Me casé con la gorda (+18)

cap2 No puede ser

Charly PDV

Soy Chaly el chico más sexi de la Univerisad. Mi madre es Coreana así que tengo unos lindos ojos rasgados, que me ayudan a conquistar a cualquier chica.  Me gusta hacer ejercicio, soy alto mido 1.81cm, el color de mis ojos son cafe.
Lo único que me interesa es pasarla bien con una chica diferente cada día después de que me rompieran el corazón no confío en las mujeres y me dispuse a jugar con todas.

Voy camino  a casa de Rosaura, una de mis tantas amigas, tenía que distresarme después de un día escolar; pero de repente  recibo  una llamada de mis padre.

-¿Dónde estas?- pregunta con la voz que significa te quiero en casa antes de 5 minutos.

-¿Para que me quieres?

- Ven a casa.

-Está bien. En cinco estoy ahí.

Cuelgo y cambio mi destino, pues no quiero que vuelva a cortar mi mesada, casa día era menos, mi padre sólo decía que era por mis bajas calificaciones pero nunca lo había hecho.

Llego a casa y veo el auto estacionado de Alan, el mejor amigo de mi padre, eso significa que adentro debe de estar la gorda de Serena. No se por que desde niños me ha gustado molestarla, pero hay algo dentro de mi que tan sólo verla siempre estoy diciéndole cosas.

Entro a la sala y ahí estaba mis padres l, acompañados de la familia de la gordis, me dispuse a saludar.
Frente a mis padres tenía que tratar bien a Serena, sino quería un buen regaño por parte de ellos.
Me siento frente a la susodicha esperando a que mi padre comince a hablar sobre el tema que quería tratar, supongo que debe ser importante.

Mi padre se pone de pie, me mira y dice-. Querido hijo, tenemos problemas con la empresa, estamos en la ruina y la única solución de salir adelante es que te casas con Serena.

Dirijo mi mirada a la gordis incrédulo de lo que escucho, ella sólo me miraba enojada, creo que  tampoco le agrada lo que  menciona mi padre, pero de repente se para y habla-. Charly, se que no somos ni amigos pero tenemos que hacerlo por tu padre.

La miré y de mi boca solo salen algunas palabras-. NO PUEDE SER.

Salgo de la casa, me subo a mi carro deportivo y voy directo a la casa de mi mejor amigo Emir, sólo escuchaba los gritos de mi padre, pero yo no podía aceptar casarme con la gorda.
¿Por que de todas las personas tenía que ser ella?

Llegué a casa de Emir, creo que está con alguna chica, no contesta mis llamada y no abre la puerta, esa hora el debería estar aquí, mi amigo es unos años mayor que yo, trabaja con mi padre. Me pregunto por que no me dijo en la situación que se encontraba la empresa. Después de 10 llamadas y varios golpes a la puerta, Emir sale cubierto Sólo con una toalla en la cintura, lo que colaboraba mi teoría de que estaba con alguien.

-Que quieres Charly- me miro con cara de pocos amigos. -Te dije desde ayer que hoy me iba a pasar tiemoo con la nueva secretaria de tu padre, por que interrumpes.

-Perdón amigo- Sólo digo eso y entro a su departamento.  -Puedes volver a lo que estaba haciendo, no es la primera vez que escucho los gritos de tus amigas.

-Ya terminamos, ella se sintió incómoda al escuchar tus gritos, ya se va.

Estoy pidiendo perdón a mi amigo, cuando veo que de la habitación  sale una chica no mayor a 22 años, alta, rubia; y con unas caderas que podrían descontrolar a cualquiera.  Me ve y en ese instante  se pone roja, le da un beso a Emir  en la mejilla y sale del departamento.