Capitulo 5: Dias de Entrenamiento.

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Abri los ojos lentamente. No distinguia mucho. Vi la luz del sol entrando por mi ventana, la que quedaba justo en frente de mi cama, a traves de las persianas. Esperen! Yo nunca veo la luz del solo cuando me despierto! Miro el reloj en la mesa del lado de la cama que pone: 7:30.

-Mierda.

Maldito despertador. Tal vez no sono, o seguramente estaba aturdido aun de lo que ocurrio anoche, igual no recodaba mucho. Entre en la ducha y sali en menos de 2 minutos. Me vesti a la velocidad que pude y eche un monton de cuadernos al azar en mi mochila, obviamente, sin olvidar el diario de mi padre, que por cierto, me quede dormido antes de leerlo. Me deslize por la baranda de las escaleras y abri la puerta. Creo que a lo lejos pude escuchar la voz de Sally diciendome que comiera algo, pero ya era muy tarde, habia perdido incluso el autobus, ahora tenia que correr.

Faltaban 15 minutos cuando sali de casa. Ahora, que estaba a una manzana del colegio, faltaba un minuto para las 8. Vi que algunos ya estaban entrando y me di cuenta que habia sonado el timbre. Mi record de asistencia, maldita sea, no podia perderlo. Corri lo mas rapido que pude y alcanze a entrar en el instituto. Corri por los pasillos y las escaleras hasta que a lo lejos vi la puerta de mi salon, aun abierta. Comenze a correr y alguien se dispuso a cerrarla. Acelere el paso, y grite algo.

-No, espere!

Entonces, cai rodando, mi mochila volo por los aires y me di cuenta que tenia el zapato desamarrado por el apuro, volando lentamente, como si los segundos fueran horas. Mi caida era inevitable...

Y entonces desperte.

Estaba bocabajo en el sofa de la sala de entrenamiento de la Fosa. Me acomode hasta quedar sentado. Max estaba sentado en un escritorio a lo lejos, y solo levanto la mirada un momento, como si no creyera que era nada, pero despues se dio cuenta que era yo, que no era un espejismo, que ahi estaba. Se acerco lentamente, como si temiera dar un paso en falso, y se quedo mirandome, mientras yo estaba alli sentado, perplejo.

-Como..?-Se detuvo, como pensando seriamente en hacer la pregunta- Como llegaste?

-Yo... yo no lo se -Dije, intentando razonar.

-Espera, llamare a Alisson.

-No, yo... yo voy contigo.

Dije y me puse de pie, dejando mi mochila en el sofa. Efectivamente, tenia el zapato desamarrado.

Llegamos donde Alisson y de nuevo, no tuvimos que tocar.

-Esperen, no estoy presentable.

"Claro, como si no fuera hermosa de por si", pense.

"Mierda, tengo que dejar de hacer eso. Aun no se si lee mis pensamientos"

Al rato salio. Traia una blusa de diversos colores, y unos jeans blancos. Me miro y luego a Max.

-Que ocurre, Atom? Por que has venido? -Pregunto mirandome desconcertada.

-En realidad no tenia planeado venir tan temprano, pero... aqui estoy.

-Aparecio de repente en la sala de entrenamiento. -Interrumpio Max con su mirada seria.

Alisson abrio la boca ligeramente, como si estuviera sorprendida, y echo a correr por el pasillo.

-Siganme. -Grito, emocionada.

Max la siguio y se detuvo cuando vio que me quede.

-Tu no vienes?

-Primero me amarro el zapato.-"No quiero terminar de vuelta en la escuela" pense, y sonrei.

Despues de seguirlos, terminamos frente a una pequeña puerta de madera con lineas doradas formando distintos circulos. La perilla era una piedra de rubi, realmente roja y brillante. Pense que era demasiado extraño que hubiera algo bonito en esa pocilga llamada Fosa, pero seguro era un lugar especial, seguro era diferente. Alisson abrio la puerta y me encontre con una biblioteca inmensa, con diferentes secciones ordenadas alrededor de un vestibulo en forma de circulo. En el vestibulo se hallaba un diminuto escritorio, que cualquiera hubiera pensado que era de algun escritor o bibliotecaria, pero tenia un ordenador, papas fritas regadas y unas hojas sucias por la grasa de las papas. Una señora de aspecto joven, me saludo detras del escritorio.

Neon: Los Origenes de la SombraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora