Un carromato pasó cerca de mí, observé a alguien, me estaba mirando, me molestó su presencia. Se me hacía conocido, pero no recordaba quién era, aún así, seguí caminando.
Paso a paso que daba, mis recuerdos se aclaraban, o sólo mi recuerdo, sólo recordaba como caía hacia el río, un Orco me miraba desde la superficie, mientras mi arma se separaba de mí, y yo caía, ¿había tenido una batalla? No lo sé, mi mente se recuperaba poco a poco, pero sólo sobre lo ocurrido antes de despertar, ¿cuánto tiempo estuve desmayado sobre esa roca? Me impresiona que aún me pueda mover.
Esa hacha... no lo sé.
Alcancé la casa junto al lago, dejé de pensar en aquel ultimo momento, aunque era lo único en lo que podía pensar. Toqué la puerta, abrieron, de ella, salió una Orca y me invitó a pasar.
-¿Tu quién eres Humano? -Me preguntó, era extraño, ¿confió en dejarme entrar a su casa pero ahora duda de mí?.
-No lo sé, desperté a unos metros sobre una roca de aquí, sólo recuerdo a un Orco golpeandome y yo cayendo hacia el río. -Le contesté, la Orca se levantó y tomó un hacha, era igual a la de mi recuerdo, no, no era igual, era mi hacha.
-Esto te pertenece, entonces. -Mi sospecha era cierta, le agradecí por devolvermela.
-Esta hacha, gracias, la recuerdo caer junto a mí, ¿de casualidad no sabrás quién me lanzó al río? -No tenía esperanzas de que supiese, pero no perdía nada en preguntar.
-Estás en Zeth'kur, chico, los Orcos cazan para alcanzar un nivel alto en la sociedad, pudo ser cualquiera. -Me dijo. La Orca me dio un poco de comida, le agradecí nuevamente y me fui, ahora sabía en donde estaba, Zeth'kur, o al menos conocía el nombre de la región.
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Olaf
FantasyOlaf despierta luego de una batalla. Perdió absolutamente todos sus recuerdos, lo único que puede ver de su pasado es la cara de su agresor. Se embarca en una búsqueda de conocimiento sobre sí mismo.