Agoraphobia ¦ Genink.

71.

El tiempo había sido cada vez más favorecido para Geno, puede que al principio le costara salir a compañía de su amigo, pero estaba teniendo más valor a medida que pasaban los días.

Un amigo, así había insistido aquel esqueleto con ojo de estrella, sonriente y animado por el avance propio, en pocos meses iba a poder salir de aquella prisión llamado hogar, poder vivir, ser alguien otra vez.

Todo se lo debía agradecer a sus hermanos y especialmente a Ink, si no fuera por él, su avance sería mínimo, ni siquiera existiría alguna.

Tenía que agradecerle de alguna manera todo su esfuerzo, aun fuera trabajo.

"Abre la boca." 

Suspiró y asintió sin rechistar en la petición del psicólogo, recibiendo una galleta de vino, como seguía con los ojos cerrados después de terminar la meditación recibía distintos dulces al terminar, chocolates, a veces una cucharada de algún helado o galletas, sonrió saboreando el sabor y pronto abrió las cuencas, le gustaba de alguna forma ver primero a Ink que al jardín, era un apoyo, le gustaba su compañía.

" ¿Y como está? "

" ¿Las compraste en la tienda de la esquina? "

" Sí. "

" ¿Cuando me darás algo preparado por tus manos? "

" Lo hago en el almuerzo, ¿no? "

" Me refiero a algún postre. por lo que he notado solo has comprado algunos dulces. Si quieres yo te compro los ingredientes para que no gastes dinero demás. "

" ¿Desesperado por mis habilidades? Algún día aceptarás que mis almuerzos son tus favoritos. "

" ¿Tengo que decirlo para que sea un hecho? "

Ink quedó sorprendido ante esa respuesta, y bajó la mirada al paquete de galletas, Geno al desviar la mirada hacia las hermosas flores no notó aquel bello rubor del menor.

" Hehe, b-bueno... " Tragó saliva y sacó una flor blanca, dejándola en la bufanda del paciente. Sonrió, aún conservando aquella tonalidad en sus pómulos. "Entonces algún de estos días te haré otra sorpresa más por mi buen amigo Geno ~"

El mayor al verlo también se sonrojó, asintió.

Ahora más que nunca quería darle un regalo.