mayordomo... cuídame ; 2won.

#002.

Estuve en la cena con mis padres, ya que la mayoría de mi tiempo me encerraba en mi habitación a jugar u otras cosas que hacer.

Eran las 23:45, habíamos visto una película muy aburrida, pero necesitaba acompañar a mis padres en su último día. Se fueron a acostar y yo me fui a mi cuarto a conversar con Min. Le expliqué que mis padres se van, y se puso coqueto, como siempre.

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Me levanté temprano (y eso es raro en mí) para despedirme de mis padres. Ellos tomaban el vuelo a las 10:30, pero se levantab más temprano para bañarse, arreglarse, entre demorarse en llegar al aeropuerto etc. Así que desperté a las 09:15 justo cuando salían de casa.

Les dije que los quería, que los iba a extrañar. No daré detalles porque es lo típico de despedirse.

No me dio pena, aunque un poco. Pero ya los iría a ver de vez en cuando.

Se fueron. Quedé solito.

Verdad, me acordé que venía el tipo que iba a trabajar como Mayordomo.

Fui a hacerme el desayuno, eran las 10:00. Junte la mermelada de fresa en el pan tostado, un poco quemado, pero rico. Me hice un café con leche y me senté en la mesa. Prendí la televisión para ver si había algo bueno. Estaban dando La Rosa De Guadalupe, nah mentira. Estaban dando las noticias.

Miré la hora, eran las 10:15. La hora se me pasa lento. Dejé todo botado ahí y me tiré al sofá, jugando en el móvil. Estaba tan aburrido que llamé a Minhyuk.

— ¿Alo? Minhyuk, ¿cómo estás mi amor?

— Bien bebé, ¿qué tal tú con la despedida de tus padres?

— Bueno, acá no más. Pero, igual por una parte estoy felíz, porque los demás no pensarán que soy el apegado a los papás. Oye, ¿quieres venir a mi casa?

— Claro, con mucho gusto. — Puso tono de picaron.

— Yaaa... — Reí. — Te espero, un beso.

— Igual, adiós, te amo.

— Yo más. — Colgué.

En menos de dos minutos, se escuchó el timbre de la puerta principal de la casa.

Me levanté como resorte. ¿Como habrá llegado tan rápido Minhyuk? No era puntual, se demoraba como unos cinco, diez minutos más o menos en llegar hasta acá.

Me arreglé mi ropa de camiseta cuadrada color rojo y negro, con mis jeans celestes. Arreglé igualmente un poco mi cabello y caminé hacia la puerta.

Tome la cerradura de la puerta.

— Min... No puedo creer que hayas llegado tan puntual. — Dije mientras abría la puerta. — Eso es ra... — Me detuve al mirar a otra persona, no era Minhyuk, era la misma persona que vi ayer en la heladería.

Tragué seco. Estaba al frente mío, lo miré muy fijamente a los ojos. ¿Qué está pasando?

¿Era él?

— Hola. — Habló. — ¿Usted debe ser el hijo que dejaron acá, que no se sabe cuidar? — Habló formalmente. No respondí, éste desvió la mirada por un momento y puso sus ojos encima mío. — ¿Me podría dejar pasar, por favor?

Me hice a un lado, estaba sorpendido.

¿QUIEN MIERDA ME PUEDE EXPLICAR?