Deseo expuesto*

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Tenía sueño, y le dolía el cuerpo como el demonio, se sentía en realidad algo aturdido, por lo que tardo en abrir ambos ojos, solo arrugó el ceño, mientras se debatía entre despertar o dormir otro poco, pero se preguntaba donde estaba, asi que se decidido por la primera

Al abrirlos lo primero que hubo era oscuridad, no podía distinguir nada por lo cual se quedó quieto un rato hasta que su vista se pudo acostumbrarse lo suficiente para captar la luz de la luna la cual se colaba a duras penas por la ventana, después de un par de pestañeos logró reconocer la enfermería, trato de sentarse con la ayuda de sus palmas para levantar el torso pero sintió una presión sobre una de ellas

Una mata de cabellos en color oscuro y blanco captaron su mirada, aquello era lo que le impedía mover su mano, y ante esto pudo reconocer a la persona... Todoroki... No sabía qué hora era, había un reloj arriba de la puerta pero ante la oscuridad no podía distinguir nada, palmeo su cuerpo con su mano libre, la camisa de su traje de héroe no estaba, por lo cual su pecho estaba descubierto, después se propuso a inspeccionar la herida, por la cual recordaba ahora era la causante de su estancia ahí, para encontrarla cubierta por un par de gasas

Gruñó un poco, puesto que eso le causaba picazón y algo de ardor, concentró su vista en su el chico, mientras reconocía que al igual el seguía con su traje de héroe, el cual tenía algunos rasguños... No debía ser tan tarde si aquel bastardo estaba a su lado

- oí... - movió un poco por el hombro al chico con su mano libre, por algún motivo no quería soltar su mano... aún... - Todoroki... - volvió a hablar ahora un poco más fuerte, pero al verse ignorado y escuchar un ronquido su paciencia se iba acabando, se acercó al oído del chico para gritar en el y aturdirlo...

Pero en cambio pudo sentir el olor del bicolor... Sudor, menta, y algo de té también... se sintió algo apenado ante esto, y también como un degenerado por estar olfateandolo aún si fuese inconscientemente

Se alejó un poco, aún con la vergüenza en su pecho, era estúpido, puesto que él no debía sentirse así pero, toda percepción que tenía ahora del Todoroki era distinta desde... Desde el comienzo de su relación... El beso y la presurosa declaración había vuelto su cabeza un campo de batalla, no sabía ahora que pensar o como sentirse... Pero aquella agitación en su pecho y el calor sobre su rostro eran prueba de los sentimientos que guardaba por el bicolor... Eso o comenzaba a tener alguna fiebre o intoxicación...

Aún así el Bakugō quería creer que eran los nervios al no haber tenido antes una pareja, por lo cual, simplemente debía derrotarlos, no?...

Ante este pensamiento tomo ligeramente la mano del otro entrelazando sus dedos para luego sentir un apretón y ver entre la oscuridad de la noche los ojos heterocromáticos del chico analizando lo prácticamente y arrancándole un susto de paso

— joder! No puedes decir algo como la gente normal?! — preguntó exaltado tratando de deshacer el agarre en sus manos pero fue inútil al ver como el chico solo hacia más presión mientras ahora se erguia sobre la silla donde estaba sentado mientras tallaba uno de sus ojos con su mano libre

— buenos días también a ti... — irónizo el chico mientras veía al rubio desviar la mirada, ante ello no pudo evitar que se soltase una pequeña sonrisa en su rostro — ¿cómo te sientes?

El rubio tardo en responder, puesto que la vergüenza del momento seguía en su cara, agradecía la oscuridad que cubría su rostro — tsk... Estoy jodidamente bien... Y qué hora es? — preguntó ahora el, en realidad se sentía molido y con hambre

— no estoy seguro... — respondió el hijo del segundo gran héroe mientras miraba a su alrededor recordando haber un reloj, pero siendo honestos no quería levantarse de su asiento, aún si ya no sintiese sus glúteos

un amor inoportunoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora