Like Heaven~ James Y Rose

12_Será secreto

Cuando los Weasleys llegaron a la madriguera, contentos y satisfechos con la tarde se quedaron en el salón hablando y riéndose, alguna que otra discusión surgió, principalmente entre Roxanne y Fred. Pero en general todos estaban allí.
Todos excepto James y Rose.
Ellos eran un caso a parte.
El primero estaba en su habitación sentado en su sillón con las manos en la cara, pensando en lo que había ocurrido hace solo una media hora.
Había besado a Rose.
La había besado.
Y ella,
le había correspondido.
Pero no entendía porque, acaso se le había olvidado que eran primos, que no podían estar juntos. Que el fuego apasionado que siente por ella debería no existir.
Había besado a Rose, y habían sido los mejores segundos de su vida, sentirla de esa manera, sentir su suave piel cubierta por el bikini contra su torso descubierto, era algo inefable, indescriptible.
Pero lo que más le confundía de todo, era que ella también le había besado, que había recorrido sus temerosas manos por su pecho, y le hacía preguntarse.
"Siente Rose lo mismo que yo siento por ella?"
Esa pregunta nunca se la había hecho, puesto que el siempre había pensado que Rose no iba a corresponder sus sentimientos.
Y le dió esperanza.
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Rose se encontraba en el baño, mirándose al espejo, observando sus labios,su pelo y preguntándose, que acaba de ocurrir. Cuando ella sugiero la idea de ir al lago nunca se imagino esto, nunca se imaginó que se besaría con James, su mejor amigo... Su primo.
El había respondido al beso, se dijo así misma, intentando creérselo, él tambien la había besado, y había sido increíble.
Con un suspiro termino de lavarse los dientes, y cuando salió vio la puerta de la habitación de James, que se encontraba entreabierta, dentro había luz. Tenía dos opciones, una era irse a su habitación, y probablemente no dormir nada esa noche y la segunda era llamar a la puerta de su primo y hablar con él.
Y como Rose era una Gryffindor eligió la segunda.
Se acerco a su puerta y con delicadeza llamó. Con el corazón latiéndole a mil por hora. La puerta se abrió y James estaba ahí, un poco desprevenido por su presencia. Rose cogió aire y habló.
- Tenemos que hablar.- Él la miró intensamente y con los nervios plasmados en la cara.
- Lo sé...
Rose entró en su habitación y se sentó en la cama. Observando los posters de quidditch y de gryffindor que había alrededor de la habitación, pues en ese momento tenía miedo de mirar a los ojos del otro.
James se sentó a su lado.
Y habló.
Es ahí cuando habló.
- Rose...- dijo él tomando aire, y multiplicando los latidos de la pelirroja-¿te acuerdas del día anterior al partido de quidditch en el que los dos nos caímos?
Rose se sorprendió por el tema que este había sacado, pero respondió igualmente.
- Sí... Estábamos enfadados, no querías contarme lo que te ocurría, ni siquiera cuando todo se arreglo me lo contaste.
- Es hora de que te diga porqué estaba así- le dijo él- esa noche soñé que te besaba.
Rose se quedó paralizada, las palabras simplemente no podían salir de su boca. Solo miró a los ojos de James.
- James... No pode- empezó a decir, pero James le impidió continuar.
-No, no lo digas, por favor...
-¡Somos primos por Merlín!- dijo Rose, mientras se levantaba para dar vueltas al rededor de la habitación.
- ¿Pero eso no te ha impedido besarme, no?- le cortó él.
- ¡Fuiste tú el que me besó!- le gritó ella.
-No Rose, fuimos los dos.- le respondió James casi susurrando.
-¡Esto no debería estar pasando James!- dijo esta con lágrimas en los ojos- ¡Nada de esto tendría que haber pasado! ¡No nos tendríamos que haber besado! ¡¿Qué dirían el  resto, que diría  Fred o Albus, o tu hermana, por Godric que dirían nuestros padres?! ¡¿Qué dirían nuestros compañeros si supieran lo que paso en la cueva?!
-Rose, por favor, calmate...- le pidió el chico pero esto solo la enfureció más.
-¿Qué me calme? ¡Cómo demonios me voy a calmar!
- ¡QUE CREES, QUÉ ESTO NO ES DÍFICIL PARA MI, TU ERES LA QUE ME LLEVAS ATORMENTANDO DESDE AQUEL PARTIDO!- gritó él, pero se dió cuenta de que había sido demasiado alto, Rose miraba preocupada al piso de abajo. Escucharon unas dos escaleras crujir y la potente voz de la abuela Molly.
- ¡James, Rose! ¡De qué va todo ese ruido!- Rose tembló un poco y contesto nerviosamente.
- ¡Nada abuela Molly... Estábamos solo peleando!- pero eso pareció empeorar la situación y los dos se alarmaron cuando oyeron a su abuela subir las escaleras lo más rápido que podía. Rose no sabía que hacer, tenía lágrimas en la cara, pero ya era demasiado tarde, su abuela ya había abierto la puerta, y se sorprendió al ver a James despeinado y con los ojos cristalinos, un detalle del que no se había percatado Rose, y tampoco se esperaba ver a Rose con lágrimas en los ojos.
- ¿Qué ha pasado?- preguntó turnando la mirada entre ellos.
-Nada, todo esta bien...- dijo James.
- Tu prima está llorando James, algo tiene qué haber pasado- Oh..y como les dolió aquella palabra..."prima".
-No es nada abuela Molly, todo está bien- esta vez le aseguró la joven,Molly la miró con una ceja levantada.
- Contarme lo que ocurre, ahora.- demandó la mayor.
-No- respondió James tajantemente.
-¿Perdona?- dijo Molly indignada ante la contestación de su nieto.
-Tenemos derecho a nuestra privacidad.- le dijo James y Molly levantó una ceja.
- ¿A vuestra privacidad? Sonais como una pareja- los dos se tensaron y Rose juraría que su corazón iba a mil por hora.
-¿Qué?- dijo James, Rose podía sentir sus nervios- solo estábamos discutiendo de un tema muy personal, porque si no recuerdo mal somos mejores amigos.
- No me gusta la actitud que estas teniendo James, e igual tú Rose, vuestros padres no os han educado de esta manera, de todas maneras, estoy muy cansada y no voy a perder mi energía en esto, continuaremos hablando mañana y espero que este comportamiento haya mejorado.
Con eso se fue y cuando sus pasos se disiparon los dos echaron un suspiro al aire, había estado muy cerca.