro lo hacía querer reír a mares

―Un estofado será sencillo para ti aprender, vi que tienes ingredientes 

― No tengo idea que va en un estofado - dijo Atsushi seco a lo que molesto al mafioso 

― Jinko ¿Que tan inútil puedes ser? - dijo este mientras le tomaba del cuello ya molesto

― Jamás aprendí a cocinar ¿Qué esperas que un orfanato pueda enseñarle a niños? ¡Todo lo que se hacer es Chazuke! - grito el felino mientras intentaba zafarse del agarré sin usar su habilidad a lo que el mafioso le soltó 

― Jinko, eres un inútil en la cocina - soltó el mafioso sin más

― ¿Qué hay de ti? ¿Qué tanto puedes cocinar?

― Puedo cocinar bien, te recuerdo que tengo a Gin pero incluso ella sabe cocinar si no estoy, no como tú - Atsushi no sabía ya donde esconderse, estaba en su departamento y quería esconderse, solo sabía una cosa, aquella tarde sería la más larga de su vida si es que sobrevivía...    

...

Gracias por leer, el siguiente capitulo llegará pronto. Estoy agradecido de que lleguen hasta este lugar, sin más que decir espero disfruten el siguiente.


Publicado 07, sep 2017

Editado 17, dic 2018

Una cena para dos, AkuAtsu - BSDDonde viven las historias. Descúbrelo ahora