BTS|This is Fake Love•JIMIN&JUNGKOOK•

Cap40•No quiero perjudicar a mi hijo•

-Wow es hermosa.- Dije entrando a la casa. -¿Es tuya?-

-No, es de mi madre. Compró otra casa.

-¿Tu madre esta aquí? ¿Ya llego de Japón?

Hace muchos años no la he visto ya sabe todo lo qué pasó entré nosotros así que me da algo de pena.

-¡Harim!-

-¡Señora Park!- Hice una reverencia.

-Oh no, no. Ven aquí.- Me envolvió en un abrazo. -¡Wow, estas hermosa! Te has convertido en una hermosa mujer.- Sonreí.

-JungMin.- Se bajo a su altura. El la miró con una pequeña sonrisa pero a la vez tímido. -Aun no me conoce bien.- Dijo triste. -Mira quien está allí.- Allí estaba HaSung mirando con una gran sonrisa. JungMin rápido corrió hasta sus brazos.

-Pronto se acostumbrará. Es solo cuestión de tiempo. El fue quien me impulso a seguir adelante y a no darme por vencida. Si no fuera por el no estuviera aquí. El es un amor... igual que su padre.- Mire a Jimin de reojo.

-Eso... sonó lindo.- Sonrió Jimin de oreja a oreja. Mis mejillas no tardaron en enrojecer. -Ven, te ensañaré nuestro cuarto. Debes estar cansada.

-Gracias señora Park por dejarme quedarme aquí.

- Ah y no me digas señora, dime mamá.- Sonreí.

~•~

-Te compré ropa la puse en el armario.-

-¿D... de verdad?- Asintió.

Se acercó a mi tomando mis mejillas con delicadeza.

-Quiero que estés lo mas cómoda y feliz posible, es lo único que quiero en estos momentos. Te mereces eso y mucho mas...-

Había quedado atrapada en su mirada... en sus labios, su voz suave y melodiosa, me trasmitía paz y armonía. Cuánto lo extrañaba.

-Tus labios gritan por probar los míos.- Dijo sacándome de mis pensamientos. -¿Porqué no los pruebas?- Dijo ahora con voz ronca y seductora muy cerca de mí. -Mueres por hacerlo.- Relamió sus labios.

-Porque se que si lo hago caeré.- Sonrió sin desviar la vista de mis labios.

-Como quiera caerás.

Atrapó mis labios en un tierno beso. Lo deseaba tanto. Moría por sentir su cuerpo, moría por sentir esa sensación que sentí hace mucho tiempo atrás, moría por que me amara como solo el lo sabe hacer.

Nos separamos, tomó mis manos y las entrelazo.

-Caerás pero no hoy...- Rió sobre mis labios. Se separo besando mi mejilla. -El médico dijo que tienes que cuidarte. Aun sigues herida. Descansa que mañana iras conmigo a un lugar.

Corrí gritando por ayuda. No tenía zapatos puestos. Ya mis pies dolían. Gritaba pero nadie me escuchaba. Me detuve en seco al ver a alguien en medio de la carretera. Mire a todos lados pero todo estaba desolado. No había nadie.