7.

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Zayn dejó escapar el aliento más largo que ni siquiera sabía que tenía con su mano entrelazada a la Niall encajando perfectamente, temblando de miedo; esto era lo que tanto temían.

— No tengas miedo, vas a estar bien— la Sra. Edwards aseguró, mientras conducía su auto de plata; claramente para uso del gobierno, —Van a tratar de alojarlos en nuevos hogares, pero por desgracia cabe la posibilidad que alguno de los dos no sea adoptado, así que se quedarán hasta que podamos encontrar un hogar temporal— ella sonrió.

Era una sonrisa tan falsa. Y le dolía a Zayn; duele tanto saber que sería separado del amor de su vida, cuando más lo necesitaba.

— No te preocupes Ni; yo no te dejaría— susurró, acariciando su cara contra el cuello de Niall, le besó la clavícula y un gemido escapó de los labios de Niall. No quería perder a Zayn; era tan amable con él, era el único que alguna vez había sido así con él.

— No te vayas— Niall se atragantó, apoyando su cabeza contra la de Zayn.

— No lo haré, nunca voy a dejarte. Podrían separarnos Ni, pero siempre voy a volver por ti— insistió, tirando de Niall a su regazo, ahora ya con sus cuerpos entrelazados, capturando el calor del otro.

— Vamos chicos, ¡Tenemos que encontrar lugar!— la Sra. Edwards parecía demasiado alegre, abrió la puerta dejando a los muchachos afuera. Ya afuera los condujo al interior del edificio, las personas los miraban con pena.

— No les hagas caso, encanto— Zayn le pasó un brazo alrededor de su cintura, llevando a Niall por el pasillo y llegando a una gran sala donde había muchas secretarias.

—¡Sra. Edwards!— Llamó alguien, ganando la atención de las señoras mientras Niall y Zayn se sentaban en las sillas de plástico, Zayn frotó círculos con un pulgar en la cadera de Niall, de vez en cuando besando su cuello o mejilla.

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Después de una eternidad de estar incómodos, la Sra. Edwards regresó, sonriendo alegremente.

— Niall, tenemos buenas noticias— se inclinó para que tuvieran la misma altura, —Te hemos encontrado un hogar, con Payne— Niall sonrió agradecido, le temblaban las manos.

— ¿P-Puede venir Zayn?— La Sra. Edwards suspiró, sacudiendo la cabeza antes de alejarse, los tacones hacían un ruido sobre el suelo; haciendo latir el corazón de Niall, —¿Z-Zayn?— tartamudeó, volviéndose hacia su hermano.

— No llores— Zayn dijo, tomando a Niall en sus brazos.

Gritos horribles salían de los labios de Niall, Zayn quedándose ahí, y así es como se quedó; reteniendo los gritos y sollozos en su pecho; su cuerpo temblando y temblando, su parloteo entre dientes débiles.

— Shh, shh, está bien encanto— Zayn acarició su espalda, empujando la tela de la camisa para besar su hombro.

—Sr. Horan, hora de irse— la voz alegre llamaba, haciendo llorar con más fuerza a Niall, un par de brazos fuertes tomaron su cintura tirando lejos de Zayn.

—¡No! ¡No! ¡No!— gritó, paralizando los grandes brazos —¡Zayn!

Las lágrimas de Zayn corrían por su rostro, con ganas de correr y salvar a Niall, pero sería imposible ya que el hombre difícilmente trató de aferrarse a Niall.

— No pasa nada encanto, tienes que ir con ellos— la voz de Zayn se rompió, su mano cubriendo su boca mientras Niall gritaba, golpeándose la cabeza contra la puerta, enviando otro ataque.

Louder than lions » ziallDonde viven las historias. Descúbrelo ahora