ROSAS [JIKOOK]

Capítulo 4

  Mientras se reincorporaba de aquel encuentro, quedo observando por su ventana como la luz del sol iba disminuyendo, miro la hora en su reloj de pared que indicaba las 7:52 pm, plena primavera le brindaba un aire tan agradable que ya casi se sentía como aquel ángel con el que soñaba, comenzó a razonar sobre sus sueños pero lo único que pasaba por su mente era que aquella imagen que vio el primer día, era su rostro, pudo admirar su rostro nuevamente y estaba agradecido de eso a quien fuera... El se lo agradecía, era él, definitivamente era jungkookie, su jungkookie...

Unos golpes en la puerta lo desconcertaron de sus pensamientos y reventaron la burbuja en la que flotaba y calló en la gran realidad

J jimin, hijo mío- su madre estaba apunto de llorar, su voz quebradiza lo decía todo- E el señor Kang a venido a visitarte y a evaluarte.

Jimin tenia la mirada perdida por la ventana mientras estaba sentado en su cama, solo estaba escuchando.... No iba a aceptar nada de lo que ellos quisieran, no quería que arruinaran todo lo que había avanzado con "kookie", no se preocupaba por si querían entrar a su habitación pues la puerta ya estaba bloqueada y uno de sus pies estaba fuera de la ventana

Jimin yo solo quiero ayudarte, tus padres están muy preocupados por ti...- dijo inútilmente el psicólogo kang- ¿Jimin? ¿estas ahí?

si, estoy bien- su voz sonó seca con respecto al mar de emociones que tenía dentro.

Aceleró el paso y salto sobre la cochera de su casa que estaba cerca de la ventana de su cuarto, pero uno de sus pies se enredo en la ventana  y cayó sobre la cochera, suponiendo que había llamado la atención de los mayores comenzó a correr desesperado, sin saber donde ir sin saber que le pasaría a jungkookie si lo atrapaban, su casa estaba alejada del pueblo, estaba en medio del campo con los últimos rayos del sol iluminando su camino, después de correr un rato mas... Llegó a una carretera, los rayos de sol ya se habían extinguido por completo, era tan solitaria, tan fría y lúgubre, era tan parecida a aquella carretera del sueño...

Se acercó a la carretera cuando de pronto divisó una rosa... Anaranjada, que resplandecía su belleza orgullosa de si misma, Jimin avanzo con un paso moderado hasta llegar al centro de la carretera conde se encontraba tirada la rosa, recogió la rosa, la acerco hacia el para olerla y era como estar una fantasía un olor tan indescriptible, tan fresco y joven, Jimin abrió sus ojos, cambio su expresión cuando vio la tan vital flor volverse rápidamente en material biodegradable que se le escapaba de las manos y no podía detener, cuando levanto la vista buscando algo que le ayudara... Jungkookie, estaba frente a el, le enseñaba una sonrisa tan vital como la anterior flor, Jimin sorprendido no supo mas que sonreír satisfactoriamente, trataba de observar su hermoso rostro como había prometido pero sus cristalizados ojos se lo impedían hasta que:

Jungkookie paso sus manos por las mejillas de Jimin limpiando sus lagrimas y quitando esos cristales de sus ojos- vamos jiminie, no me queda mucho tiempo.

su corazón paro de latir unos segundos cuando se dio cuenta de que su amigo estaba frente a el, su mejor amigo, que siempre estuvo ahí y comprendió que debía ayudarlo.

Cuando Jimin vio las luces que se acercaban a ellos no hizo nada mas que sonreír mirando directamente a los ojos de su mejor amigo, conectando dos miradas y convirtiéndolas en una sola y uniendo sus labios en un tierno beso de dos amigos que no pudieron ser felices hasta ahora.