Mi vida sin ti

Te conocí

El sonido del reloj invadía todo el cuarto.
Estando en su cama acostado como si no tuviera vida.
Teniendo la mirada fija en el techo recordando esos momentos.

-¿Por qué...?- se sentía acabado en solo recordar como va hacer su vida sin él.

.Recuerdo 1.

Caminaba por las calles en busca de su trabajo, mirando como su alrededor estaban llenas de parejas acarameladas, deseando tener él una pero teniendo el temor que pase lo mismo como la que tuvo hace tiempo. Al llegar se puso su traje de cocinero y comenzo hacer la comida para las personas que llegaban, viendo como multitud de gente llenaba el restaurante para probar esa exquisitez del que todos hablaban. Muchas mujeres no hiban por la comida si no por el quien las preparaba, enamoradas en solo ver aun rubio de ojos azules con un cuerpo no tan marcado como otros hombres. Él no sentía ninguna atraccion hacia las mujeres pero era todo un caballero con ellas porque asi lo educaron en su casa.
Ante toda esa multitud de gente su mirada se enfoco en uno donde pudo apreciar a uno de cabello verde tomando asiento esperando para ordenar.

-¡Sanji ve atender al nuevo cliente!- escucho como Zeff le grito para que este reaccionara -yo me encargo de la comida-

-Si- dejando las cosas y llendo hacia donde esta el peliverde, recibiendo muchos chiflidos y besos volados por parte de las mujeres. Cuando llego el otro alzo la mirada viendo como un hombre hermoso estaba parado al frente de él hablandolo - emmm disculpe ¿va a ordenar?-

-¿Eh? si perdon es que me perdí en mi mundo-

-Se nota- su mirada se fijaba en el cuerpo corpulento del moreno ya que este traía una camisa de tirantes color azul pegada dejando ver su bien formidos pectorales y pasandose por esos brazos troncudos. Concentrandose en el joven le dijo el menu que había y este pidio.

Cuando se fue pudo apreciar las curvas que el rubio tenia todo como una "mujer". Tardaron unos minutos y él ya venia con una jarra de jugo de naranja y cuando se la termino de servir pudo apreciar unos ojos azules que él nunca se había imaginado y el otro se quedó embobado con ver la mirada seria que este traía.

Sin duda esa chispa que se había apagado por tanto tiempo volvió a revivir.

Levantándose de la cama y dirijiendose a tomar una ducha en agua fría, no le importaba si se enfermaba o no él solo quería...

-Morir...-