Un Hijo Para Ese Hombre

Capitulo II

Capitulo II: “ Una primera fiesta”

No se puede esperar un resultado distinto, si siempre se hace lo mismo.

Estando en mi tercera clase del día y no siendo siquiera las 12:00 de la tarde, veo a uno de mis hermanos firmando él libro de retiros.

Con mi experiencia en estas situaciones de conocer gente en nuevos lugares, he aprendido que él mejor momento de entablar alguna nueva relación tanto de amistad, enemistad o simple convivencia, se crea a la hora del tercer receso, siendo él mas largo y de almuerzo. Aun con ese conocimiento, ¿Que puedo hacer si me están retirando antes de siquiera él segundo receso?

En fin, soy yo, dudo un día logre arruinar mi vida escolar, y siendo un instituto tan prestigioso como lo es, más que solo un grupo de estudiantes y hasta compañeros mios, asistirá al cumpleaños a realizar hoy. Lo negativo del asunto, quizás sea lo estirados que puedan ser los asistentes a la fiesta.

Mochila en mano espero que Fabián termine de charlar con la coqueta secretaria. Uno esperaría un mínimo de vergüenza en él comportamiento del personal, en especial si los salarios son mas elevados en comparación a los dados en un liceo publico.

Aburrida de ver a mi caballeroso hermano en apuros, él pobre no tiene corazón para ser mal educado con una mujer, no importa la edad, el pensamiento o su estatus social. Me encamino a ellos.

— Fabián, se nos va la hora, no alcanzaré a recorrer todas las tiendas que pensaba ver, ni lograre tener tiempo para arreglar mi cabello y uñas si tu sigues charlando con la señorita de asistencia al publico.- declaro con un tono de impotencia bastante creíble. Quizás lo dicho suene cruel y arrogante frente a la secretaria, pero es un favor que le hago a ella. Su actitud con mi hermano no la debe repetir, no siempre se encontrará con caballeros como lo es mi hermano, en ocasiones puede llegar a ser humillada públicamente por su descarado coqueteo y para sus superiores ella será la culpable.— ¿Podenos irnos, o aun necesitas firmar otros papeles? No sabia que retirar a un alumno fuera un proceso de papeleos largo.- mi hermano desde mi llegada no a despegado la vista de mi rostro y yo por mi parte en ningún momento he desviado mi atención a otra persona que no sea él. Dejando en claro lo innecesaria que la secretaria para mi hermano, quien no ha corregido ninguna de mis declaraciones o alegatos.

— He terminado de firmar él documento correspondiste a tu retirada por él día, nos vamos de inmediato, Rodrigo nos espera en él auto.- sonríe.— No sabia que tenias pensado arreglarte las uñas ¿Sabes a que tiendas quieres ir, o te buscamos una? Puedo conseguir distintas direcciones de las mejores tiendas para él arreglado de las uñas, en menos de cinco minutos por tu pequeña.- muy feliz él mamón, deja caer su brazo sobre mis hombres cariñosamente y nos lleva fuera de la oficina.

La secretaria muestra un gesto de vergüenza y enojo que logro detectar a través del reflejo de unas de las ventanas posicionadas frente a la ofina de puertas abiertas.

Fabián quita la mochila de mis manos y la pone en él hombro de su brazo libre.

— Tenemos hasta las 18:00 para recorrer todas los lugares que quieras, veremos ropa, zapatos, arreglaremos tu cabello, uñas y pasaremos a comer algo que te hará no decir comer ni un canapé en la fiesta de las 19:00.- ríe Fabián abriendo la puerta trasera del carro gris, dando de ese modo a Rodrigo un resumen de lo que haremos hoy.

Me adentro en él carro y Fabián cierra la puerta, para luego ingresar al asiento del copiloto.

— ¿Que quiere hacer primero la princesa?- consulta un siempre alegre Rodrigo. Pensando en él agotador plan de que hacerse, analizo una forma de tener un orden conveniente a mi persona, aunque siempre las cosas son convenientes para mí.