Me vuelvo cenizas

Fresas

Recientemente mi padre me ha estado castigando más seguido, sé que debo obedecerlo y lo hago hasta donde puedo pero soy torpe y olvido algunas cosas.

Papá no deja que me acerque a personas que él no apruebe y vaya que es dificil converserle de algo.

Pero todo este sentimiento se va hoy por que me veré con Damien y me alegra el día ver su cara bonita.

No había pedido permiso para salir esta vez pero si lo hubiese hecho me preguntarían con quien iría y a donde y si les mencionara a Damien seguro que harían de todo para evitarlo.

Aún no puedo creer que escondiera a Damien por 6 meses aunque muchos compañeros sospechan de nosotros.

En fin casi 6 de la tarde,nos encontraríamos donde siempre.

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Llegué primero al lugar, era ese mismo parque donde nos besamos por primera vez,sé que se escucha cursi pero es el lugar más cerca de ambas casas.

Subimos a los columpios,trepabamos el pasamanos ( Damien tuvo que cuidarme para no caer)

Pasó una hora más o menos de juegos y risas y en el transcurso de esta tomamos algunas fotos juntos.

-Leo,está oscureciendo,debemos irnos ya-

-A tu casa,entonces- mis padres seguramente estarán en casa esperando por mi para terminar castigándome por un buen tiempo.

-Si ,vamos-

Caminamos rato y como estaba haciendose cada vez más oscuro ,nos tomamos de las manos pues así no sabrían quienes somos.

Al llegar a casa de Damien me sentí nervioso, no sabía cómo resultaría este día. Él había ido a la cocina a traer galletas y crema de cacahuate pero mi mente estaba perdida en qué pasaría si nos besáramos y tuve que descubrirlo por mí mismo o si no seguiría con miedo de esto.

Damien se sentó frente mío y me entregó una bolsa de galletas y el abrió su frasco de crema de cacahuate pero antes de eso me acerqué de frente y subí a su sillón sentándome arriba de él para besarlo.

Normal Pov

Butters subió a las piernas de Damien sorprendiéndolo y haciendo a un lado a su bocadillo pues tenía algo encima suyo que nunca habia visto.

Leo besó fuertemente a su novio, se sintió más que nada como un golpe pero al acomodarse empezó con un trabajo provocando una insoportable tentación.

Con la punta de la lengua humedeció el labio inferior del chico que permanecia con la boca entreabierta. El más pequeño sujetó el rostro del otro con ambas manos para así besarlo como debía,comérselo y saborear esos lindos labios que sólo le servían a él.

Damien correspondió el beso sujetando su cintura aún sabiendo que eso hacía enojar a su niño pero si queria un beso así sería. Sus lenguas se encontraban ,no querían depegarse ni por un segundo pero les era imposible pues sus respiraciones agitadas exigian salir.

- Quieres hacer esto Leo?- las mejillas estaban rojas.

- Si,de verdad que si- respiraba profundo y trató de quitarse la playera pero Damien lo detuvo.

-Espera, vayamos a mi habitación-

Así el más alto tomó la mano del otro que a pesar de demostrar determinación temblaba un poco aunque no era el unico.

-Vamos, estas seguro ? Aún quieres seguir?- abrió la puerta.

- Si ,muy seguro- entró y se sentó en la cama.