2: Eh, eso es mío

328 52 11
                                    

- Está loco si cree que con sus guiños, relamidas de labio y miraditas hará que caiga ante él como el resto de tías que lo siguen mientras babean. Es a lo: ''Ay, ¡Connor Wellington me ha mirado!'' ''¡Mira que culito tiene por favor!'' o...

- Para, Brooke. -me interrumpe Daphne.- Resulta que acabas de llegar y ya lo estás poniendo a parir al pobre chico. 

- Sí claro. Ni que no supieras a lo que va. No se anda con rodeos, Daph. -replico. 

- Ay, basta. Dejémoslo. Yo quiero ir a ver el resto de la casa, ¿me acompañas? 

- Bah, paso. Creo que hay una Play Station en el salón, voy a jugar un rato. 

- Siempre eres la misma Brooke. -dice negando con la cabeza.- Si necesitas algo, mándame un WhatsApp. 

- Lo haré. 

Y acto seguido, me levanto de la cama y camino hasta la sala de estar. Allí está conectado el aparato, con un par de juegos encima. Con sigilo me acerco a ver cuáles son: Call Of Duty: Ghosts, Battlefield 4 y el GTA V. 

Escojo el Call Of Duty: Ghosts, y después de encender la PS4, comienzo a jugar. Pero alguien me interrumpe sentándose de una manera estrambótica a mi lado. Devis.

- Eh, guapa. ¿No te han dicho nunca que las cosas que no son tuyas, antes de utilizarlas, hay que pedir permiso? -pregunta con picardía.

- Ah, ¿es que ésto es tuyo? -cuestiono con dejadez.

- Muy bien Sherlock. -responde divertido.- Te lo dejo ¿vale? Pero con la condición de que juegues una partida conmigo. 

- Perfecto. 

+++

Nada más y nada menos que cinco horas las que hemos pasado jugando. Me pican los ojos de tanto mirar a la pantalla y me duelen los dedos de tanto apretar botones.  

- Nena, no juegas nada mal, ¿eh?  De hecho juegas mejor que Connor. -afirma riendo.

- Ya te he dicho que no me gusta que me llames nena, Devis. La próxima vez que lo hagas no dudaré en arrancarte las cejas mientras duermes. 

- Vale, está bien... -responde levantando los brazos a modo de rendición.- Tengo hambre, ¿quieres comer algo? 

- Vale, ¿qué hay? 

Se levanta del sofá y va hacia la nevera. La abre y se queda mirando en su interior pensativamente. 

- Comida. -responde al rato.

- Venga ya... ¿Es en serio? -pregunto irónica.- ¿Comida? ¿En la nevera? ¡Joder! ¿Y qué será lo próximo? ¿Agua saliendo del grifo? 

- Vale vale, basta ya, deja de reírte de mí...

- ¿Hay chocolate? Me apetece chocolate. 

- No. Es que básicamente no hay nada. Deberíamos ir a la cafetería.

- Ay, ¿ahora? Jo, es que tengo que vestirme y todo y me da pereza...

- Vaaaale, ya voy yo. -dice.- ¿Qué quiere que le traiga princesa Brooke? 

- Un chocolate caliente con nata, plebeyo Devis. -respondo entre risas. 

- Perfecto, ahora vuelvo. 

Se va y me deja sola. Me quedo durante un rato mirando la tela rojiza del sofá. Y como soy especial, me tumbo boca abajo y aspiro su aroma. Huele a viejo y a trasero. 

Justo en ese momento, llega Connor. 

_______________________________

Es corto, pero hace meses y meses que no subía nada. Esto lleva escrito unos... ¿3 o 4 meses? A petición de @ItsAllAboutBooks aquí tenéis el segundo capítulo de Damn, I'm weird. Os lovea a lot, 

Anabel, xx

Foto de Brooke.

 

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Oct 04, 2014 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Damn, I'm weird ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora