3. Buenas Noches

153 10 13
                                    

Tomé aire y me decidí a abrir la puerta de mi casa. La verdad pensé que el salón estaría hecho un desastre pero no, simplemente estaba mi hermano con dos amigos jugando a la Play.

- ¡Ya he llegadoooooo! - Grité, y me preguntaréis que por que grito si la puerta da directamente al salón, pero bueno, es una costumbre.

Ya claro, gritas que ya has llegado porque tienes complejo de Tarzán.

Que raro, ya hacía mucho que no aparecías autora, se te ha echado de menos.

Como seguía relatando MI historia.

Mi hermano me respondió y seco "hola", y sus amigos un ruido como "hii" que supongo que sería un saludo. Da igual, son absurdos.

Me disponía a subir a mi habitación cuando escuché gritar a mi hermano.

- Hermanis, tráenos unas Coca-Colas - Me dijo. Ya claro, ahora bien que hablaba.

- No soy tu chacha, así que te aguantas y si tienes sed tragas saliva. -Usé la sabia frase que me solía decir mi madre cuando estaba perezosa y no me levantaba ni a por un vaso de agua.

Acto seguido subí a mi habitación a pasar algunos apuntes que tomé en las clases y miré mis redes sociales.

Twitter: 37 nuevos seguidores. ¿Qué? ¿Como he ganado tantos seguidores en un día? Entré a mirar quienes eran y la mayoría eran chicas y chicos de clase. Oh cierto, mi hermano es popular... Entre toda esa sopa de letras reconocí tres cuentas:

@KatFuckYourself . Si, el Twitter de Kat muy acorde con su personalidad.

@JackSurferMackencie . Y el de Jack.

@YourSexyParker . Oh claro, no podía faltar Mark con un ingenioso nombre.

Instagram: 32 nuevos seguidores. 107 "Me Gusta" Vaya, pues no va a ser tan malo tener un hermano descerebrado.

Dejé el ordenador en su pantalla principal con mi preciado fondo otoñal. Saqué mi móvil y cogí un papelito donde me Kat y Logan me habían apuntado sus números telefónicos.

Me senté en la cama y creé un grupo de WhatsApp para hablar los tres. Cambié mi ropa por un cómodo pijama (si, eran las 16:00 de la tarde y yo estaba en pijama). Como no tenía nada que hacer puse música y me puse a bailar espontáneamente. Perdí la noción del tiempo pero creo que me pasé dos horas bailando.

Oí un par de toque es mi puerta y, tras bajar el volumen de la música y abrí. Frente a la puerta se encontraba Logan con cara de cachorro abandonado. Sabía perfectamente que venía para que le hiciese algo de merendar, pero preferí ver que me decía.

- ¿Que quieres? - pregunté firme

- Solo quería hacer una visita a mi preciosa hermana. - Ja Ja Ja, me rio.

- Sí, buen chiste, ahora dime que quieres. - Dije sarcástica.

- Pues... podrías hacernos unos helados de esos que haces tú... - Ya estaba empezando a ablandarme con su cara de falso niño inocente, pero resistí un poco más.

- Ah si, ¿Y a cambio, qué me darás?

- Pues, te dejaré quedarte con nosotros hoy a jugar a videojuegos y a cenar una deliciosa pizza. -Dijo con la esperanza en sus ojos. El idiota sabía mi debilidad por la pizza.

- Vale, pero me tenéis que decir de que los queréis.

- Haz todos igual que el mío.

Bajé con mi hermano y me fui a la cocina. Eso que a mi hermano le encanta no es nada del otro , solo que no le he dicho (ni diré nunca) como los hago. ¿Por qué? Fácil: Si se lo digo ya no tendré con que sobornarle cuando tiene hambre.

Simplemente túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora