Un amor de la salada［HOT］

Especial la rosa de Guadalupe

Me desperté y Walter ya no estaba a mi lado, mi osito se había ido. Debo admitirlo, fue una noche maravillosa.

Me duele la cabeza por la resaca y el culo porque me lo partieron. Me levanté a buscar un vaso de agua y una pastilla para la resaca. Voy volviendo de la cocina cuando tocan timbre.

Abrí la puerta, seguro era Walter venía por la revancha.

- Venís por más?- pregunté mientras abría la puerta, sin notar antes que quien estaba trás la puerta no era quien yo creía.

Era Pedro.

- Por más? Qué está pasando?- preguntó Pedro alterado.-

- De un tramposo como tú, que por día miente tanto, que prometía serme fiel mientras me estaba engañando.

De un tramposo como tú que aguanté por muchos años pero un día me cansé, ahora escucha mi relato.

Él me besó, me acarició, hasta mi alma estremeció, no me acordé jamás de tí en esa cama, fui feliz.

Hacía mucho no sentía tanto fuego que hasta creí que me quemaba todo el cuerpo.

Y me amó, me cuidó, muchas cosas me enseñó, me entregué y viví lo que por tí no conocí.

ya no hay más nada de que hablar,
esta venganza hizo el final
y por vergüenza creo que solo te irás.

Pedro :

-Martín podés dejar de cantar y decirme que es eso de "volver por más"? - algo enojado.

-Nada. Aparte que haces acá? No estabas en Villa María?

-No, volví para pedirte perd- me detuve cuando vi que la mirada de Martín se había desviado y hacía señas como si alguien se tuviera que ir.

Me dí la vuelta y ví que era Walter al quien Martín le hacía señas. Venía con bolsas del supermercado. A caso Martín me estaba engañando con el?, sé que yo lo engañé con Lucas, pero estoy arrepentido y por eso vine, para arreglarlo, pero parece que el no necesita que arreglemos nada. Al parecer ya se ha olvidado de mí.

Me quedé con cara de shock, le dí un bife, y lágrimas cayeron por mi cara.

-Maldita perra, no me toques -gritó Martín y yo salí corriendo. -

P.O.V. MARTIN:

- Andá Martín, seguilo. Jugatela por lo que sentís.- me dijo Walter.

No entendía lo que estaba pasando, fue todo muy rápido. Todo era confuso, pero con un empujón de mi amigo, fui tras Pedro. El estaba llegando a la esquina​, corrí calle abajo y lo alcancé a pocos metros de ahí.

- PEDRO!- Exclamé cuando estaba a centímetros de su encuentro. El giro su cabeza y le plante un beso

P.O.V. WALTER.

Me desperté y quise preparar el desayuno, pero después me acordé que no sé cocinar y que Martín en la casa sólo tiene droga y se me pasó.

Decidí salir a comprar algo para desayunar.

Fui a los chinos a hacer las compras y al regresar veo que está Pedro en la puerta hablando con Martín. Al verme discuten y Pedro sale corriendo.

En ese momento cerré mis ojos un segundo, yo quiero mucho a Martín, pero lo que tiene con ese Cordobés es más que romperle el orto, hay sentimientos de por medio. Le dije que vaya por él y le dí un leve empujoncito.

Cuando se fue comencé a rezarle a la virgencita. Ellos no se podían pelear, menos por mí. No, ellos debían estár juntos.

Aparece la rosa blanca.

Me asomé a ver que pasaba y los ví a Martín y a Pedro besándose.

Gracias mi virgencita, prometo dejar de ir por la vida rompiendo ortos