Shawn Mendes Lol 🤘🏼 EN EDICIÓN.

Apartamento y Shawn.

Shawn y yo nos encontrábamos en un apartamento realmente bonito, en el centro de la ciudad de New York.

El trabajo había sido duro, y tenía muchísimas ganas de llegar a su lado, acurrucarme en sus brazos y besarle, al fin y al cabo era mi novio.

El dolor de cabeza permanecía ahí desde que dejé el trabajo para llegar al apartamento.

Al llegar, el piso olía a incienso, no se que tenía de especial Shawn con el, pero a mí me encantaba.

A su lado, olía distinto; olía mejor.

Dejé las llaves en la entrada y me dispuse a ir a la habitación, para quitarme la ropa incómoda y darme una caliente ducha; la sensación de calor me inundó, fuera hacia un frío horrible y tenía la sensación de que los dedos de los pies se me habían caído.

Las luces tenían un matiz de calor, le daba un precioso toque acogedor al bonito apartamento. Intenté desabrocharme los zapatos, distrayéndome con los cordones, no era capaz de quitarlos.

Levanto la cabeza al sentir una mirada en mi y le diviso en el marco de la puerta apoyado con los brazos cruzados, una sudadera gris y unos pantalones anchos negros. Me sonríe y le levanto la ceja graciosa.

—¿Me ayudarías, amor?.

Suelta una pequeña carcajada que resuena en toda la habitación mientras se acerca lentamente a mi.

Se agacha a la altura de casi mi cara y se queda parado.

—¿No me saludas, cariño?.—La sonrisa me sale instantáneamente, justo cuando el me mira mientras intenta quitar el nudo formado en mis cordones.

Pongo los labios pegados a los suyos y los quito al instante, sabiendo que quería más. Pero sin embargo; el hace una mueca no muy buena.

El no frena, y sigue quitándome el nudo causado por los cordones. Se deshace de mis converse, echándolas a un lado.

Mi mirada se cruza con la suya dulce y ahora tira de mi camiseta para quitármela, lentamente. No evito levantarme y hacer que el también lo haga, acariciándole el pelo.

Después pasa a mis pantalones. Los desabrocha dejando su cara muy cerca de la mía; incitándome. Es lo que realmente le encantaba.

Dejarme con las ganas tanto como lo hacía yo. Era un pequeño juego al que jugábamos sin cansarnos.

Me baja lentamente los pantalones mirándome a los ojos y los quita de mi cuerpo. Le miró con una sonrisa.

—Menos mal que estás tú para desnudarme, Shawn.—Se ríe y ahora le atraigo a mi para besarle y quedarme en sus labios un poquito más que antes.

—Esto si que es un saludo.—Me sonríe y le beso por última vez para dirigirme a la ducha.

—Te quiero.—Le guiño el ojo mientras su mirada baja descaradamente por mi cuerpo; justo a la vez en la que cierro la puerta.

Me volvía completamente loca.