Pensamientos perdidos

Pedazos

¿Alguna vez has escuchado los pedacitos de corazón que se caen cuando empiezas a crear paranoias tontas y sin sentido? 

Pues yo llevo un mes entero sintiéndolo todos los días sin saltarme uno. Claro que antes también lo sentía, pero ahora más. 

En el fondo es gracioso, porque yo antes criticaba a los adolescentes que iban en plan que nadie les entiende, pero ahora les entiendo. Si fuera una persona con la desdicha de ser presa de ojeras, mis dos cárceles cubrirían toda mi cara.

Una semana sin dormir y los días van aumentando. Y ahora aquí estoy, estamos a 19 de junio a las 22:00 para ser exactos. Pero para mi es un día más. 

Mentira, miento, hoy empieza mi época favorita y a la vez la más odiada a partir de este año.

No entiendo como siguió a mi lado tanto tiempo, debo de ser una de las personas más celosas, bordes y rencorosas del mundo. Y luego estaba él, con su gran sonrisa, esa que me arrebató. 

Me hubiese gustado recordarle todos los días que gracias a él mi día a día era más feliz y sonreía por todo.

Pero no quería ser pesada, ¿por qué no lo fui? 

Lo siento si alguna vez te pusiste mal por mi culpa pero se me daba mejor escribir lo que sentía que hablarlo. Por eso quería escribirte algo así aquí, pero ahora ya es tarde. 

He visto a mucha gente llorar de emoción, emociones buenas, me encanta la gente así y yo lo que solo conseguía era llorar de tristeza por ti. 

Eres el culpable de todo lo que escribí y escribo. Otra vez hablando de ti... ¿Me cansaré alguna vez?

A lo que iba. A veces el mundo es dulce pero casi siempre cruel, te arrebata lo que más quieres. Y esta vez así ha vuelto a ser. Te vas, sí te vas, pero puede que te vayas físicamente pero de mi corazón jamás. Ya se sabe, el primer amor siempre es una lección de la vida y permíteme decirte que has sido y siempre serás mi mejor lección.