Dark Love | Over the Garden Wall | The BeastxWirt | Reescribiendo

• Two •

— ¡Buenos días! —Saludó el muchacho mientras se sentaba frente a él. El mayor lo miró curioso.

— Tardes ya. Pero gracias. —Contestó burlón— ¿Qué haces por aquí?

— Bueno, no tenía tarea así que pensé que era buena idea irle a visitar en vez de quedarme en casa a jugar y ver series en Netflix todo el día.

— ¿En serio? —Preguntó incrédulo mientras alzaba una ceja, el menor asintió— ¿O en realidad quieres escuchar la historia?

— Emm... Cincuenta, cincuenta. —Dijo el chico mientras movía su mano. El mayor soltó una carcajada y llamó a un camarero ordenando un poco de comida para él y el contrario. El camarero lo miró y después al chico.

— Es mi sobrino...—Mintió sonriente el mayor mientras que por dentro esperaba que el otro de tragara la mentira. Después de todo se podía malpensar la situación.

Ni siquiera él se entendió en ese momento.

El camarero alzó los hombros, tomó la órden y se retiró.

— Bueno, ¿En dónde quedamos?...—Divagó un poco y después carraspeó— Bien, había pasado cuatro años...

— ¿¡Porqué tanto?! —Cuestionó un tanto molesto el otro.

— No lo sé y cállate. —Dijo mientras tomaba su bebida— Como dije había pasado cuatro años desde que todo había terminado, o más bien comenzado...

[•••]

Era comienzos de otoño, las hojas de los árboles caían descansando al fin de su larga jornada. El cielo era cubierto por varias nubes que de vez en cuando cometían la travesura de cubrir al sol y el gélido viento viajaba de calle en calle, recorriendo todo con suma emoción.
En una casa igual que todas, pintada de un azul un tanto desgastado por el clima, se encontraba Wirt, quien ahora tenía 19 años, dormido entre todas aquellas mantas que lo envolvían por completó.
La puerta de su habitación se abrió levemente y un pasos acelerados se dirigieron a él. Despertó rápidamente al sentir como un gran peso aparecía de repente.

— ¡Buenos días Wirt! —Exclamó con emoción el Cone menor, rio levemente al oír un bufido por parte del otro.

— ¿Que tiene de buenos? —Preguntó el mayor mientras revelaba su cabeza entre las sábanas.

— Que sigues vivo. Así que mueve ese trasero y cambiate que mamá ya tiene la comida preparada. —Contestó sonriente, Wirt se le quedó mirando por un rato.

— Te hace mal quedar con ese tal Gabriel. —Murmuró mientras se removía entre sus sabanas y se levantaba. Un suspiró salió del menor y le dió un golpe en el hombro.

— Callese y vistase que va a llegar tarde de nuevo. —Advirtió, el mayor bufó nuevamente y se fue al baño para arreglarse. Optó por tomar una pequeña ducha, así que después de buscar todo lo que habría de necesitar, abrió la llave del agua y trato de regular la temperatura. Sabía que tomar duchas con agua fría era bueno, pero él sentía que se congelará en cualquier momento si lo hiciera.

« Y eso que todavía no es invierno.» Se lamentó mientras sacudía su mano después de haberla puesto en la fría agua. Pasó un rato hasta que, con la temperatura adecuada para él, se desvistió y entró al agua. Empezó a bañarse con rapidez, tallando un tanto compulsivamente todo su cuerpo con la colorida esponja. Cuando terminó, decidió quedarse bajo la ducha un ratito. Durante ese tiempo, no pudo evitar perderse entre sus pensamientos, divagando levemente sobre aquellos sueños que de alguna forma le atormentaban.
No lograba recordarlos completamente y eso le era desconcertante. Un tanto ansioso se acordó dudosamente del primer sueño que tuvo y la frase que si bien, no lograba recordar por completo,  el tan solo pensarlo le causaba una ponía los vellos de punta. Pero bueno, volviendo a los sueños. Aquéllos le hacían sentir una gran gama de emociones cuando despertaba. Ya eran demasiadas veces que despertaba llorando o gritando, al igual que algunas veces lograba sentir una indescriptible calidez en su pecho o en cambio, horribles punzadas de dolor en todas partes.
Eso le perturbaba, Y le hacía cuestionarase muchas veces sobre sus sueños.
Mordió su labio inferior, saliendo así de su bucle de pensamientos y cerrando la llave del agua, decidió que era mucho por hoy en darle vueltas a aquel asunto.