Un amor de la salada［HOT］

El encuentro

*Viernes por la noche*

Suena el timbre, No esperaba a nadie. Sólo espero que no sean seguidores. Bajo y me encuentro a Pedro, no puedo creer que esté acá, pensé que venía mañana. Subimos a mi apartamento y entramos al cuarto. Pedro se acercó lentamente hacía mí. Al verme, se sacó la remera, yo hice lo mismo. Se le trabó un poco en las orejas y el nazo, pero lo ayudé. Él me sacó el short, me puso en 4 y empezó a darme nalgadas, con sus orejas tan hermosas. Me excitó.

-Ah -gemí, solo una vez.

-Te gusta ¿No? -preguntó y siguió.

-Me encanta -luego de un rato el me acostó (hacia arriba)Con mi ayuda, logró sacarse el pantalón de la selección que tenía puesto, sus rodillas huesudas me ponían, él ya tenía eso demasiado sabido. Estabamos los dos en ropa interior. Nos necesitábamos. Bajó hacia mi zona femenina (ahre bien ahrrido), me sacó mi braga (JAJAJJAJA) y bajó nuevamente hacia mi entrada.

-¿Querés?

-Con vos quiero todo -contesté. Empezó a chupar, su nariz hacia tacto con mi clitoris, mientras él, la movía para provocar mil emociones dentro de mi vagina. Efectivamente, todo iba excelente; se sentía tan bien, mientras cantabamos 'mantenlo prendido fuego, no lo dejes apagar y grita fuego' a su ritmo me penetraba. Él cantaba candy perreo porque es un boludo pero bueno así se le quiere.

-Acabé - dijo.

-tampoco me cuentes tu vida - contesté.

- Estuvo bien sabroson al ritmo de las olas sucundum sucundum- preguntó.

-sí. - contesté. Me quedé dormido en su pecho. Al día siguiente me desperté y vi sus orejas rojas, supe que estaba excitado y en ese momento supe que hacer. Bajé hacia su miembro y lo comencé a masajear.

- Ggrrksnms- Gruño excitado.

- Te gusta bebé?

-mmm si que linda manera de despertar- Dijo y en ese momento me la metí en la boca AHRE. Después de eso nos bañamos y fuimos a tomar un helado.

- Cuál es tu sabor favorito de helado?- Me preguntó en el camino a la heladería

- No sé- respondí

- Pero que no dejarías de comer nunca?- siguió insistiendo

- Tu pija mi amor- le respondí seductoramente mientras entrábamos a la heladería. Me dio una nalgada y pidió los helados. Lo espere sentado en una mesa en el rincón. Empezamos a tomar nuestro helado y se le calló la cucharita.

- Ya vuelvo- Dijo agachandose a juntarla con una mirada picara. De repente siento su mano recorriendo mi pierna sobre el pantalón. Metió su mano bajo mi tanga y comenzó a acariciar mi feminidad. Después de eso le metí el helado por la nariz y me metió el nazo, que estaba congelado, por la concha. Después del helado, Pedro seguía caliente, sus orejas lo decían todo. El quería más traka traka pero yo tenía hambre. Le dije de ir a comer unas milanesas, fuimos a un local. No nos resistimos y empezamos a comer la milanesa mientras estábamos en pleno acto sexual.