El es Jack 23 años, un estado unidense amante del surf , que trabaja en un bar/restaurante en España desde los 19. Ella es una reconocida persona en el mundo de la música con 35 años, que ama pasar el rato con los amigos
La mesa que Tomas me asigno me mantuvo bastante bastante distraído se me pasó el tiempo rápido. Solo que daban los postres y la ronda de chupitos que invita la casa para que mi turno acabará.
-Oye Mario, necesito 2 helados de menta, 1 cortado de nata, un corte de tarta de queso y la especialidad.-Le pido.
-Los helados ya están, ¿vale? -Se asegura de que lo haya oído.
Salgo de la cocina con prisas por que llevan esperando la bola de menta desde hace un rato, pero cuando llego a la mesa y estoy dejando los helados alguien de los de la otra mesa choca conmigo y le tiro toda la bola en el vestido de Cristina.
-Joder lo siento mucho.-Digo mirando a Cristina, mientras lo recojo todo.
-¿Tu eres idiota?- Me dice el que esta sentado al lado de Cristina.
-No señor, ha sido un accidente, lo siento.-Quiero morirme hay mismo, siento a todos en mi contra.
Cristina ha ido con una chica al aseo a intentar limpiar el vestido.
-¿Pero tu sabes lo que cuesta un vestido así?¿Pero que digo? Claro que no- Esta bastante cabreado.
-No se preocupe señor, pase me la factura de la tintorería y yo lo pagaré.
-¡Ni en 100 vidas podrías pagar eso!- Consigue que me enfade, pero sobretodo que me siente mal.
-Vamos Javi deja al chico, a sido un maldito accidente, ya te a dicho lo siente, que iba a pagar la tintorería, ¿Qué más quieres? -Dice levantándose de la mesa cabrada.-Lo siento chico, por el vestido ni te preocupes, tiene 1.000
-No le defiendas Ma..- ella le interrumpe.
-María.-Le dice a su acompañante.
-Pues María no defiendas al camarero, tendrían que despedirlo, por su torpeza y por montar el numerito este.
-Carlos a mi no me digas a quien defiendo y a quien no, el numerito lo a montado Javi y no ha sido torpeza, el de la otra mesa le a empujado sin querer.- El la a mirado como con desaprobación.
Yo e salido de hay lo más rápido que e podido, pensando en que ese tal Carlos tiene razón lo más seguro es que me despidan, pero en fin solo tengo ganas de que esta noche acabé.
-A los chupitos invita la casa.-Digo mirando a todos.-Lo siento- Miro a Cristina
-Ay pero no te preocupes cielo, a sido un accidente.-Dice sonriendo.
Cuando paso por detrás de María, oigo que me dice que me espera fuera el 35 minutos.Por fin a terminado, el restaurante cerrado y los trabajadores saliendo, cojo mi chaqueta, las llaves, el móvil y las pastillas para el dolor de cabeza.
-Hola.-oigo cuando salgo.
-Hola, pensaba que ya te habrías ido.-Veo que también esta con Cristina y sonrió.
-Aun no a pasado la media hora.-Dice riendo
-Antes de nada apunta este número en tu agenda Cristina 606******- Digo de carrerilla.
-Vale, ya
-Cuando lleves el vestido a la tintorería me dices.- Veo que ella pone los ojos en blanco.
-No hace falta, enserio.Siento lo de esta noche.-Mira a María y ella asiente.
-¿os llevo a alguna parte?-las miro.
-No, yo me voy ya- Dice Cristina.
-¿Y tú?¿qué dejas que haga de chofer?-Digo riendo mientras Cristina se aleja.
-No se, y si eres un psicópata que me quiere matar.-Contesta divertida.
-Joder, ¿tanto se nota? Mira que lo llevo en secreto.-Le sigo el juego-Entonces que ¿subes?
-Buenooo, valeee
Subimos a mi coche y pongo la radio, empiezo a cantar y ella se rie.
-¿Tan mal canto?
-No, no.-Dice riendo.
-Entonces ¿qué hace tanta risa?.-Digo sonriendo
-El como bailas.-Intenta aguantar la risa.
Seguimos hablando durante el viaje del restaurante a mi pequeño piso, ya que tenía quue recoger a Nala, por que íbamos a estar en casa de mi tío.
-Tengo que parar a qui, para recoger a mi vida, ¿vale?-Aparco
-Claro, claro.-Sonríe con simpatía.-Pero cuando bajo con Nala su cara cambia por completo- ¿Pero quien esta preciosidad?-Cambia la voz
-Ella es Nala, mi vida entera-Sonrio y monto a Nala.
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