Hagamos una rápida presentación. Mi nombre completo es Jennette Tunner y tengo dieciocho años. Se me podría considerar físicamente como alguien común, corriente. Morena de ojos pardos y estatura media tirando a baja. La diferencia la hacían mis tatuajes que básicamente contaba mi vida como si de un libro abierto se tratase.
Muchas personas se alarmaban al ver a alguien que por fuera se veía tan "frágil" y "delicada" llevaba esa cantidad de tinta permanente cubriendo una buena parte de su cuerpo. Y sí, también fumo. Es un mal vicio, no lo voy a negar pero me relaja.
Analizándome un poco más: no suelo ser violenta -repito, no suelo-, soy bastante coherente y no pienso las cosas dos veces antes de hacer nada. Simplemente me tiro a la piscina y si está vacía, mala suerte.
¿Qué más decir? Mi vida es, si se puede calificar así, diferente. Vivo aquí y allá dependiendo de la semana o del día. No me gusta la gente hipócrita, a esos normalmente les explico un poco cómo van las cosas conmigo. No acepto demasiado bien las bromas así que mejor cuidar las palabras que vas a usar.
Y aquí me encontraba ahora, en el trabajo parcial que me ayudaba a sobrevivir mes a mes por mi misma. Una oficina de ocho millones de plantas, puede que más, en la que ejercía de contable. Para ser toda una rebelde se me daban bien los números.
No estudio porque no puedo permitirme aún los estudios en ninguna universidad pero ahorro. Algún día iré, tengo toda la vida por delante.
- Despierta Tunner, no te pagamos un sueldo para que no hagas nada.- Con todos ustedes mi queridísimo y muy borde jefe: Zayn Malik.
Alto y fornido, moreno de ojos mieles bastante exóticos. No se parece en nada al resto de la población mundial, todas las mujeres que trabajan en cada uno de los pisos que este edificio tiene han intentado ligar con él. Adivinad qué responde él. Exacto, ni les dirige la mirada. Suele potarse bien conmigo, dentro de lo que cabe.
- Podrias ser menos borde, ¿sabes? -Dije sin mirarle, porque si lo hacía, sé que me pondría esa mirada arrogante y superficial que tiene. Lo odio, a veces.
- Y tú un poco más trabajadora ¿No? -Contestó. Ahora si que levanté la vista, con cara de querer matarlo, pero no dije nada porque es mi jefe y gracias a el puedo vivir.
- Vete a la mierda- susurré lo suficientemente alto para que me escuchase.
- Cuidado, no empecemos mal la mañana, bonita -Sonrió. Dio media vuelta y me dejó allí, sola, con un millón de cuentas por hacer.
Pasaban las horas y seguía aún con trabajo que hacer, que puta mierda enserio. Quería llegar a casa, tirarme en el sofá y no moverme de allí hasta las 8:30 de mañana cuando tendría que volver aquí, y otra vez a lo mismo.
El sueño me podía, me había pasado toda la noche despierta hablando por skype con el idiota de mi mejor amigo y no me dejaba dormir. Maldito.
De repente notaba como mis parpados pesaban y me obligaban a cerrar los ojos completamente
Escuché un golpe que me hizo dar un rebote en mi silla, como si me hubieran dado el mayor susto de mi vida.
- Que te duermes Jennet -Gritó Cathy cerca de mi oido. Cathy era mi compañera de trabajo, a la que no solía aguantar mucho y ella sabía mis limites pero se empeñaba en darme por culo.
- Serás puta -Grité levantandome de la silla de un salto.- Te voy a matar, imbecil.
- Me parece a mi que no.-Respondió justo antes de que entrara Zayn y se nos quedará mirando.
- ¿Qué miras? -Pregunté con el tono más borde que pude. No estaba de humor, no sé si se notaba.
- Tunner..no te pases..-Me miró con el ceño fruncido.- ¿Que ha pasado?
Cathy me miró y esbozó un pequeña sonrisa antes de contestar.
- Jennet no esta de buen humor hoy, señor Malik.-Soltó poniendole ojitos.Enserio la tia esta daba asco.-Me ha amenazado con matarme.
Suspiré.
- Ni que fuera la primera vez pu...-me corregí antes de que pudiera arrepentirme por si Zayn me regañaba o algo- pu..puede que hoy necesite descansar un poco.
Cogí mis cosas antes de que pudieran decirme nada y me marché. No sé como la aguanto, de verdad.
Llegué al portal de mi casa (por fin).Entré y subí por las escaleras corriendo, necesitaba mis horas de sueño para poder hablar como una persona coherente. Entré a mi casa y ví a Liam tirado en el sofá con los pies encima de la mesita.Que cómodo se estaba volviendo este chico
- Quita de ahí ahora -le miré y me acerque al sofá-
-Vaya hola a ti tambien ,cariño -dijo echándose a un lado - No estas de humor hoy ¿No?
-No, dejame -contesté como si fuera una niña de 11 años a la que le acaban de regañar sus padres-
Liam se quedó callado y se recostó conmigo. El es mi mejor amigo desde siempre. Me había visto de todas las maneras posibles: feliz, triste, dolida, borracha, cansada , enferma, incluso me vió llorar una vez.Mi regla número uno es no llorar.Yo no lloro.Va encontra de mi ser, es para mi como si te expusieras a que te hagan daño, mostrando debilidad. Yo no podía ser así, no me lo permitia.
Mi relación con Liam era distinta, nose, especial, el sabia todo de mi y yo de él. Somos almas gemelas, definitivamente estamos hechos el uno para el otro, nos complementamos perfectamente, es el destino que estivieramos juntos, o al menos lo sentía así. Pero lo nuestro no pasaba de la amistad, era como si estuvieramos predestinados a ser mejores amigos/hermanos.
Él no era el típico mujeriego, de hecho le asqueaba la idea. Hombre de una sola mujer.Esta claro que quedan pocos como él. Aún no había encontrado a nadie pero sé que el día que lo haga, lloraré. Si lloraré, es mi pequeño bebé (aunque sea mayor que yo cosa que no me hacía gracia) y sé que será feliz al fin.
Después esta la perra de mi mejor amiga. Anne era mi otra hermana. Estaba....mmm...como decirlo...¿como una cabra montesta? Exacto.
Es rubia de ojos claros como el mar, pelo liso y algunas pecas. Es muy guapa, lo que podria considerarse que es el tipico "bombón" que todo chico querría. Pero ella es lesbiana, así que lo siento, chicos, otra vez será.
Es muy extrovertida y alocada, y nunca he conocido a una persona que pueda tener la risa más contagiosa que ella. La risa suele ser más graciosa de lo que esta riendo. Pero la adoro. Siempre está ahí para mi, en cualquier momento del día, ya puede ser el fin del mundo que si le llamo viene a mi casa a consolarme.
Habian pasado 2 horas desde que nos habíamos quedado fritos en el sofá. Él roncando como siempre y yo un pie en su cara. Era nuestra forma habitual de dormir.
Escuché unos golpes en la puerta y me levanté a regañadientes.
-Jo, con lo agusto que estaba yo.. -dijo Liam sentándose en el sofá y mirandome.
-Ya y yo, espero que sea Anne , porque si no, voy a matar a alguien -gruñí, y abrí la puerta llevándome una gran sorpresa.
-¿Q-Qué h-haces aquí? - Pregunté con la voz entrecortada-
-Ayudame por favor...-contestó y se desplomó en el suelo como un muñeco de porcelana...
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Holaa :D
Bueno queria deciros que gracias por leer nuestra nueva fic, y que espero que os guste mucho, porque tenemos un montón de ideas. Comentad y votad por favoor.
Graaciaaas ♡♡♡♡♡♡♡
