Dulce Destino - Camren Fanfic

Capítulo 52

Lauren bebió a sorbos de la lata de Sprite en su mano. No hacía nada por su agotamiento, pero sabía bien no obstante. Dado que no había dormido absolutamente nada la noche antes, dudaba que siquiera la cafeína fuera lo bastante fuerte para hacerle pasar el día.

Una mirada por el set confirmó que era la primera actriz en llegar. Había unos cuantos del equipo construyendo lo que parecía ser un dormitorio. Aunque, básicamente sólo paseaban de un lado a otro delante de ella, llevando equipo y cumpliendo órdenes del ayudante de director.

Ally Brooke se situó furtivamente junto a Lauren sin que la actriz lo notara. “Llegas temprano,” notó la director.

Sobresaltada, Lauren volvió la cabeza para enfrentar a la director. “Soy madrugadora,” contestó. Sobre todo cuando no me voy a dormir.

Ally sonrió. “Por lo visto.” Antes que la director tuviera oportunidad de comentar más, fue reclamada por cuestiones de trabajo. Lauren la observó alejarse, desconcertada por la sencillez de maneras de la director, “Intocada por Hollywood,” decidió calladamente. “No durará.” Reasumió su estudio de los alrededores e intentó ignorar el hecho que estaba secretamente anticipando la llegada de Dinah.

Aburrida y sin nada que hacer salvo esperar, Lauren metió la mano en su bolsa y sacó su más reciente compra: Harry Potter and the Chamber of Secrets. Sonrió ligeramente a la portada.

Camila había tenido razón, de ninguna manera no leería el segundo libro. Pero aún se negaba a leer el tercero. Y el cuarto estaba fuera de cuestión. Sonriendo con diversión, abrió el libro y empezó a leer.

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Camila se aseguró de quedarse cerca de Dinah todo el tiempo. Estaba aterrada y ni siquiera era la que salía en la película. Cómo Dinah se debía sentir, Camila no tenía ni idea. De hecho, estaba más que demasiado nerviosa para pensarlo demasiado profundamente.

Llegaron al set de la película, que parecía más un almacén abandonado que otra cosa. La seguridad no era particularmente estricta. De hecho, Camila y Dinah entraron como si poseyeran el lugar. No hubo nadie que las detuviese.

El interior del almacén/set de cine era de lejos más vivaz que el exterior. Camila mirada alrededor con sobrecogimiento. Un falso dormitorio parecía ser el centro de actividad. Había gente colgando luces y llevando cables, escaleras de mano y latas de pintura. Todos parecían ocupados. Excepto una persona.

Camila entornó los ojos. “¿Es ella?” le susurró a Dinah, asintiendo hacia la solitaria figura sentada en el suelo en una esquina, totalmente absorbida en un libro.

“Es ella,” confirmó Dinah. “Venga. Vamos charlar con ella.”

Camila se paralizó. “¿En serio?”

Dinah echó una mirada alrededor. “No veo a la director. Probablemente Lauren sabe qué está pasando,” explicó lógicamente.

“¿Ya estás tuteándola?” cuestionó Camila con curiosidad, intentando alguna excusa. No había anticipado hablar con Lauren Jauregui. Quedarse en una esquina pareciendo aburrida, eso es lo había planeado. Algo más complejo estaba más allá de su reino de comprensión.

Dinah no parecía estar acercándose a la actriz. “Parece bastante ocupada,” dijo tras un momento. “Quiza debiéramos esperar a Ally.”

Camila no podía estar mas de acuerdo. “¿Quién es Ally?”

“La director,” dijo Dinah, mirando Camila brevemente. “Te he dicho su nombre un millón de veces.”

Cierto. Lo sabía. “Lo siento, sólo un poco agobiada,” Camila explicó. Echó una mirada alrededor de nuevo, intentando figurarse quién podía ser la director.