12. "Confesiones"

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Allí estaba yo, de nuevo, sentada en ese mismo Columpio de ese mismo parque, lugar donde por muchas veces en mi vida, intercambié palabras con Él, y desde ese instante, no pensé que se volvería tan Importante para mí. Todo estaba tan callado, tan sereno, parecía en Cine de Terror, y a pesar de todo, discutía con Él, otra vez:

-¿Qué demonios te pasa? ¡Ya no eres el mismo de antes conmigo!...- Exclamé con una fuerza tal que creo que lo Intimidé, y el Eco se esparcía por todo el lugar.

-.Mira, si a mi me llegó a gustar eso no era tu problema ¿me oíste? ¡No lo era! - me respondió, casi que me comía. 

Yo solamente me alejé, dejando atrás toda nuestra jodida amistad, por un Amor Imposible.

(...)

Aunque tal vez era tiempo de decir algunas verdades.

-Austin, mira si hice eso y muchas cosas más es porque.. Joder Austin ¡eres mi mejor amigo!

Bravo Narissa, bravo... ¡Pendeja! ¡Dile lo que sientes y ya! Demonios,  en ese momento me quedé en blanco,  no tenía como decírselo, pero hubo un momento en el que,  de algún modo, logre hacerlo:

-Austin, Yo estoy enamorada de ti.

Un silencio incómodo quedó en el aire, y Austin me respondió con una mirada preocupada en su rostro:

-Eso ya lo sé, Narissa.

¿Que?  ¿Ya lo sabía?  Pero, ¿como? "Ah bravo, señora discreta", se me vino a la mente la cara de Alyson cuando me regaña, supongo tenían razón, soy muy obvia a la hora de estas cosas.

- Entonces si ya sabias, ¿por qué te alejaste de mi? -le pregunto algo llorona.

-Porque, Narissa, ¡Lo nuestro no puede ser! ¡Yo no te Amo! Y no entiendo como te llegaste a enamorar de mi, ¡Yo jamas te di alas!

-Austin, en el amor no manda ni tu propia conciencia, Me enamoré de ti,  por tu Sonrisa, porque realmente me importaba todo una mierda si tu estabas sonriendo. Me enamore de tus ataques de Éxtasis cuando te reías como loco, vaya,  me enamoré de tus ojos Café, me perdía en mirarlos todo el puto día..

-Ay Narissa, tu realm... -¡No! Tienes que dejarme terminar por favor.. -lo interrumpo haciéndole gestos con la mano.

-Joder Austin, ¡Me enamoré de ti! Y ya no me cuesta decirlo.. De cuando me abrazabas muy fuerte y me decías que me querías que sin mi no eras nada, me enamoré de lo listo que eras y de lo estúpido que te ponías a veces cuando nos molestábamos.. De cuando me decías "Mocosita" Porque así me escondías todo tu cariño..

Mierda, me le estoy declarando a Austin, ¡que incómodo es esto! Pero el dolor de me quedaba viendo sin decir una sola palabra me puso demás de triste...

-Mira Austin, me enamoré de cuando me contabas tus cosas y te veías tan seguro conmigo, aunque siendo sincera, era yo la que se sentía protegida a tu lado. Qué inocente era yo, de verdad, yo perdía el puto culo por ti Austin.. Me enamoré de cuando me decía a mi misma "fea" Y tu siempre me decías que estaba bonita,  fuese como fuese. Me enamoré Austin, de tu forma de quererme y de esos "te quiero" Que tanto te costaba decir.. Te amo con tus más y menos, con tus Mal Humores, me enamoré de tu canciones y del Olor de tu cabello..

Austin seguía sin decir una palabra, y yo comenzaba a sollozar, hasta finalmente romper en llanto que apenas mis palabras podían entenderse..

Austin! ¡¿Que no entiendes que yo me enamoré de ti? De tu forma de ser, de tus "Cállate" Cuando yo te imitaba con voz ridícula, de como te burlabas de todas esas cosas cursis, de las ojeras que te salían cuando hablábamos en la madrugada y de lo despeinado que llegabas al Liceo por no dormir.. Me enamoré de todos nuestros momentos,  y aún los sigo extrañando... Yo estoy enamorada de ti como no tienes idea.. Y me duele mucho que no sientas lo mismo..

Cuando terminé de expresarle todo a Austin,  el simplemente bajo la mirada, se dió media vuelta, y se fue del parque caminando para tomar un Taxi a su casa, yo por otro lado me quedé en el parque un rato más hasta que se hicieron las 8:32 pm y decidí regresar a mi casa,  llegue tarde que mi Madre me dio un gran regaño, pero yo no sentía nada.

Y no sentir "Nada" Es que en realidad sentía Todo.

Un Grito A CallarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora