Keep Her Safe ➳ j.b

Capítulo 28: FIN

{ 28 }

Final

____________________________________________________

Hoy era el día en el qué me daban de alta, Caroline se encontraba de pie en el espejo de la pequeña habitación en donde había tenido que pasar estos dos meses.

Los moretones habían curado, incluso los de Caroline también. Me sentía mejor, aunque ahora tenía que usar unas estúpidas muletas hasta que mi pie se recupere del todo.

- Todas tus cosas están listas en el auto.

Caroline me dice mientras terminó perezosamente de cambiarme. Ahogó un grito cuando un pequeño pinchazo de dolor me debilita el área en el pie; eso me había estado pasando por lo mínimo tres veces al día y dolía como el infierno.

Caroline me agarro por un brazo, recostandome en la camilla.

- Llego la silla de ruedas en la que te lleváremos hasta abajo.

Me dice, asiento levemente mientras una enfermera me ayuda a sentarme en la silla. Me acomode como pude y Caroline me dio el bolso de regalos qué tenían muchas cosas y globos que sobre salían grandes.

- ¿Quién nos está esperando en el auto?

Le digo, curiosa por saber. Ella sigue dirigiéndome hasta la salida por los ascensores.

- Ryan.

Me dice, suspiró.

A pesar de que Ryan también es un agente del FBI, Caroline había comprendido todo y perdonado. Yo no podía decir lo mismo de Justin, el me había mentido y dudo que se me olvide pronto todas las cosas.

- Hola, Kylie.

Ryan animadamente me saludo. Le devolví una sonrisa forzada. No tenía ganas de volver a mi departamento.

Jamás había usado aquel departamento, sólo estaba amueblado con todas sus cosas equipadas para mi. Pero por la universidad el departamento quedo sólo.

Caroline había contratado a una empleada para que limpiase y re-decorará.

La universidad había acabado, estábamos en vacaciones y me había graduado de ahí; sólo que no pude asistir a la graduación por, mi situación.

- Llegamos.

Caroline me dice, Ryan se estaciona justo al frente de mi departamento.

Era grande y lujoso, culpen a mi padre que en paz descanse por eso. El lo había comprado para mi hace mucho tiempo ya.

Ryan y Caroline me ayudaron a entrar al departamento, olía bien y todo estaba diferente; era obvio qué estaba mucho mejor.

- Nosotros tenemos que irnos, pero vendremos más tarde.

Caroline me dice, me da un beso en la mejilla y Ryan hace lo mismo.

Camine con las muletas, con dificultades y me moví entre la sala de estar. Ahí estaban muchos de los globos que Caroline, Ryan, Zayn y amigos me habían mandado.

- ¿Está es tu nueva vida, no?

Escucho a alguien hablar, me sobresalto y me agarro de la pared que tengo cerca. Me giró y lo encuentro a él de pie con sus manos en los bolsillos.

- Supongo.

Le digo mientras caminó lo más lejos que puedo de él.

- ¿Me vas a dejar fuera de tu vida, después de todo?

Él dice acercándose más a mi. Me doy por venida y me siento en uno de los muebles.

- Eso debiste de haberlo pensado antes de mentirme.

Le digo sin ser capaz de mirarlo a los ojos.

- No tenía otras opciones, Ky.

Me dice y se sienta a mi lado.

- Si las tenías.

Le digo sin mirarlo.

- Mírame.

Me ordena, yo lo ignoró.

- ¿Para qué? ¿Para volver a mentirme?

Le digo, el niega con la cabeza y suspira.

- Quiero qué sepas qué jamás quise hacerte daño, mi amor. Te conocí y mi vida dio un giro completamente. Sólo quiero que me des una oportunidad para recuperar todo lo que he perdido.

Me dice mientras se acerca a mi, su mano la pone en mi mejilla y me obliga a mirarlo. Lágrimas amenazan con salir de mis ojos.

- ¿Por qué me estás diciendo esto?

Le digo y una lágrima cae por mi mejilla pero el logra alcanzarla y quitar de ella el rastro en mi mejilla.

- He renunciado a mi trabajo, mi padre comprendió y está a disposición de nosotros. Quiero mi vida contigo.

Me dice.

Ha renunciado a su trabajo.

El lo había echo, por mi. Estaba más que claro que lo amaba y creo que debía de darle una oportunidad con él, la merecía después de todo.

- Quiero qué te cases conmigo.

Me dijo, ¿qué? ¡Me esta pidiendo que me case con el! Yo no podía decirle que no, no ahora que estoy dispuesta a perdonarlo.

- ¿Estas hablando en serio?

Le digo, el esboza una sonrisa.

- Si, ¿tu qué dices?

Me dice. Mis mejillas comienzan a tornarse rozadas.

- Si, también me quiero casar contigo.

Le digo, el envuelve sus brazos alrededor de mi pequeño cuerpo y luego besa los labios.

- Te amo demasiado. Gracias por esta oportunidad que me has dado.

Me dice mientras da besos en mis labios. Me río.

- Yo te amo más.

Logró decir para luego sentir como el me carga hasta mi habitación y me pone en la cama.

- Eres mía.

Me dice mientras besa mis labios.

- Y tú eres mío.

Le digo para luego fundirnos en un beso lleno de amor y pasión.

FIN