Capítulo 14

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"Back to You"


—¿Qué es lo que está pasando, Michelle? —Su abuela le preguntó mientras se servían una taza de té.

—¿Con qué? —Lauren trató de hacerse la desentendida.

—Tus padres parecían estar alterados al ver que pagaste esa suma de dinero por la señorita Cabello.

—¿Le conoces? —Ella asintió.

—Más de una vez hemos coincidido en un evento, ella siempre ha sido muy agradable. —Lauren mordió su labio.

—Mis padres solo están molestos porque he pagado eso por una chica. —Lauren miró su taza acariciando con su dedo los detalles de la porcelana.

—Creo que va más allá de eso. —Lauren miró su abuela.

—Camila Cabello es la chica con la cual... salía cuando estaba en el instituto. —Angélica le miró sorprendida. —Sé que ahora es la novia de Alessandro y créeme que no lo hubiera hecho si Mahone no hubiera pujado por ella, es un hijo de...

—Lauren. —Su abuela le cortó antes de que terminara y Lauren le miró en forma de disculpa. —¿Estas bien con esto?, si quieres puedes cancelar y...

—El dinero es para la caridad, ambas sabemos que no necesito ese dinero. —Angélica sonrió. —No puedo creer que Alessandro se rindiera por dinero.

—Yo si lo puedo creer.

Lauren abrió sus ojos adaptándose a la luz que entraba por la gran ventana del salón de su departamento, se estiró un poco agradeciendo que aquel sofá fuera tan cómodo. Cuando se sentó sintió el aroma a café recién preparado, se levantó con pereza y cuando entró a la cocina se detuvo para observar sorprendida a la castaña que preparaba el desayuno. Solo iba con una polera y un pantalón corto que dejaba ver sus piernas.

—Buenos días, Lauren. —Camila se giró. —He preparado el desayuno.

—Uhm, gracias. —Lauren se sentó y por un momento creyó seguir dormida. Camila le puso en frente un plato lleno de panqueques junto a una taza de café. —Pensé que ya estarías en CANDL.

—Me he dado el día libre, ayer adelante bastante trabajo para poder descansar, aunque sea un día. —Lauren solo asintió sin comentar nada, aquello significaría que pasarían todo el día juntas. —Gracias por cederme tu cama, pero siento que no es lo correcto.

—Eres mi invitada, no dejaré que duermas en el sofá.

—Podrías dormir conmigo. —Lauren empezó a toser fuertemente, Camila le tendió un vaso de agua. Antes de que Lauren pudiera decir algo, su teléfono sonó. Keana.

—Con permiso.

—Adelante. —Lauren se levantó yendo fuera de la cocina.

—¿Keana? —Preguntó Lauren.

—Que comes que adivinas. —Lauren rio. —Hey, sé que hoy estas libre luego de todas las sesiones del mes y estaba pensando que quizás podríamos ir a comer algo y luego ir a alguna parte.

—Eso suena genial, —Lauren sonrió. —tendría que arreglar unos asuntos y te aviso.

—Claro, espero tu respuesta. Hasta luego.

—La obtendrás, nos vemos, Keana. —Lauren colgó y volvió a la cocina en donde Camila comía en silencio. —Lo siento, cosas del trabajo. —Camila solo asintió mirando su comida. —¿Te molestaría que te dejara un rato en la tarde?, debo ir a resolver unos asuntos.

—Puedes hacer lo que quieras, Lauren. —Camila se levantó dejando el plato en el lavabo y yéndose a la habitación de Lauren.

Aquel día parecía ser una tortura para Lauren, ver a Camila durante todo el día y que ella luego del desayuno apenas le hablara le empezaba a incomodar. Se había preparado para salir con Keana, pero debía esperar un rato para que el horario de trabajo de la editora terminara, fue cuando vio a Camila en el sofá mirando una película en la televisión.

—¿Qué ves? —Lauren se sentó a su lado robándole unas palomitas.

—The Notebook.

