Finalmente llegó mi hermano y seguro vendrá a preguntarme como me fue en mi primer día de universidad.
Alguien abrió la puerta de mi habitación
—Hey, Meredith, ¿como te fue hoy?— preguntó
—¿No puedes tocar antes de entrar Jett?— respondí
—Perdón Mer, pero no me has contestado, ¿como te fue hoy? ¿tienes nuevos amigos?
—Me fue muy bien, todo estuvo tranquilo y no, no tengo nuevos amigos ¿por que esa pregunta?
—Bueno, es que yo creo que hay mucha más gente por conocer, no toda la vida vas a tener a Phoebe y a Hanna, recuérdalo
—Ya lo sé, pero tú mejor que nadie sabes cuán difícil me resulta hacer amigos, y con ellas siempre me siento segura y son las únicas dos amigas que después de un año de amistad no me han abandonado, es algo que tengo que agradecerles, quizás, después de todo no soy tan odiable como yo pensaba, jaja
—No eres odiable Meredith, eres una chica muy linda y sé que podrías tener más amigos si así lo quisieras, pero bueno, yo no te voy a presionar con eso, además Phoebe y Hanna no son malas personas
—Eso lo sé, por eso las quiero mucho, Y estoy segura de que ellas no me fallarán y ni yo a ellas
—Sé que eso no pasará, no debes preocuparte por eso ¿okay?
—¡okay!
—¿Y hay algún chico que te guste?— preguntó Jett cambiando repentinamente de tema
—Uhm no, ¿por qué?— dije titubeante
—Yo más bien creo que si, ¿quién es?
—Ya te dije que no Jett, y ya no me preguntes más acerca de eso
—Bueno, entonces dime, ¿te tocó con la maestra Susan?
—Oh por Dios, si, es mi maestra de Química y dice que es muy exigente, ¿la conoces?
—Si la conozco, y es más exigente de lo que dice, así que no te sorprendas si no pasas su materia ¿de acuerdo?
—Eso es lo que me preocupa, no quiero reprobar, es por eso que me voy a esforzar demasiado
—Pues más te vale Mer, su materia solo logran pasarla a lo mucho tres personas, así que tienes que ser una de esas tres personas ¿si?
—Si, no te defraudaré ni a ti, ni a mamá
—Así se dice linda, ahora ¿vamos a cenar?
—Pues... si, vamos
