Hazlo Bien

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-De que hablas? - frunció el ceño - es algo malo?

- Ya quiero que este maldito dia de escuela ternine, iremos a pasear -

- A donde? -

- No te preocupes por eso ahora -

-Esta bien Damien pero si es algo malo te juro que no te vuelvo a hablar -

-Qué?! -

- No es cierto pero, dime es malo? -

-Por supuesto que no lindura - acarició su cabello

Sonó el timbre anunciando el término de las clases, se escucharon algunos suspiros de alivio.
-Si es que ya terminaron su trabajo entreguenlo por favor -

Damien se levantó del restirador en el que trabajaba tomando entre sus manos las hojas con esos mundos que ha creado.

-Ya terminaste Damien? -
-Sí, aunque no me quedaron muy bien - sonrió
- Están muy bien hechos pero, estas bien? - posó su mano en el hombro del chico más talentoso del grupo.
-Claro que si, por que lo dice? -
-No me lo tomes a mal pero, he notado que tus dibujos son parecidos a los que los chicos góticos de otros salones han hecho y me preocupan, así como tú ; te ha pasado algo últimamente? - acarició un mechón del flequillo de Damien.

-Maestra - retiró su mano asqueado - ellos ven la realidad en este mundo, el lado que la mayoría no quieren ver y créame he visto lugares peores pero no ha ocurrido nada, no tengo recentimientos, odio ni mala voluntad por alguien. No todo es de un color claro y bello. Ahora si me disculpa debo irme -

Este chico tan pálido abrió la puerta del salón donde fuera se encontraba aquel que le robaba sonrisas bobas entre clases.

- Nos vamos entonces? -

- Sí Leo -

Esta vez el chico rubio, temeroso y débil tomó la decisión de hacer algo por su cuenta ; se acercó lentamente al rostro de Damien mientras trataba de llegar a su altura parado de puntas. Ya a no más de 5 cm de los labios ajenos una mano se interpuso sorprendiendolo.

- No aún, quieres? -

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Tweek POV

Sali corriendo de allí, después de ese "Jódete Craig" no creo que tenga posibilidades de que me vuelva a buscar.

Esta vez me dió igual, regresé a mi casa pues mis papas están ahora en la cafetería hasta tarde así que no se enterarían. Subí las escaleras y me lancé a la cama, me acomodé boca arriba y trataba de no cerrar los ojos por el ardor que causaban las lágrimas. Observé las palmas de mis manos y me percaté de los raspones que tenía al igual revisé ese pequeño dolor en la mejilla.

Al correr hacia acá me tropecé varias veces por dos sencillas y estúpidas razones, la primera es que casi nunca amarro las cintas de los tennis;la segunda es que corrí tan rápido durante todo el trayecto así que por un momento no sentí las piernas, se vencieron y después de ello vine trotando.

-Carajo- con las puntas de los dedos repase las heridas - Debo ir al baño -

Ya allí me estiré lo más que pude para alcanzar las caja del botiquín, estaba algo empolvado pero daba igual. Bajé esa caja verde y encontré las banditas hasta el fondo, estaba casi llena de paquetitos . Tomé unos 5, coloque dos en la palma derecha pues es donde tenía más , uno en la izquierda y una última en la mejilla o bueno el pómulo, muy cerca del ojo;dolía más que las manos y estoy seguro que dejará un moretón muy marcado.

Me vuelvo cenizasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora