Saga 1: Comienzo de la historia

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Louis corría por el parque tan contento como siempre porque su padre le había comprado una capa de superhéroe nueva, a lo lejos Jay se encontraba conversando animadamente con su esposo hasta que una pareja de casados con un pequeño durmiendo en los brazos de la mujer se acercó hasta ellos.

"¡Des, amigo!" Tom divisó al señor de traje blanco y rulos peinados hacia atrás.

"¡Tom! Tanto tiempo sin verte" se dieron unas palmadas. Anne y Jay simplemente se dieron unas sonrisas amigables.

"Te presento a mi esposa, Jay, Tom" Jay le extendió su mano, Des dejó un beso en ella.

"Un placer, que bella mujer para tan poco hombre" bromeó, Jay sólo sonrió apenada.

"Bueno, les presento a mi bella esposa, Anne" La mujer solo se limitó hacer un ademan ya que cargaba al pequeño.

"¿Es su niña?" Pregunto curioso Tom "Haría una buena pareja con mi campeón, es Louis, el niño que juega en los columpios" señaló al pequeño castaño de 5 años con una capa roja ondeándose en su espalda.

Des se tornó algo tenso mientras Anne le daba una mirada insegura.

"Es niño, su nombre es Harry" hablo calmada "Le he dejado sus rizos largos porque le gustan" sonrió orgullosa.

Tom y Des compartieron miradas cómplices mientras Jay y Anne platicaban acerca de la escuela de los niños entretanto los hombres se alejaban para platicar.

"Así que rizos largos ¿eh? ¿Qué sigue ponerse vestidos y tacones?" Se mofaba, haciendo enojar a Des.

"Ni me lo digas, detesto con toda mi alma lo que Anne hace con Harry pero son cosas que se le pasarán conforme crezca y Harry sea todo un hombre" quería defender su orgullo aún sabiendo que su hijo podría no ser un «hombre» como él decía.

"¿Y qué tal Louis?" Tenía curiosidad por el pequeño de ojos azules.

"Es maravilloso, es muy obediente, inteligente y ama jugar fútbol conmigo" mentía, Louis odiaba el fútbol y muchas veces lo había sorprendido jugando con las barbies de sus primas.

"Hijo perfecto..." Susurró entre dientes con evidente envidia.

"¿Disculpa?" Tom no había escuchado lo dicho.

"Que si cómo te va en el trabajo" sonrisa fingida.

"Sinceramente... Pésimo, han hecho corte de personal en la empresa" hizo una mueca.

Des sonrió pero no había ni una pizca de amabilidad, jamás le había caído bien Tom  y su desgracia era su dicha.

"Que mal" ni siquiera se molestó en borrar su sonrisa "Soy tu boleto a la gloria"

"¿A que te refieres?" Su curiosidad picaba.

"En mi empresa solicitamos un contador, podría decirse mi contador personal" sonrió.

"¿Estas ofreciéndome trabajo? ¡Amigo eso es genial, gracias!" Lo abrazó y Des hizo una mueca de asco.

Sobretodo por la pequeña sorpresa con piernas bronceadas que había contratado como secretaria, seguro por un buen dinero más podría metersele a Tom y es que ¿Quién se resistiría a su secretaria sexy, Esther?

"Bienvenido a bordo, amigo" le estrechó la mano.

Al barco de tu perdición, pensó.

"Creo que Harry debería ir a jugar donde Louis, después de todo van al mismo instituto" Jay jugaba con la manita del rizado.

"Tienes razón, Harry despierta bebé" el pequeño se removió, abrió sus ojitos y los talló con su mano.

"Mami" sonrió mostrando sus dientes y sus espacios vacíos, miró a Jay "Amiga de mami"

"Es Jay, la mamá de Louis" Harry abrió sus ojos contento, siempre ha querido hablar con el lindo niño de ojos azules sin embargo cada vez que intentaba acercarse se ponía demasiado rojo.

"¿Louis está aquí?" Pregunto curioso.

"Está allá en los juegos, anda a jugar cariño" Jay le indicó el camino con su dedo índice.

A trompicones torpes bajó de los brazos de su madre, caminaba lento y lleno de nervios, Louis era algo así como su niño favorito.

Louis jugueteaba solo, jugaba hacer un superhéroe.

"¿Qué es eso que mis oídos oyen?" Pose heroica "¡Es una dama en peligro! ¡Es un trabajo para súper Lou!" Gritó emocionado, dio un giro encontrándose con un pequeño rizado con unos hermosos ojos verdes. Tragó saliva ¿por qué se le hacia lindo?

"Hola Lou" susurró marcando sus hoyuelos, jugando con su playera.

"Hola..." ladeó su cabeza.

"Harry, soy Harry" sonrió emocionado.

"Un gusto Harry ¿quieres jugar?" Harry asintió.

"¿Quieres estar en peligro?" lo miraba a través de sus espesas pestañas.

"Solo si tú me rescatas" batió sus pestañas tirando de sus comisuras hasta formar una lida sonrisita.

"Siempre te rescataré, Harry. Donde sea que estés Louis te encontrará, seré tu camino a casa" sonrió extendiendo su mano.

"Siempre serás mi héroe, Lou" tomó su mano y corrieron juntos a los juegos.

Esa tarde de otoño comenzó una linda historia entre dos pequeños que a lo largo de su vida tendrán subidas y bajadas, una vida llena de sorpresas pero sobretodo mucho amor.

Nota:
¿Les gustaría que hiciera una dinámica para dedicar los capítulos?
Espero les guste.

H A R R Y de Amor ; LSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora