Buenas, quiero decir una cosa.
Y es que hoy he vuelto a empezar la quimioterapia, había olvidado lo horrible que era pasar por eso.
Ya se que seguramente habrá algunaa personas que lo estarán pasando fatal por todo esto, que se derrumba y que cree que es un impedimento para casi todo. Hay veces que yo pienso así, y cuando lo hago intentó pensar en todo lo bueno que tengo. En las pequeñas cosas que me hacen tremendamente feliz.
Es muy complicado hacerlo, cuando me dijeron lo que tenía dentro el mundo se me echó encima. Ni siquiera era capaz de llorar o de expresar alguna emoción. Poco a poco mi familia y amigos se fueron enterando por mi boca o por la de otros. Todos me decía que si necesitaba ayuda les tenía a ellos, pero yo sabía que eso no era realmente cierto, ninguno de ellos me escucharía ni haría nada.
Hubo una persona, que al mirarla, al saber que algun día no iba a volver a verla, que le pedí incluso que me escribiera una panegírico para que lo leyera cuando me muriera. Eso fue el 28 de enero de este año.
Entró en mi habitación y la miré, sentí que ella no merecía esto, no merecía sufrir y comerse la cabeza por mi.
Y directamente, después de muchos años, lloré. Yo que nunca lo hago y ella lo sabía, que siempre me preguntaba el porqué, ¿Por qué no lloras nunca? ¿Acaso no eres humano? Algún día de pillaré. Y me pilló, me pilló pero bien.
Al principio ella no hacía nada, me miraba y yo sabía porque era. ¿Qué podías hacer?
Al final me abrazó y yo lloré en su hombro durante un rato largo. Te lo agradeceré siempre pequeña.
No quiero llegar a todos los detalles, pero no es divertido pasar por todas las náuseas que he pasado y que tendré que pasar.
Tampoco quiero la compasión de nadie, quiero hacer recapacitar a esas personas que creen que no es para tanto y que finalmente tendrás que morir si o si. Que ya está todo hecho.
Eso no es realmente cierto, llevo casi un año con esto y sigo aquí, intentando vivir. Le doy muchas fuerzas a las personas que están sufriendo más que yo, que se que hay muchas.
Nunca había sentido tanto dolor como este verano. El 19 de agosto. Creí que todo se acababa, estaba muriéndome.
El médico me dijo lo que siempre me decían ¿Cuánto te duele del uno al diez? Nunca entiendo esa pregunta, ¿Me estoy muriendo y tú me preguntas eso?
No contesté, como iba a contestar. También me dijeron que era muy normal que de ahora en adelante sintiera dolor, y que tenía que volver a empezar la quimio. Qué tanto odiamos todos.
Y si algún día me pasa algo, si algún día temprano muero, correré para abrazar a esa persona realmente importarte que me alumbra el camino.
