Estaba un poco emocionada aquel día, pensé que podría hacer varios amigos/as, no soy muy buena haciendo amistades o socializando. Pero sabiendo que era "una exótica" entre tantas chicas japonesas casi iguales unas entre otras pensé que sería la "sensación", así que muchos de seguro se me acercarían a hablar.
Desperté a las 7:00 AM, entro a las 8:30 y salgo algunas veces en la tarde o noche, pero debo estar 10 minutos antes por la mañana. Así que me levante a la hora, me cepille los dientes, luego me vestí y desenrede mi largo cabello rulo, el cual tardo 30 minutos para dejarlo bello, sedoso y mojado para luego a los 6 minutos se seque sin darme cuenta. Mi madre preparo mi bentō (es una ración de comida sencilla preparada para llevar), pero ella todavía no sabe preparar comida japonesa así que decidió darme un almuerzo que se prepararía en mi país que sería, pasta con carne molida, queso y plátano frito (tajada) en un típico recipiente, con un jugo de sandía; me daba un poco de vergüenza usar cubiertos como un tenedor por ejemplo para esa comida, pero elegí llevar palillos, así tal vez no me sintiera juzgada, los cubiertos no se utilizan a menudo. Ya estaba lista a las 8:10, revise mi mochila para cerciorarme que estaba todo lo que debería tener. Realmente me siento "especial", ya que, en Japón no es muy común que dejen ingresar a una estudiante en el ultimo año y de otro país, no por ser extranjera del todo, sino porque la escuela en este país es mucho más estricta y con un ritmo diferente, más adelante les contaré cómo obtuve mi oportunidad para ir a esa escuela.
Ya en el salón
Cuando ya todos se sentaron me quedé al lado del escritorio de el profesor para presentarme aunque ya había sido bastante incómodo ser el chisme de la formación.
Profesor: Hoy se encuentra con nosotros a una nueva estudiante, demosle una adecuada bienvenida.
Valeria: Buenos días, soy Valeria, es un gusto conocerlos a todos. -No saben cuánta reverencia hice ese día, además de presentarme a los estudiantes también debí hacerlo con el personal administrativo y profesores-
Vi como todos me miraban, parecía la carnada y ellos el depredador. Me senté rápido, mi puesto era el último de la fila hacia la ventana. No podía evitar sentirme incomoda al ir a mi asiento, como todos me observaban, hasta el mismo profesor.
Empezó la clase, terminaba, descansaba 10 minutos y luego otras 3, con sus respectivos descansos, así hasta llegar la tarde.
Llego el almuerzo y comíamos dentro del aula, saque mi bentō y mi jugo, empece a comer, miraba disimuladamente la comida de los otros, se veían bien, pero mi comida había impregnado su olor llegando a los estudiantes. Como dije muchos se me acercaban para saber de mi, creo que la clase entera murmuraba sobre mi o me dirigían la palabra. La primera persona fue la presidenta de comité de alumnos.
Presidenta: ¡Hola! Bienvenida, soy Sakura, la presidenta del comité de estudiantes, espero que te puedas unir al grupo rápidamente, si tienes alguna inconveniencia puedes decirme.
Valeria: Gracias, soy Valeria.
Sakura: No eres de por aquí, ¿cierto? JA.
Valeria: Tienes razón, soy de Venezuela.
Sakura: Oooh, provienes de un país muy bello. Las clases de geografía suelen ser aburridas hasta que mencionan países extranjeros. ¿Todavía no te acostumbras a Japón?
Valeria: ¿Por qué lo dices?
Sakura: Tu comida por ejemplo.
Valeria: Ja ja ja, ¿eso? Bueno, todavía estoy aprendiendo de la comida japonesa.
Sakura: Tranquila, se ve muy bueno. Te dejaré comer, fue un placer.
Valeria: Igualmente, Sakura.
En esos minutos se me acercaron (más que todo chicos) para preguntarme sobre mi; ¿que edad tienes?, ¿por qué te fuiste del país?, ¿te has acostumbrado?, ¿dónde vives?, se nota que no eres de aquí, ¿cómo es el extranjero?, ¿eres pobre?, etc. El único chico que no se intereso en mí fue el que se sienta a mi lado, observe que era un poco penoso y casi siempre descubría que me miraba, disimulando con un libro en él, escuchando todo lo que le decía a los demás.
Toque su hombro.
Valeria: Hola, soy Valeria, ¿cómo te llamas?
"¿QUÉ ESTOY HACIENDO?" después pensé con claridad.
Estudiante: Soy Kenta, es un placer.
Valeria: El gusto es mío, Kenta
Le sonreí. Se quedo callado y siguió leyendo.
"¿Estuvo mal presentarme? Si no le hubiera gustado sencillamente me hubiera ignorado"
Al final del día limpiamos el salón y cada uno se fue a su casa, ordenamos las labores, interactuamos en la clase. Noté que todos se iban en grupo y/o tomaban el autobús, los únicos que observé que daban la vuelta de la esquina eran Kenta y yo, pero el seguía de largo. Y gracias a eso caminábamos juntos, el aura se sentía un poco pesada ya que no hablábamos.
Valeria: ¿Vives por aquí?
Kenta: ¿Ah?
Valeria: ¡NADA, Lo siento!
Caminé rápido y llegué a mi casa, ¡va a pensar que soy una acosadora! Tan solo quería ser cortés y sentía mucha curiosidad, se ve un poco misterioso. En ese instante no sé porqué pensé en Hiroshi, ¿tan solo lo vi una vez y me pongo así? "Amor a primera vista" que gracioso, no creo que sea eso.
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¿El amor se encuentra a la vuelta de la esquina o del mundo?
Romance¿Eres lo que necesite todo este tiempo? ¡ESTO NO ES AMOR! Básicamente esta historia trata sobre una chica que se muda a Japón por lo problemas de su país, los sucesos harán que los personajes se desenvuelvan a través de esta historia con el amo...