cap 6

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P.o.v leo

Me había levantado mucho más  temprano que las otras veces, me puse una capucha negra para ocultarme, sali con normalidad de mi cuarto ya que no debía preocuparme de despertar a mis hermanos ya que, ellos duermen como rocas; ni un terremoto los despertaría, pase derecho y finalmente sali de la guardia.
Al estar afuera (ósea en la ciudad) camine sin temor de ser descubierto, pase a una floreria la cual era la favorita de papa, y escogí las flores que más le gustaban, los tulipanes; compre dos ramos, los page y sali de la tiende encaminandome a una colina donde esta la tumba de papa.

En el camino me encontré con muchos niños, con sus padres, eso me puso a pensar en las veces que estuvimos con el divirtiendonos; una lágrima traicionera cayó por mi mejilla, la deje recorrer mi rostro aún mirando la escena.

-¿porque llora señor?

Al salir de mis pensamientos dirijo mi vista hacia abajo donde me encuentro con una niña humana, tenía el cabello castaño claro y unos ojos celestes más claros que los ojos de mi hermano mike; me limpió rápidamente la lágrima y me agachó hasta su altura.

-por nada, sólo recordé a mi papa

-¿usted no tiene papa?-

Esa pregunta hizo que mi corazón se volviera a romper.

-no, lo tenía antes pero el ya se fue al cielo y esta junto a otros ángeles cuidandonos desde haya arriba.

La niña levantó en rostro mirando hacia el cielo, yo sonrió por lo tierna que es.

-¡agustina! -

La voz de una mujer nos hizo mirar a ambos hacia su dirección, la niña extendió sus brazos y con una sonrisa corrió en su dirección.

-¡mami!

La pareja humana junto con la niña se acercaron a mi con una sonrisa en los labios.

-muchas gracias señor......- el hombre me tomó la mano agradeciendome

-leonardo, leonardo hamato

-muchas gracias, por encontrar a mi hija-

La señora lloraba de alegría mientras besaba el rostro de la niña y abrazándola fuertemente. Me levante y mire la feliz escena.

-agustina, estábamos muy preocupados nunca tienes que separarte de nosotros - regañó a la niña el padre

-lo siento papa

-esta bien. Pero no lo vuelvas a hacer-

-tenemos que irnos, y muchas gracias leonardo

-de nada

papi! ¡Bajame!

El hombre bajo a la niña y me agache nuevamente a su altura.

-agustina, te dire una cosa ama y cuida a tus padres por no siempre estarán contigo disfruta cada momento con ellos, no los hagas asustarse de esa manera lo último- saque una flor de uno de los ramos, y se la puse delicadamente en su cabello - es se feliz con su compañía 

La niña me sonrió y corrió a darle la mano a sus padres e irse con ellos, una sonrisa se formaba en mi rostro; después de eso retome camino hacia donde me dirigía principalmente, al llegar a la colina deje los ramos en su tumba y acaricie suavemente la lápida.
Con lágrimas en los ojos y una sonrisa triste comencé a conversar con el.

-te prometo padre que salváremos a karai, y volveremos a ser la familia que debimos ser.

Luego de minutos, me levante y con la suave y fría brisa emprendí camino hacia la guarida donde mis hermanos estarían despiertos esperándome con unas sonrisas.

"Nunca dejes para mañana, lo que puedas hacer hoy"

nueva vida sin ti papaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora