Ahora soy una. (CANCELADA)

Primer martes como chica

Yo me encontraba en la cama cuando de repente llego mi mamá y me despertó, diciendo ponte esto, hoy iremos a comprar algo de ropa, algo de ropa.

Yo como es usual me negué, pero la cara que había puesto daba tanto miedo, que no tuve mas opción que ir sin decir nada mas. Cuando salimos mi mamá me pregunto que me pareció los arreglos que me hicieron ayer. 

-Pues fue horrible, no quería hacer nada de eso, odio que me pinten las uñas, odio lo tardado que es arreglarse el cabello y ademas la depilación fue dolorosa- Le respondí a mi mama con un tono en extremo enojado. 

-No crees que te estas engañando a ti mismo, porque si realmente odiaras eso ya te hubieras despintado las uñas- Dijo mi mamá

Antes de que tuviera una oportunidad de responder, llegamos a la tienda entramos y mi mamá me arrastro a la ropa y me dijo quédate aquí, espere un rato y cuando volvió tenia como 7 pantalones y me dijo pruebátelos.

-Yo entre al vestidor y me probé el primero- Y le dije a mi mamá que el pantalón me quedaba algo ajustado me dijo que saliera y me dijo -Tonterías, te queda de maravilla- Dijo mi madre.

Paso un rato y ella estuvo dándome un montón blusas y pantalones para que me probara, honestamente me sentía como si fuera una muñeca cuando veía las reacciones de mi madre. Después de eso fuimos a otro lugar y paso mi mayor temor, mi mamá me va a llevar a comprarme vestidos.

Lo primero que me dio fue un vestido negro con puntos blancos y lo probé y me odie a mi mismo porque el vestido me encantaba, después salí para que mi mama pudiera verme, pero no la encontraba, no la veía por ningún lada y de pronto se me acerco una chica que trabajaba ahí diciendo que mi madre se tuvo que ir, y la veré en la casa. Yo no podía creer lo que me había hecho, ahora tendré que ir a casa solo, entonces estaba por irme pero la chica me detuvo y me entrego una bolsa que tenia un mensaje, puedes gastar todo el dinero que quieras de la tarjeta, después de todo es tu dinero, firma mamá.

Salí del lugar y me dispuse a regresar a mi casa, pero cuando caminaba pase por una zapatería y vi en la vitrina de afuera unos tacones que me enamoraron apenas verlos, pero no paraba de golpearme la cabeza porque no me pueden gustar esas cosas, pero a pesar de resistirme entre y me quede mirando un montón de tacones, hasta que una chica se me acerco y me dijo - Te gustaría probarlos- Yo como era obvio empece a negarme -¡¡¡Siii!!!- Dije con muchísima ilusión, me odio a mi mismo.

-Wow, creo que realmente te gustan déjame traerte uno de tu talla- Dijo la chica de la tienda.

Pasaron unos minutos y me los probé, me encantaron, pero no me limite solo a ese par, ya estaba ahí y me termine probando muchos zapatos, daba algunos pasos y solo podía pensar que eran muy hermosos, me gustaban tanto que ni siquiera me tome el tiempo para pensar cuando me estaba odiando, porque la chica que hay en mi interior cada vez se vuelve mas fuerte.

Al final termine comprando un par de tacones, y si me estoy odiando a mi mismo, pero eso no evito que guardara los tenis que traía en el bolso para irme caminando con los tacones. Yo pensaba que me costaría mas acostumbrarme a caminar con estos, pero supongo que por el deseo que Alice pude hacerlo de manera automática. Mientras caminaba estaba viendo las tiendas que había a mi alrededor y por no prestar atención termine chocando con una chica y ambas caímos al suelo, apenas la vi me di cuenta que era una chica de mi antigua clase, se llamaba Melania, nunca la conocí, pero recuerdo de que ella siempre trataba de hacer feliz a todo el mundo, recuerdo que en una ocasión ella dijo que quería ser psicóloga porque quería ayudar a la gente a superar sus problemas, y me acuerdo bien de ella, porque siempre que me veía solo ella se me acercaba, realmente me molestaba que no me dejara en paz. 

-Auch ¿estas bien?- Dijo Melania

-Si lo estoy ¿y tu?- Le respondi

De repente ella se me quedo mirando fijamente, cuando nos paramos ella empezó a mirarme y dar vueltas al rededor de mi, me miro y me dijo -eres muy linda, ven con migo- después de eso tomo mi mano y me llevo corriendo a un lugar, cuando llegamos vi que ahi estaban otras personas de mi antigua clase que conozco, Guillermo, Antonio y Arlet, todas personas que me caían mal, eran justo el tipo de persona que odio y que solo se fijan en las apariencias, recuerdo claramente como en una ocasión Arlet y Antonio no paraba de insultarme por que no era el estereotipo de un hombre atractivo y recuerdo claramente que Guillermo es probablemente la persona mas narcisista del planeta.

-Hola, Arlet, Antonio y Guillermo, miren a esta chica- Justo después de eso me empujo para el frente mi todos se me quedaron viendo.

-Melania ¿que prendes al traerla aquí?- Dijo Arlet con un tono odioso.

-Pues muy simple, ella actuara con ustedes en nuestro filme- Dijo Melania con una gran alegría en sus palabras

-No la necesitamos, con migo en la película tenemos el premio garantizado- Dijo Arlet con un tono en extremo presumido

-Por ultima vez, Arlet necesitamos mas chicas para el filme y ella entra- Antes de que Melania tuviera la oportunidad de terminar su frase, Arlet la interrumpió y empezaron una discusión. 

Mientras ellas discutían se me acerco Antonio y me dijo -Te noto algo preocupada, y por tus reacciones veo que eres una chica tímida, ¿realmente estas bien con esto?- Yo como es obvio le dije que no tenia ni idea de lo que estaba pasando que solo me arrastraron aquí, justo en ese momento Antonio dejo un grito y dijo -Melania ¿la arrastraste aquí sin decirle nada?

-Buenooo, esto digamos que no es tan sencillo- Dijo Melania algo asustada

-Bueno, si quieres puedes irte- Dijo Antonio

Inmediatamente después de eso, yo me fui de ahí, solo quería regresar a casa, pero antes de ir muy lejos, se me acerco Antonio -Oye esto nunca nos presentamos soy Antonio ¿como te llamas?- 

-Me llamo Jayden- Le dije a Antonio

-Jayden he, lindo nombre, bueno ¿te gustaría vernos mañana?- En ese momento yo no podía creer lo que estaba pasando, me quede en shock durante un momento pues me acababan de invitar a una cita. Antes de que tuviera una oportunidad de responder, alguien se me acerco por detrás y dijo -claro que le encantaría tener una cita contigo- voltee y me di cuenta de que era Alice quien lo dijo. 

-Buenos nos vemos mañana a las 3- Lo dijo y volvió por donde vino.

-Pero ¿que te pasa?- Le grite a Alice

-Lindos zapatos, mi tía no me dijo que te compro unos, no me digas que te los compraste tu- Dijo Alice

-Pero que demonios dices, no los estoy usando por gusto- Le dije a Alice

-Supongamos que es verdad lo que dijiste entonces ¿por que guardas los tenis que traías antes en el bolso en vez de usarlos- Yo no podía responder a eso a si que solo me quede callado y antes de poder decir algo Alice volvió a hablar -Mira Jayden, no tiene nada de malo que los uses, no te avergüences, solo debes aceptar que eres una chica- Después de eso volvimos a casa.

No podía parar de pensar en las palabras de Alice, debería aceptar que me estoy volviendo una chica, debería empezar a actuar como una y mas importante ahora me seguirán gustando las chicas o voy a empezar a sentirme atraído por los chicos.