Llevo tiempo ya trabajando en El Club como mesero, y aunque no me va mal, no es lo suficiente para sacar adelante los gastos y las deudas se siguen acumulando, tendré que hablar con mi jefe para pedirle algo, y se que... se... que no me gustará, per...
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Advertencia, este capitulo incluye contenido explicito, solo apto para mayores de edad.
Mattew y Cole
Su sabor me ha mareado más de lo que pudo hacerlo el champagne, nos separamos un poco, solo un poco para poder tomar aire, con mis dos manos tomo su rostro y lo miro a los ojos es tan puro, tan inocente, no sé si debería hacer esto, estoy a punto de levantarme y salir corriendo de aquí cuando escucho su voz entre cortada... "perdóname yo no soy bueno en esto, entiendo si tú no..." callo su voz dandole un beso tierno pero a la vez demandante, sus manos son torpes me toca bruscamente y trata de halar mi ropa, separo mis labios de los suyos de mala gana.
Lo voy guiando despacio, le muestro como debe acariciarme, despacio a penas con un roce, y que cuando me bese con su mano vaya acariciando desde mi cuello hasta llegar a mi nuca y ahí entrelace sus dedos en mi cabello, mientras con la otra mano vaya desabrochando lentamente los botones de mi camisa....
Yo lo sigo besando, saboreando estos labios tan dulces, nos separamos cuando nos hace falta aire de nuevo, le voy dando pequeños besos por su rostro, su barbilla y voy bajando hasta su cuello, un gemido se escapa desde su garganta, ese sonido me hace estremecerme, le digo que ahora haga lo mismo que acabo de hacerle yo, comienza con sus pequeños besos temblorosos, siento sus suaves labios sobre mis mejillas, mi frente, mi nariz, detiene sus labios en los míos donde solo hace un leve movimiento, es más como un roce, va a hacía mi barbilla y a llegado a mi cuello, ahora él me a sacado un gemido y quiero que siga, cuando me percato está quitandome la camisa muy despacio, siento como roza la tela en mi piel, tan suavemente que me está haciendo estremecer, cuando la prenda a caido al suelo me acomodo en el sillón para tomar a Mattew de la cintura y hacerlo que se siente a horcajadas sobre mí.
Le doy un gran besó en sus labios, luego mordisqueo su cuello pero me empieza a estorbar su playera así que me deshago de ella... Oh por Dios!!! su piel es tan blanca, tan suave y tersa que no hago más que abrazarlo fuertemente pegandolo a mí, aspiro su delicioso aroma que a llegado hasta mi pene y se a puesto más duro, si es que eso es posible... quiere que lo saque de mi boxer ahora...
Sigo besando su cuello y voy bajando hasta su pecho, sus pezones son tan rosados y sensibles que se estremece con solo sentir mi aliento sobre ellos, sus gemidos no paran y eso me satisface y me excita aún más...
Mientras tanto él con la yema de sus dedos va rozando mi pecho, sube a mis hombros y comienza a bajar por mi espalda, eso me altera demasiado y muerdo su cuello, él en reacción entierra sus uñas en mi espalda y siento como una gran electricidad recorre todo mi cuerpo, tomo su cintura y lo comienzo a mover de adelante hacia atrás de modo que nuestros miembros se rocen con movimientos lentos pero fuertes al mismo tiempo, mientras él sigue ese ritmo yo le acaricio la espalda y él la mía, nos besamos ahora más desesperadamente, me hace perder la cordura...
Sin dejar de besarlo me levanto cargandolo entre mis brazos, él se aferra a mi cuello con sus brazos y rodea mi cintura con sus piernas, camino hasta la cama y lo recuesto despacio, con una mano voy desabrochando su pantalón y él hace lo mismo con el mío, lo voy llenando de besos hasta formar un camino y llegar al elastico de su boxer, sus gemidos son continuos y van aumentando poco a poco, comienzo a lamer su pene sobre esta delgada tela que nos separa y lo oprimo con mis labios, veo como se retuerce ante lo qué está sintiendo y a mí se me hace agua la boca, bájo su boxer solo un poco hasta descubrir su pene, es muy hermoso, es claro, con su punta rosada y unas venas qué lo adornan, se vé delicioso, algo aperlado va saliendo de él, es su pre-semen que sin dudar lo lamo y eso hace que él suelte un gran gemido, eso me da pie a terminar de quitarle este boxer y el pantalón que me estaban estorbando...
