Epílogo: Never Stop

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Querida Emily,

si estás leyendo esto significa que estás ya en tu casa de Europa, y que ya te estoy echando de menos. Y espero que tu a mi también. Y también que ya han pasado tres años desde que te fuiste.

Espero que la universidad haya estado a tu altura, y todo lo que hay ahí, y que hayas encontrado amigos que te quieran tanto como te hemos querido aquí. Aunque es difícil.

¿Sabes? Las despedidas nunca se me han dado bien. Nunca me han gustado. Pero, ¿despedirme de ti? No creía que nada fuera tan difícil. Pero lo es. Joder.

Muchas cosas han cambiado desde que te fuiste.

Yo, por ejemplo, te estoy escribiendo desde Los Ángeles. Aunque eso ya lo sabías.

No sé nada de Nora ni de Lucy, creo que están en Irlanda, aunque vete a saber.

Julia está en Toronto y parece que le va bien, y Barbara en NY parece que está genial.

Nos hemos separado todos. Doy gracias por tener a los chicos a mi lado.

Sabíamos que no duraríamos más de los primeres meses en contacto, que cuando comenzáramos a tener trabajo se iría todo a la mierda. Las primeras navidades aparecieron todos, menos tu. Porque tus padres tampoco viven aquí.

Es curioso como cuando estábamos en el instituto no valorábamos el tiempo que pasábamos juntos, porque de verdad creíamos que seguiríamos juntos.

Puedo soportar no verlas a ellas, pero no verte a ti… Todavía ahora me duele.

Sé que acordamos perder el contacto por el bien de los dos. Aunque nos quisimos tanto… ¿Para qué al final? Aún así, los dos años que pasé a tu lado fueron los mejores de mi vida. Aquí no he estado tan feliz como lo estaba cuando estabas a mi lado. Sé que mantienes el contacto con Ashton, y sigo preguntándole cómo estás día tras día. Una amistad como la vuestra es difícil de encontrar. Me ha costado que me diera tu nueva dirección, y nada, que después de dos años he pensado que estaría bien que tuvieras un recuerdo más de mi, a parte de camisetas y regalos. Quiero que tengas unas palabras que se queden escritas, por si algún día se te olvida todo lo que pasamos. Por si pasas página y sigues adelante, que lo harás, quiero que encuentres esta carta y sonríes, y que sepas quien soy.

Sé que esto de las cartas de amor es viejo, y también está catalogado como cursi. Pero bueno, no te rías mucho de mi. Supongo que has estado con otros chicos, como lo he estado yo, porque no te quiero mentir. Pero mi corazón sigue siendo tuyo, puedes dormirte muchas noches más sabiendo eso, y que a veces todavía sueño contigo. Siempre deseabas conseguir sacar esto adelante, ser la única para mi. Y lo eras. Y lo eres. Joder, si lo eres. Lo has sido durante tres años y me temo que lo continuarás siendo durante mucho tiempo, porque no hay nadie como tu.

Quiero que sepas que en el fondo de mi corazón nunca dejaré de creer en nosotros, nunca dejaré de recordar el día en que te fuiste, nunca dejaré de perder la respiración cada vez que me acuerde de como me mirabas, no dejaré de recordar nuestras manos entrelazadas, ni olvidaré cómo abría las puertas para ti, nunca dejaré de escogerte, nunca me acostumbraré a ti.

Eras mi vida, ¿sabes? No te merecía, ni te merezco. Y resulta que me querías de la misma manera. Y aunque me haga mayor, aunque los espejos digan que hemos crecido, no pienso mirar hacia ningún otro lado que no seas tu. Sigues siendo mi vida, mi amor, mi número uno, y eso no va a cambiar.

Quiero que sepas que continuas acelerando mi respiración y continuas haciendo que mi corazón se dispare.

Quiero que guardes esta carta, que continues con tu vida, y que no te olvides de mi. Sé que ya lo he dicho. Y que también he dicho que seas feliz, pero quiero que lo seas de verdad.

Espero volverte a ver. En serio, necesito volverte a ver.

Te quiero, Emily.

Siempre,

tu Luke.



Releo la carta por millonésima vez. Han pasado cuatro años desde que la recibí. La vuelvo a meter en donde ha estado desde que llegó. Entre mi libro favorito y la parte derecha de la estantería. Ahogo las lágrimas que se empiezan a formar en mis ojos y dirijo mi mirada hacia mi cama, donde el chico de ojos azules duerme, todavía desnudo. Vuelvo a su lado y acaricio su cara con mi mano. Nunca habría imaginado encontrarle aquí, en Londres, después de tanto tiempo.

Abre los ojos lentamente y sonríe, igual que la primera vez que dormimos juntos.

-Solo tu me haces feliz.- Digo bajito, aunque nadie puede escucharnos.

Y aunque no me responde, sé que yo también a él, y desde este momento, nunca quiero que se vuelva a ir.

Nunca voy a dejar de quererle.

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El epílogo ya está aquí, no os hago esperar más, dejo que os olvideis de la novela :')

Ocno, no quiero que os olvideis de ella.

Os doy las gracias a todas, absolutamente todas las que alguna vez habeis leído, y votado y comentado. Sobretodo a las que comentais, porque me animais

muchísimo a escribir.

La verdad es que la novela no ha ido como me esperaba, he cambiado más de la mitad, pero espero que estéis tan contentas como yo con el resultado.

Recordad darme vuestra opinión y tal porque es el final y ya no hay más SWBL.

Ay, es que no me lo creo.

Gracias, gracias a todas, en serio. Joder, que me habeis hecho llegar a las 127.000 visitas, que es que las pasamos.

Espero que la de Calum os guste tanto como esta, y seguidme si quereis porque tengo muchísimas ideas.

Os quiero, en serio.

Dedico el final a mi Tessa personal, porque es una de mis mejores amigas y fue la que me animo a empezar esto. Dadle las gracias a ella.

Si quiereis que ponga un apartado con todas las canciones que me han inspirado para hacer los capítulos decidlo en el comentario, si muchas las quereis lo haré.

Y nada, que gracias otra vez.

No se me da bien esto de despedir cosas así que nada, nos vemos en Love, run and hide.

Beeesos <3

she will be loved || luke hemmingsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora