El chico malo
Por fin había llegado a mi destino. Aquel inhóspito pueblo perdido en las entrañas de Inglaterra sería mi nuevo hogar, espero que por poco tiempo. Debo encontrar a Niall cuanto antes y regresar con él a Mullingar. Mi mejor amigo lleva casi un mes desaparecido. Lo único que sabemos de él es que vino a este pueblo. Así que aquí me encuentro. En un viejo taxi rumbo al único hotel medianamente decente que hay en este lugar. Por lo que me han dicho, además del único hotel, es el único lugar dónde hay un bar decente, sin delincuentes callejeros esperando para asaltarte.
Entré en el hotel, más bien pensión, y me encontré de frente con una especie de ¿cafetería? por llamarlo de alguna forma. Varias personas dispersas en mesas, una camarera atendiendo el lugar y, tras la barra, un hombre de unos sesenta y tantos. Me acerqué a él arrastrando mi pesada maleta.
-Buenas noches, tengo una reserva a nombre de _____ Gallagher -el hombre se puso unas viejas gafas y buscó en unos papeles.
-Sí, aquí está, señorita. Su habitación está lista, espere un segundo. Llamaré a mi nieto para que la ayude con la maleta -el hombre se perdió tras las puertas de la que parecía ser una cocina y de allí salió un chico de unos veinte años, pelo castaño rizado y ojos verdes.
-Si me permite señorita -el chico me sonrió y en sus mejillas se formaron unos adorables hoyuelos. Agarró mi maleta y se encaminó escaleras arriba- Esta es su habitación, espero que esté a gusto.
-Sí, gracias -la estancia era bastante acogedora. Una cama, un armario, una mesita de noche con una pequeña lamparita y un sillón. Lo justo y necesario ya que no iba a pasar mucho tiempo en este cuarto.
-Mi nombre es Harry, si necesita algo solo tiene que llamarme -dijo dejando mi maleta cerca de la cama. Le sonreí.
-Por favor, no me trates de usted, me haces sentir vieja, llámame _____ -el chico asintió y tras despedirse salió de la habitación. Sin ganas vacié la maleta y guardé mi ropa en el armario. Era de noche pero todavía era temprano por lo que decidí que estaría bien dar una vuelta por los alrededores del hotel. Bajé las escaleras y me encontré con Harry.
-¿Vas a salir? -asentí- no te lo recomiendo, este pueblo por las noches es un auténtico infierno, podría pasarte algo.
-Estaré bien, solo quiero caminar un rato -dijo. El hombre de antes estaba tras la barra leyendo un periódico, al escucharme intervino.
-Señorita, hágale caso a mi nieto, es muy peligroso que ande sola por ahí de noche -los miré a ambos y en verdad sus caras mostraban preocupación.
-No me pasará nada, de verdad -me giré para abrir la puerta, pero alguien desde afuera ya la había abierto y acabamos chocando. Levanté la mirada y me encontré con el chico más guapo que había visto. Llevaba una chaqueta de cuero y con él venían otros dos chicos.
-Lo siento... -me disculpe, apenas lograban salir mis palabras, aquel tipo me había cautivado por completo. Me miró fijamente unos segundos y finalmente habló.
-No te preocupes, fue mi culpa -me dijo. Su voz produjo que un escalofrío recorriese mi cuerpo, era tan ronca, tan profunda...- ¿ibas a alguna parte?
-Yo... eh... quería caminar un rato -conseguí decir. El chico me sonrió y... ¡qué sonrisa!
-Eres nueva en el pueblo ¿cierto? -asentí- ya me parecía... y ¿nadie te ha dicho que este pueblo es muy peligroso por la noche?
-Eh... sí, me lo han dicho -se acercó más a mi y agarró mi babilla
-Pues entonces deberías hacerles caso -su dedo rozó mi mejilla- Hmmm... ¿aceptarías salir este sábado conmigo? no acepto un no por respuesta
-Eh... yo... -sonrió. Algo me decía que no debía aceptar su invitación pero quería saber más sobre este extraño y... ¿quién sabe? quizás él sepa algo de Niall- Claro
-Bien, he de suponer que te estás quedando en este lugar por lo que pasaré a recogerte sobre las nueve el sábado -me dijo
-¿No decías que es peligroso andar de noche en este pueblo? -pregunté. El rió y me miró
-Nena, si vas conmigo no te pasará nada, te lo aseguro
Se fue del lugar seguido de sus amigos. Ni siquiera me dijo su nombre. Tras cerrarse la puerta oí un par de suspiros de alivio detrás de mi.
-Menos mal que se fueron... -dijo el anciano. Miré a Harry quien también parecía aliviado de la partida de los tres desconocidos.
-¿Estás loca? acabas de aceptar salir el tío más peligroso de este jodido pueblo. Te meterás en muchos problemas, definitivamente está completamente loca -exclamó Harry con cara de preocupación.
-¿Pero quien es él? ¿por qué dices que es peligroso? -pregunté. Harry negó con la cabeza y caminó hacia a su abuelo.
-Él es Liam Payne, el cabecilla de una banda muy peligrosa -suspiró y continuó hablando- Este pueblo está dominado por dos bandas, la de Payne y la de Parker. Son bandas rivales, se odian a muerte. Si estás en su contra estás muerto. Ha habido tiroteos y asesinatos provocados por ellos. Este pueblo es un jodido infierno desde que Payne y su banda tomaron el control.
-No puede ser tan malo como dices... -me apoyé en la barra y escondí mi cara en mis manos
-No te acerques a él, _____. Es peligroso. Todo el mundo en este maldito pueblo le teme. Si quieres sobrevivir, aléjate -finalmente Harry se metió en la cocina.
No. Liam no podía ser así ¿no?. Vale, sí, tiene pinta de chico malo, pero de ahí a ser un asesino...
