II

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El atardecer se estaba poniendo cuando la familia Yuuki recibió al mensajero real, este traía un comunicado el cual informaba que el príncipe heredero Kazuto estaría visitando el hogar de los Yuuki por una semana con el motivo de aprehender al saqueador del reino, debido a que el día que atacaría el ladrón era desconocido era necesario que estuviese allí lo antes posible por lo que llegaría en la mañana del siguiente día.

Asuna, Shino y Kouichirou escuchaban atentos las indicaciones de sus padres los cuales estaban un poco entusiasmados y al mismo tiempo inquietos por la visita sorpresiva del príncipe, esta seria una oportunidad maravillosa para que una de sus hijas consiga conquistar al príncipe. De los tres hijos Yuuki ninguno sentía emoción por la visita del príncipe, era cierto que conocerían a una importante figura política pero algún día tendrían que relacionarse por lo que no era nuevo para alguno de ellos. Shino se veía furiosa un invitado sorpresa estaría invadiendo su hogar por una semana circulando por todas las habitaciones, no la dejarían descansar, su cólera subía; por otro lado, mientras Asuna veía el ceño fruncido de su hermana menor decidió tocarle el hombro en señal de comprensión, Shino le dio una pequeña sonrisa y se logro calmar, Asuna siempre era su confidente para todo, ambas conocían todos sus secretos y nunca se traicionarían.

-...por consecuente necesitamos que estén listos desde la mañana para recibir al príncipe y darle el recorrido por la casa, ya que Kouichirou debe trabajar conmigo se lo encargare a una de las dos- El señor Yuuki vio a sus hijas esbozando una gran sonrisa.

-Querido me parece que eso es decisión del príncipe- menciono su esposa guiñándole a su marido

Asuna sabia que además de la visita del príncipe sus padres querrían que ella o su hermana sea cortejada por el príncipe.

-En ese caso lo decidirá él. Eso es todo por hoy pueden retirarse.

Los tres Yuuki hicieron una reverencia hacia sus padres y salieron de allí. Kouichirou se dirigió a su oficina mientras Shino y Asuna caminaban a sus recamaras mientras conversaban.

- ¿Es que acaso nos quieren vender al príncipe? - Shino estaba furiosa

-No lo veo así, mientras tu estés dispuesta a rechazarlo el no podrá hacer nada

- ¿Qué dices? Él es el príncipe, con solo mover un dedo puede hacer que te corten la cabeza

-Pero tu eres una dama y mientras mantengas firme tu juicio él no podrá obligarte a nada- Asuna tomo las manos de Shino y le sonrió- Además no sabes si te va a gustar, después de todo tiene tu edad- esto hizo sonrojar a Shino hasta las orejas por lo que soltó sus manos y se dio media vuelta

- ¿Hermana no digas eso, creí que serias tú la que estaría con el príncipe, además has escuchado los rumores que mencionan de él? - Asuna la miro confusa- dicen que su padre es tan estricto que a veces escapa del castillo para satisfacerse a si mismo, si sabes a lo que me refiero.

-No creo que sea necesario juzgarlo sin antes verlo, pero en caso de que sea cierto nunca dejaría que corteje a mi preciada hermana menor sin antes hacerle prometer que te cuidara. - Shino le lanzo una carcajada

-En ese caso gracias, pero debo decir que si le llegas a gustar no le permitiré que te ponga un dedo encima. -Asuna sonrió

-Bueno, ahora ve a dormir, mamá se fastidiará si no nos levantamos rápidamente mañana

-Tienes razón, Adiós-

Shino y Asuna entraron a su recamara para descansar.

Durante la madrugada se escuchaban los pasos de la servidumbre apurada por preparar los últimos detalles para la visita del príncipe. Este ajetreo despertó a Asuna la cual al abrir los ojos vio entrar a dos mucamas a su aposento, supuso que fueron enviadas por su madre para que las arreglara, Shino debe estar en la misma situación, pensó. En un abrir y cerrar de ojos ya estaba cambiada con un kimono de color rosa pastel y un maquillaje un poco llamativo para su gusto. Al salir de la alcoba vio a su hermana lista con un kimono turquesa que resaltaba su cabello corto adornado con una rosa azul. Ambas se saludaron y se dispusieron a entrar a la sala de invitados donde sus padres y hermano las esperaba.

-Veo que se han arreglado adecuadamente. - dijo su padre feliz

-Bueno, todo fue gracias a madre. – Menciono Shino con un tono sarcástico

-En ese caso buen trabajo esposa mía-menciono el señor Yuuki mirando a su esposa la cual estaba feliz con el resultado de ambas-

Toda la familia espero la llegada del príncipe hasta que el mensajero anuncio su llegada. Kazuto el príncipe heredero estaba vestido con un kimono negro, a su lado apareció un joven de ojos verdes y cabello rubio y atrás de ambos un hombre moreno de presencia omnipotente.

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⏰ Última actualización: Sep 04, 2017 ⏰

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La justicia del ninjaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora