Tienes tanto para dar.
Tantas sonrisas tiernas. Tanta felicidad.
Consigues que me enamoré aún más con cada sonrisa, con cada gesto. Con cada roce.
Las mariposas en el estómago cobran sentido si estoy contigo. Y ya se que suena tonto decir todo esto, pero en algún lado tenía que sacar mis sentimientos.
Sentimientos que se encienden, recuerdos que me hacen reír y fantasear.
Mis manos recorriendo toda tu espalda.
Canciones alternativas a las que nunca hago caso por estar mirándote.
Ver como te vas durmiendo en mi pecho.
Realmente, nunca entendí tus complejidades. Yo las adoro.
Pero se que cada vez que te miras al espejo lloras, lloras por dentro. Esos estereotipos son horribles y no me gustan, me gusta la realidad, me gustas tú.
Con tus imperfecciones, con tus pecas y lunares. Tus sobrantes y tus restantes. Tú pelo alborotado por la noches. Tus caras raras. Tú. Y sencillamente tu. Me enamoras.
Mi pequeña princesa. No te comas la cabeza, mira al frente y no te detengas. Camina sin descanso, que yo te estaré esperando.
Esperando para abrazarte, para darte cariño, para ser feliz junto a ti.