—Tu película favorita. —Camila solo asintió. —Recuerdo que siempre querías verla, además la vimos el día en que...

—Nos besamos por primera vez. —Camila terminó. —Lo recuerdo.

—¿Algo te molesta? —Lauren le preguntó y Camila notó su preocupación. —Si quieres puedes decírmelo.

—Me molesta que a pesar de que gastaras ochocientos mil en mí, prefieras irte con Keana. —Lauren le miró sorprendida.

—Si yo he gastado aquello es por el estúpido de tu novio no fue capaz de gastar más dinero por ti para evitar que fueras con un imbécil como es Austin. —Camila desvió su mirada. —No podía pensar en Austin contigo una semana, él podía hacerte algo.

—¿Por qué piensas eso? —Camila le miró.

—Porque yo no soy una estúpida ciega, Camila. Yo sabía que hacías con todos en la escuela y aquello no me importaba ni me importa porque estuve jodidamente enamorada de ti desde la primera vez que te vi. Sabía que hacías en cada fiesta y terminaba yéndome porque mi corazón no lo resistía, prefería no ir a las fiestas. También sabia como eran los chicos cuando los rechazabas y sé cómo es Austin, sé que él te golpeó más de una vez por negarte e irte. —Lauren le miró con lágrimas en sus ojos. —No podía permitir que pasaras por eso una vez más. —Camila limpió la lagrima que cayó por la mejilla de la mujer de ojos verdes. Cuando Lauren se iba a apartar para irse, Camila tomó el cuello de su chaqueta y la atrajo a ella para juntar sus labios.

Esta vez no fue como su primer beso, Lauren le correspondió rápidamente sin notar cuanto había deseado aquello. Aquel beso tomó un sentido especial para ambas, no habían notado lo mucho que se habían extrañado sus labios hasta aquel momento. Era un beso ansioso y Camila sentía que estaba temblando, ambas por un momento habían subido al cielo.

—Te odio. —Camila murmuró sobre sus labios. —Te odio por hacerme esto, me está estresando este sentimiento, siento que me estas matando, Lauren Jauregui. No sé cómo hacer que mi corazón se detenga, siento que tendré una taquicardia. —Lauren abrió sus ojos para mirarla. —No puedo soportar esto, pero de alguna forma terminé volviendo a ti. —Por primera vez Camila estaba siendo sincera con alguien respecto a sus sentimientos.

—Mis amigos me dijeron que debía pasar página, que te sacara de mi mente, no creas que no lo he intentado. Pero de alguna forma me siento atada a ti. —Camila se sentó sobre el regazo de Lauren y acarició su cara lentamente. —Me tienes tan adicta al drama.

—Y tú me tienes adicta a ti, Lauren.

Y aquel día marcó un antes y un después en la vida de ambas, aunque ellas ni siquiera lo sabían. Lauren no fue en busca de Keana quien le espero por media hora y le llamó, pero esta no contestó pues estaba hipnotizada una vez más en Camila. Alessandro le enviaba mensajes a Camila, pero esta no le contestaba pues por primera vez luego de tanto sentía que estaba besando a la persona correcta, él solo se fue al gimnasio pues debía mantenerse en forma. Zayn hablaba por teléfono con Normani preocupado por lo que podía pasar con Lauren y Camila, mientras la morena trataba de ponerle atención, pero la verdad es que su atención la tenía la rubia que estaba pidiendo un café para ella.

Por otro lado, el matrimonio Jauregui hablaba preocupados por su hija, no solo por la imagen que había dado en la última reunión, sino por lo que significa que ella se volviera a involucrar con Camila Cabello. Mientras que Angélica a pesar de haberse retirado de la administración de los negocios, estaba hablando con un importante empresario junto a su abogado, sabía que debía saber algunas cosas que desde hace mucho le preguntaba a Angélica y que sabían que la unión de ambas empresas sería un gran paso que les llevaría a la cima.

Aquel día empezaba a marcar un antes y un después en la historia de todos, y ellos recién iba a empezar a tomar conciencia de eso. 

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