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Narra Marshall lee:

Un fuerte golpe me despertó y cuando abrí los ojos lo único que vi fue el suelo. Me caí otra vez de la cama.

Me fui a la cocina y me busque una manzana. Fácilmente le clavé los colmillos y saque de ella todo jugo y color rojo posible. Mientras me dirigía a mi habitación me entró una llamada.

-Hogla-dije lo mejor posible mientras me terminaba de tragar el jugo.

-Hola marshall, soy el dulce príncipe-

-¡Ah! Hola príncipe, ¿que sucede? ¿Tu corona se te calló y necesitas que alguien te ayude? Jajajajaja-dije divertido.

-!Ahg!...no, solo necesitaba tu ayuda para otra cosa...-

-¿Que te paso ahora?-

-Últimamente hay una infestación de Minishs y la última vez tu los pudiste controlar...-

-¿Ósea que quieres que haga lo de la última vez?-

-si, por favor-

-¡Oh no! No lo haré, terminé realmente mal después de eso-

-Marshall, por favor, no sería bueno que cosas de otras dimensiones entren a nuestro mundo...-

-Ah~...esta bien, me prepararé, déjame la medicina lista-

-si si~ te esperó en puertas del palacio dentro de 1 hora-corto la llamada.

Dejé el teléfono en la mesa y fui por un paquete de papás fritas.

Fui hasta mi habitación y me puse unos jeans azules, una camiseta tipo musculosa blanca y unos tenis negros.

Me terminé las papas fritas, fui por mi sombrilla y salí de mi casa.

Al salir de la caverna me llego un poco de sol al brazo y me quedo una quemadura, bastante fea a lo normal, al parecer la primavera estaba comenzando.

Salí volando lo mas rápido posible tratando de cubrirme lo que mas podía del sol con mi sombrilla.

Llegué bastante rápido a puertas de palacio y ahí me estaba esperando una banana guardia. Me llevo al palacio y en cuanto pude estar bajo la sombra me quité la sombrilla y la tiré por ahí.

Entré de lo mas normal dirigiéndome al laboratorio, toqué la puerta y después de unos segundos me abrió mentita. Entré como si nada y me senté frente al dulce príncipe que estaba haciendo algo científico con cosas de muchos colores, no entendía mucho realmente de ciencia así que no me importaba mucho.

En cuanto terminó, dejó sus gafas raras de lado y me miró serio al parecer esperando que dijera algo.

-¿Que?-dije desanimado y con una de mis manos en mis mejillas apoyándome.

-¿Listo?-le entregó su bata a mentita.

-Supongo-me dirigí a uno de los estantes y de este saqué un poco de bloqueador solar y me comencé a aplicar mientras iba caminando junto al dulce príncipe hacía puertas de palacio. Salimos al pueblo y una guardia banana me dio mi sombrilla.

En cuanto logré oler a los minish el dulce príncipe dio órdenes de abrir una compuerta en el castillo y yo me tuve que convertir en un murciélago gigante.

Volé hacia donde los minish que no se reunían. Tuve que agarrar unos cuantos con cara de asco y me los comencé a comer, los demás al ver esa escena comenzaron a correr y salí a perseguirlos hasta que se terminaron de reunirse todos y volvieron a correr pero con los guardias banana los acorralamos y su última salida era la compuerta del castillo. Entraron a esta y cerraron de inmediato.

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⏰ Última actualización: Feb 01, 2019 ⏰

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Humana intrusa (Marshalee Y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora