Capítulo 23

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El espejo me devuelve el reflejo cansado, mis piel está pálida y tengo bolsas bajo mis ojos. Hace una semana que estamos en New York y ha sido duro el trabajo que junto a Flynn hemos venido haciendo.
Desde aquel día que ese vehículo nos persiguió a las afueras de Estocolmo no he tenido sosiego.
De ella no tuve más noticias, mi corazón esta afligido y una tristeza se ha instalado en mi alma, no sé qué significado tuvo aquella noche, pero empiezo a creer que fue nuestra despedida.
Lloré esa tarde al volver con Flynn a la ciudad, por el pánico que me tenía invadida y por la impotencia de no poder hacer nada para cambiar aquello.

Los días se fueron haciendo eternos en el periódico, evite pensar en ella, pero mi mente me llevaba una y otra vez a su recuerdo.
El día que abordamos el vuelo a New York sentí que alguien nos vigilaba en el aeropuerto, estaba hecha una manojo de nervios. Nunca confirme si eran sólo temores de mi mente o si realmente nos seguían.
En que piensas -se apoya en mi hombro izquierdo y la observó a través del reflejo- has estado muy callada y eso es
¡Raro!
Anormal diría
Me giro y fijo mis ojos en los suyos.
¿Por qué renunciaste?
Inclina su cabeza y veo que está elaborando una respuesta mucho más convincente que la que nos dio a Flynn y a mi hace un par de días.
Estaba cansada de Kristoff y de la monotonía del New Age
¿Seguro que fue eso Bella?
No confías en mi - toma mis manos entre las suyas y baja la vista esperando una respuesta-
Hay algo que no me estás diciendo
Sus ojos ambarinos vuelven a atravesar los míos, en ellos noto algo de miedo.
No Anna, te digo que fue ese el motivo principal
Escucho la voz de Flynn al entrar en aquel departamento temporario que rento para ambos, y por inercia empujó a Bella hasta que su espalda choca con la puerta del baño, cerrándola de esa manera.
¿Y el motivo secundario? ¿Cuál fue?
No me percato de lo cerca que estoy de su rostro hasta que logró sentir la cálida respiración en mi piel, su nerviosismo aumenta y en vez de apartarme optó por quedarme en esa posición.
No hay un motivo secundario
Se queda viéndome y por breves segundos noto su mirada desviarse a mis labios, mi cerebro hizo un clic ante aquello y así como la puse en esa situación de manera abrupta, así mismo me aparte.
¡Hey! Pensé que no estaban
Flynn esta de espaldas y no se ha dado cuenta de nada, inhaló aire y trato de que mi voz suene natural.
Estaba viendo mi patético estado
No me pareces patética Anna
Bella se apresura a responder y él se gira en dirección nuestra.
¿Y tú como te sientes? Al fin libre del yugo de Kristoff
Sonríe y se cruza de brazos.
Al fin soy libre - abre los brazos y los agita como si fuera a salir volando -
Debería hacer los mismo
Cállate Ryder, no vayas a seguir mis pasos
¿Por qué New York?
Me encaminó a la cocina y sirvo una taza de café recién hecho mientras espero su respuesta.
¿Y por qué no?
Alzo mi vista y busco su cara, hay algo diferente que me desconcierta e inquieta a la vez.
Esa estuvo buena Bella- Flynn apoya su osadía-
Será mejor que nos demos prisa, Quinn nos espera
Corto aquella charla y salgo directo a la habitación a cambiarme, cierro la puerta y me apoyo en ella. Tengo una sensación extraña desde que Bella apareció en la puerta del departamento, tal vez estoy distorsionando todo, y me hago ideas que no son. Ella es mi amiga, una de las pocas si acá no la única mujer que me ha entendido desde que estoy en ese lugar.
Sacudo mi cabeza y con ella aquellos pensamientos absurdos.
Me meto en esos vaqueros gastados, acomodo esa camisa a cuadros de leñador azul y dejo mi cabellera rojiza suelta.
¡Vamos!
¡Opa!
¿Qué?
Me de tengo en el marco de la puerta y veo a Flynn con ganas de tirarlo por el ventanal.
¡Lastima!
¿Qué?
Qué te guste la empanada
Eres un idiota Flynn Ryder
El tiene razón -Bella se planta en medio del salón y dibuja una tenue sonrisa- Para él es una lástima no poder tener una oportunidad
Miro a Flynn quién se ha quedado boca abierta y vuelvo mis ojos sobre ella, apenas dibujo una sonrisa y me giro para salir de ahí. Definitivamente no es producto de mi imaginación aquello.

**
Y una toma más
La modelo gira con aquel perfume caro entre sus manos.
Eleva un poco el mentón
Hace exactamente lo que pido con movimientos delicados.
Genial, hemos terminado
Los ayudantes apagan los focos de iluminación y la modelo tras sonreírme sale de la locación.
Estás en tu salsa Ann
Estoy con la cámara verificando las tomas e ignoro el monólogo de Flynn.
Creo que hay algo raro con Bella
Dejo lo que estoy haciendo y fijo mi atención en él.
Digo ya sabes - se rasca la nunca como siempre hace cuando está nervioso- antes de salir
No vayas por ahí Flynn
¿Qué?
Ni lo digas, ni si quiera lo pienses
Pero...
¡Nada!
Lo dejo a solas y me marcho hacia los camerinos.
Voy por aquel pasillo enojada más conmigo que con él. Fui una idiota que no logre ver lo que ocurría a mi alrededor por estar pensando en Elsa, y ahora estoy en está incómoda situación.
¡Perdón!
Una chica tropieza conmigo accidentalmente, enfocó y me quedo helada.
¿Anna? ¿Eres tú?
Quiero contestar pero las palabras se han esfumado de mi garganta, apenas respiro mecánicamente y no puedo sacar mis ojos de ella.
Ha pasado tiempo
Apenas es un susurro, pasa un mechon de pelo tras su oreja y baja la vista al suelo.
¡Anna! Menos mal aún no te has ido
Flynn llega a mi altura y se detiene extrañado, la ve a ella y luego a mi en busca de alguna explicación por tan anormal comportamiento.
Hola, soy Jazmín
Sus ojos casi se salen de sus órbitas y con apenas un leve movimiento le confirme, si ella es Jazmín, la que me hizo pedazos el corazón hace años.
¡Oh! Jazmín ¿Jazmín?

**
Estamos en aquel café prácticamente mudos, de todas las posibilidades de encontrarme a alguien en está ciudad, la menos pensada era ella. Aún recuerdo aquella bofetada que me propinó sólo por confesar mis sentimientos hacia ella.
Tienes una jodida suerte Anna
Ni qué lo digas
Y ella fue, ya sabes
Si
Se revuelve el cabello y mantiene el ambiente en silencio.
Es guapa
Ajá
Qué sentiste, digo al verla luego de
¡Desprecio!
¡Wow!
Tomo un sorbo de la fría cerveza y luego aclaro mi garganta.
Me lastimo Flynn

Igual que la reina del hielo - replica-

Ella no me ha lastimado

No, por eso estamos acá

Flynn ella ni si quiera sabe

¿Qué no sabe Anna?
Escúchame crees que no sabe que su padre es capaz de cualquier cosa por lograr sus objetivos, realmente ¿crees que es inocente?

La amo

Y a Jazmín ¿no la amabas?

¡Es diferente!

Es igual Anna, sólo que las circunstancias son diferentes

No quiero hablar de eso ¿si?

Entonces hablemos de Bella
Esta vez el sorbo de la bebida revitalizante fue más grande.
¿Qué hay con Bella?
Aquella inocente pregunta fue mi perdición esa noche, Flynn me hizo abrir los ojos y recibir un balde de agua helada encima. Lo que empecé a intuir, no era una vaga percepción, sino una realidad con la que choque de frente.
Esa noche dejé a mi mejor amigo y me fui a caminar por aquella gran ciudad. Necesitaba aire, soledad y paz.
Mis pasos me llevaron por calles y manzanas de la ciudad que nunca duerme.
Ahí en medio de aquel parque visto en las películas, estaba yo. Recuerdo ese puente de "Mi pobre angelito" y detuve mis pasos allí, la noche estrellada acompañaba mi recorrido.
Su rostro podía verlo en el reflejo del agua que corría bajo el puente. A mi memoria viene aquella noche en Bora Bora. O la primera vez que la conocí, mi torpeza y su sonrisa deslumbrante. Sus ojos azul zafiro avasallantes.
No resisto la tentación y saco el teléfono de mi mochila, le marco. Suena una, dos, tres, cuatro, cinco y voy a colgar.
¿Quién habla?

Nieve y FuegoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora