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Carolina tirita un poco mientras se abraza a sí misma en un intento absurdo por darse calor a sí misma, observa a ambos lados de la calle y suspira en rendición, Zayn nunca ha sido particularmente puntual así que no se sorprende, la calle se encuentra solitaria y poco iluminada a excepción de la farola que alumbra sobre su cabeza, agradece a dios por haberse puesto un pantalón de mezclilla gruesa y unos zapatos cerrados, su rosada chaqueta también ayuda un poco pero no lo suficiente, un auto se detiene frente a ella, es bonito y tiene ese toque de ser refinado, la ventanilla se abre y Louis reconoce al chico de la fiesta, su sonrisa es amable y el bao se escapa de sus labios cuando habla.

— ¿Quieres que te lleve? — Carolina piensa que es divertida la forma en que las cosas suceden porque justo en ese momento Zayn corre por la calle, esta despeinado y monta su face de chico malo cuando llega junto a ella y la toma de la cintura, ella sabe porque tardo tanto, probablemente no sería tan obvio pero tiene esa aura de recién follado que lo delata, aún así el chico de la fiesta frunce el ceño.

— No es necesario, gracias — habla con su dulce voz de chiquilla buena y muerde su labio color cereza, su mano de uñas pintadas de tono rosa pastel se coloca sobre el pecho de Zayn que está cubierto por una chaqueta negra.

— Piérdete — Zayn gruñe y el chico no parece particularmente sorprendido o asustado pero se encoge de hombros.

— Bien — el tipo de la fiesta prende un cigarrillo y le guiña un ojo a la castaña antes de avanzar.

— ¿Quién es? — el morocho pregunta mientras la observa acusador — te he dicho que no me gusta eso de que andes jugueteando con tipos desconocidos.

— No te pongas así conmigo — Carolina hace un tierno puchero, el azul de sus ojos reflejando una falsa inocencia.

— Sólo no quiero que te suceda nada ¿bien? Eso es todo, no importa qué tan mala seas, los hombres somos unos cabrones — Carolina sonríe y besa su mejilla sonoramente.

— Lo sé, también tengo un pene, no lo olvides — Zayn niega divertido y toma su mano.

— Vamos a casa, tú y tu sucia boquita.

***

Louis vive en el garaje de Zayn, es un lugar decente que cuenta con el espacio necesario para que su ego y él duerman cómodos, no supuso que se llevaría tan bien con él pero conectaron casi al instante y desde entonces han estado uno para el otro, Zayn no se sorprendió cuando supo sobre Carolina, él probablemente viene del futuro o eso piensa Louis porque tiene  una forma de pensar demasiado liberal y avanzada para la época en la que viven, es un artista y Zayn supone que lo que Louis hace es una forma de arte diferente, probablemente Louis piensa lo mismo porque nunca le ha incomodado que Zayn lo admire.

Louis sale de su "habitación" y camina a la sala donde Zayn se encuentra, esta desparramado en el sofá, un cigarrillo entre sus labios y Led Zeppelin a todo volumen en su estéreo, Louis se acuesta a su lado y cierra los ojos disfrutando de la letra de Whole Lotta Love.

— Amo esta canción — Louis murmura moviendo sus dedos al ritmo de la guitarra y Zayn asiente en acuerdo antes de que Louis se levante y lo mire. Ambos comienzan a balizar al ritmo de la música hasta que el teléfono comienza a sonar, Zayn le baja a la música y alga el cigarrillo en el cenicero que se encuentra en la mesita, murmura una afirmación y cuelga.

— Tenemos una fiesta — Louis sonríe ampliamente y toma su chaqueta de cuero que se encuentra tirada en el sofá junto a un montón de cosas, ambos caminan a la salida. Será una noche larga.

***

Louis tiene ese atractivo clásico, es pequeño y tiene más  curvas de las que son permitidas en un hombre, sus ojos resaltan su encanto de niño bueno y su sonrisa puede desbordar en la inocencia o en la coquetería.

Él sabe lo que tiene y siempre lo usa a su favor, sabe lo que posee y saca provecho de eso lo más  que puede, incluso ahora cuando usa unos pantalones con dobladillo al final y unas converse, la playera negra esta arremangada en sus brazos y su copete se alza hacia atrás con un poco de vaselina, la chaqueta negra de cuero le da ese toque de malo y su caminar termina el trabajo. Está en una fiesta pero no sabe de quién es, no fue invitado pero definitivamente él irá donde la diversión lo lleve, sus ojos se encuentran brillantes y enormes por las drogas y un poco de nieve aún está cerca de su labio superior, Zayn está a su lado o eso cree él. Todo brilla a su alrededor y Bon Jovi resuena en los altavoces.

— Buena fiesta — alguien grita a su lado y Louis observa a dos tipos charlando, uno es rubio y sus azules ojos bailan con felicidad, su sonrisa es amplia mientras palmea el hombro del otro tipo quién es guapo, del tipo que Louis vería en una revista, tiene ese toque de Mick Jagger y Elvis, lleva una camisa negra arremangada y pantalones de mezclilla ajustados, sus ojos verdes combinan con su bebida y Louis lo reconoce.

— ¡Si! Buena fiesta — Louis grita cuando el otro tipo desaparece y solo son ellos, el chico sonríe y levanta su vaso como brindando, Louis recarga su cadera en la barra y sonríe — ¿siempre eres tan caballeroso? — el tipo niega y le guiña un ojo.

— Solo con chicos bonitos — Louis muerde su labio y toma el vaso de la enorme mano llena de anillos que lo sostienen, le da un trago y asiente.

— No coquetees conmigo — el castaño susurra cerca de su mentón porque su estatura no le permite ir más allá pero eso funciona porque recibe un  estremecimiento de respuesta.

— No coqueteo contigo... Probablemente ya te tendría en mi cama si fuera el caso — el rizado sonríe y muerde la mejilla de Louis antes de irse.

***

Harry no puede dejar de observarlo, está ahí bailando y gritando y bebiendo, le recuerda a alguien pero aún no puede saber a quién, tiene algo, en su aspecto y la forma atrevida en que le hablo, como si Harry ya hubiese visto eso en otra persona y sus ojos, tan eléctricos y peligrosos le saben a un grato recuerdo pero Harry no está seguro, él puede estar volviéndose loco porque desde que conoció a Carolina la imagina en cada persona que se cruza en su camino.

Se acerca al chico y lo toma de la cintura, sus ojos lo miran curiosos y divertidos y coquetos y Harry quiere besarlo, es precipitado pero desea hacerlo, con cada o partícula de su ser.

— Te conozco — no es una pregunta pero el chico no responde ni da ninguna señal de negación, simplemente sonríe y le guiña un ojo.

— Probablemente — es todo lo que dice antes de irse.

Carolina •LS•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora