un amor inoportuno

¿Qué paso?

Apenas había pasado media semana desde que habían sido reubicados a las instituciones de la U.A, donde eran supervisados por los profesores y recibían sus clases de forma normal

Su cabeza daba vueltas en todo lo que había pasado en ese lapso de tiempo, su secuestro, su rescate y ahora el tener que acostumbrarse a ver a sus compañeros todos los días viviendo bajo un mismo techo

Gruñó para sí mismo, aún se sentía herido e inútil

Herido en su orgullo al haber sido fácilmente secuestrado, el que hubiesen tan siquiera pensado que había una posibilidad de hacerlo ser un villano, el no haberse podido salvar por si mismo e inútil por que al compararse ahora con Deku sabía que era inferior

Le molestaba más que nada aquello, el recordar que este ahora tenía un quirk tan poderoso, del cual sospechaba tenía algo que ver con All Might, que hizo que todos lo reconocieran e incluso lucho de igual a igual con Todoroki, le hacia rabiar

No había tenido tiempo para pensar en todo eso, pero, ahora sabía muchas cosas, All Might perdió sus poderes, Deku había estado creciendo aún más que el, La liga de villanos lo había secuestrado porque saben de su potencial

Todo le provocaba dolor de cabeza, lo único que lo había salvado de haber explotado en el momento en que Shigaraki lo estaba tratando de presionar psicologicamente las palabras de el profesor Aizawa le aclararon la mente un momento

Pero...

La realidad era que muchos lo veían más que un potencial héroe, un potencial villano

Lo sabía, siempre había sido así, pero en este mundo donde los héroes son grandes pilares, el quería ser el mejor y por ello no puede actuar tan desinteresadamente como el maldito nerd

Porque aún si todos tienen grandes singularidades habrá una frase que nunca cambiará, y esa es que "la amabilidad se convierte en debilidad"

El no era ingenuo, aún si quería ayudar a los demás no podría nunca concibir el autosacrificio una opción como Deku, un muerto no puede proteger a nadie

Y con todo ese espíritu de dar su vida así como así, el maldito se le adelantaba cada vez más, lo odiaba

Lo odiaba porque antes siempre estaba por detrás suyo y ahora... Ahora el era quien debía seguirle el paso

Miró sus manos, apretó la mandíbula con fuerza quería hacer explotar todo

Comenzó a respirar hondo, sabía que debía calmarse, sus pensamientos nunca debían nublar su juicio, ya una vez perdió contra ellos y no volvería a pasar, más su intento de paz se vio interrumpido al escuchar su puerta ser tocada

Creyó que sería algún profesor o incluso el bastardo con agallas de Kirishima

Espero a que dijesen algo pero nada

Una vez más tres golpes suaves en su puerta con el fin de atraer su atención

-Tsk... ¡Ya voy maldición! -Exclamo para luego abrir la puerta sin tacto alguno, aunque si se sintió bastante sorprendido al ver un par de ojos heterocromaticos -¿Qué quieres bastardo mitad-mitad? -

-Vamos a entrenar dentro de 30 minutos en el gimnasio Gamma, me mandaron a avisarte -Fue lo único que dijo el joven del quirk doble quien disimuladamente pasaba su mirada por el rubio

Claro que esta acción solo hizo enfurecer al de carácter explosivo -¿Qué demonios me ves maldito bastardo?! -Odiaba ese tipo de mirada

-Quiero hablar contigo -Los ojos del joven hijo de Endeavor a pesar de permanecer serios tenían una pequeña chispa de brillo la cual el rubio no supo reconocer en ese momento