Vampire Kingdom

Trust

Me desperté cuando el calor del sol que traspasaba las ventanas chocaba en mi rostro. Era la manera que Niel me despertaba, abría las ventanas de mi habitación, también dejaba una bandeja en una pequeña mesa a un lado de mi cama con un gran desayuno; carne cruda y una que otra cosa que también comen los humanos.

Desayuné para tener energía y tomé una ducha tibia. Hoy tendría que ir a una de las academias de entrenamiento para hechiceros. Hace mucho no utilizo mi magia pues un rey no puede estar jugando con sus habilidades.

Soy el único hechicero de mi árbol genealógico. Digamos que soy quien ensució toda una herencia entera de vampiros puros. Pero mi padre se enamoró de una hechicera—mi hermosa madre— desde que era pequeño me prohibieron usar la magia, pero a veces me escondía en un jardín secreto de este castillo y hacía todo tipo de hechizos, era cuando podía comportarme a mi edad, como un niño que era.

Mis músculos se relajaban con el agua tibia. Cerré mis ojos para disfrutar la relajante sensación. Estiré mi mano en busca del jabón, pero no estaba donde solía dejarlo. Quizás había resbala...

—¿Buscabas esto?

Resbalé cayendo en la tina al ver a Andrik con el jabón en la mano.

—¡¿Qué haces aquí?! –me levanté rápido saliendo de la regadera tomé la primera toalla que encontré, y la enredé rápido a mi cintura, estaba avergonzado al ver como ella reía mientras jugaba con el jabón que había tomado. No la había escuchado entrar.

—¡Estoy aburrida! Además hay sirvientes para todo, me siento inútil. Por poco y me quieren ayudar a sentarme en el inodoro. –la chica hablaba mientras inspeccionaba cada detalle del cuarto de baño–. Inodoro, I no do ro...creo que es una palabra rara.

—Tú eres rara...

—Tú eres más raro, además no sé que te cubres...Es-po-so. –Dijo la ultima palabra con sarcasmo.

—Más respeto.

Salí del baño aquel, y me dirigí a mi armario para vestirme rápidamente.

—Pero, no sé si esperas que tengamos sexo porque a mi me gustan las mujeres. Siento arruinar tus planes.

"!¿Qué?!" Me acerqué rápidamente a ella con el entrecejo fruncido.

—¿Por qué no me dijiste antes? –Trate de preguntar lo más calmado que podía.

—Como si me hubieras dado el tiempo de decírtelo. –Empezó a reír mientras se acostaba en la cama–. ¿Tienes televisión?

—Bueno, pero nadie se enterará de eso, Andrik se supone que ya no puedo elegir a alguien más. –Ella solo hacía gestos "imitándome"–. Así que será un secreto. Nosotros no vemos televisión, y una cosa más –tomé su mano para hacer que se sentará y me mirara a los ojos–. Tienes que hablarme de "usted"

—Pero claro Rey Zaá –Se levantó para hacer una reverencia  sobre actuada–. No, la verdad no le hablo de usted a personas de mi edad o menores, ¿Qué haces para divertirte?

"Pero está niña es un dolor de cabeza"

—Andrik, tenemos que hacer cosas, tenemos que ir a la academia de hechiceros. Digo "tenemos" porque eres mi futura esposa –Bufé–. ¿Qué es lo que realmente hacías cuando los guardias te capturaron?

—Solo estaba mirando por las ventanas, después dijeron que no podía hacerlo y blah blah blah. Después uno de ellos dijo que olía a humano y me trajeron hasta ti, pero cambiando de tema, que genial ver a hechiceros haciendo magia.