13|Simbar|Final|

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Jam and Roller, un mes antes

—Ámbar, no creo que sea lo correcto que participes en la competencia si estás embarazada...—Le murmuró Simón mientras ambos patinaban al centro de la pista.

—Simón—Ámbar se puso enfrente de él—No voy a dejar que alguien más tome el papel protagónico de mi pista, voy a participar. Sin importar lo que me digas

Ámbar, con todo su ego y soberbia, patino hasta las gradas de la pista donde estaba Juliana y el resto de los chicos del Roller.

—Bien, vamos a empezar con las pruebas para poder entrar...—Juliana miro su lista—Ámbar, vas primero.

La rubia asintió y se dirigió al centro de la pista.

—Juliana, ¿puedo hablar contigo un segundo? Es urgente—Le pidió Simón, ella de mala gana asintió y se dirigieron a un costado—Es sobre Ámbar. Verás, ella está embarazada y yo ya le dije que...

Mientras Simón le explicaba a Juliana la situación, Ámbar intentaba practicar unos trucos.

El primero truco salió perfecto, como siempre. Haciendo que varias personas tengan su atención.

—¿Debería hacer eso?—Le murmuró Luna a Matteo—Creí que las embarazadas no podían...

Luna bajo la voz lo más que pudo, muy pocos sabían lo del hijo Simbar. Ambos habían decidido esperar a los tres meses.

—No lo se, creo que no.

Segundo truco, perfecto, otra vez.

—Y veras,  no quiero que le pase nada...—Simón seguía hablando con Juliana.

Tercer truco, falló. Ámbar no hizo el salto perfecto y cayó al piso, haciendo que su vientre se lastimará.

El sonido se escuchó en toda la pisa. Simón, ni bien lo vio, corrió a verla pero se sorprendió con lo que vio.

Sangre

Sangre corría por las piernas de Ámbar, mientras ella gemía de dolor y tristeza.

Había matado a su hijo.

Un departamento en el centro de Buenos Aires

Ámbar se despertó de un grito, asustada por revivir esa escena.

¡¿Que paso?!—Simón se despertó alarmado y miro a su novia.

Ella no decía nada, solamente se agarro a las piernas y lloro. No dejaba de repetir una y otra vez la misma frase:

"Yo lo mate, fue mi culpa"

Simón le levantó la cara y la miro a los ojos fijamente, con esas miradas de amor que el solo le sabe dar.

—No fue tu culpa, bonita—Dijo en un susurró—Todo lo que pasa es por algo y quizás ese hijo nuestro no estaba destinado a estar con nosotros, la vida no lo quiso así.

—Fue todo mi culpa Simón—La rubia se tiro a los brazos de su novio—Soy una asesina

—No Ámbar, no digas eso...—Simón la enrollo con sus brazos—La vida y el destino no lo quisieron así, hay que respetarlos... Ellos quieren que tengamos un hijo más adelante. Mira si nuestro bebe nacía y después le pasaba algo malo—Simón abrazo fuertemente a Ámbar.

La rubia suspiro, tomó aire y miro a Simón.

—Si, tenes razón...—Ámbar sonrío.

Ambos se volvieron a acostar pero Simón abrazaba a Ámbar y ella solo intentaba dormirse y olvidar aquel sueño.

Y lo hizo, lo olvido. Pudo dormir tranquila el resto de la noche pero no las que le siguieron.

Nunca se lo dijo a Simón, ni a Gastón, ni a nadie pero Ámbar siempre supo que estaba enferma, que el tiempo en el hospital no fue suficiente y que, algún día, volvería a explotar.

Enferma|Ámbar Smith|Termimada|#EAS1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora