La Ola [One Piece]

Un cigarrillo por cada dolencia.

Narra Sanji.

—¿Qué mierda?— acaricié mi cabeza tratando de calmar el dolor.

Observé el panorama, todos en el piso, roncando como animales, estaban en un sueño más pesado que un Rey Marino. Suspiré recordando la borrachera que aguanté anoche, comencé a recordar muchas cosas.

—Nami-swan...— susurré viéndola tendida en el suelo.

Flashback.

Bebí un trago de alcohol observando a Nami reírse, definitivamente, hoy no era mi día.

—¿Te pasa algo, cocinero-san?— se acercó Robin con una agradable sonrisa.

—No es nada.— respondí oyéndome cortante, lo sorpresivo fue que ni lo planeé, simplemente salió de mí.

—¿Seguro?— preguntó en un tono alegre.

—Sí.

—Bien, entonces esperaré a que quedes inconsciente de tus actos para preguntarte.— me miró divertida, reí casi sin ganas, ella me devolvió la risa y se fue alejando.

>>Ya.<< me dije a mí mismo, me levanté decidido.

Me dirigí a pasos seguros hacia Nami, cuando estuve a su lado, la agarré del hombro y la arrastré conmigo. Ella me hacía preguntas, pero yo sólo la ignoraba. Suerte que todos se encontraban distraídos en Luffy, Chopper y Franky.

—¡E-Espera, Sanji-kun!— la llevé hasta la cocina y la solté.—¿Qué te pasa? ¿Por qué me tratas así?

—Quiero que me contestes esta pregunta.— hablé mirándola fijamente, ella misma notó que hablaba en serio.

—Adelante.— dijo haciéndose notar impotente, sabía que en realidad estaba algo nerviosa e intrigada, pero en ese momento no le presté importancia.

Me acerqué.

—Tú y Luffy...¿tienen algo?— cuestioné casi sin querer saber la respuesta.

Me observó a punto de perder la compostura, su cuerpo estaba estático y brindaba seguridad pero su mirada no correspondía de igual manera.

—Pensaba decírselos cuando estuviéramos listos.

Sentí una punzada.

—¿Así que sí?

—Yo no he dicho eso.

—Eres muy buena para evitar mis preguntas.

—No quiero seguir hablando, lo siento, me retiro.— pasó a un lado mío a pasos rápidos, me quedé estático.

Un cigarrillo nuevo coloqué en mi boca.

Fin del Flashback.

—Bueno, creo que debo preparar el desayuno.— fui a la cocina, y empecé a preparar el desayuno.

Hice las tostadas primero, las coloqué en la encimera en lo que terminaba con el resto. Robin se levantó sentándose, haciéndome compañía.

—¿Gustas un café, Robin-chwan?— pregunté de espaldas a ella, negó.

—Preferiría un té, por favor.— sugirió alegre.

—En un instante.

Le fui a preparar el té el cual llevaba esperando hace cinco minutos, sólo faltaba poco para que estuviera listo cuando mencionó el nombre de Nami.

—Así que por ella estabas apagado ayer.— concluyó.

—Yo no he dicho eso.— respondí suave.

—Eres muy bueno para evitar mis intuiciones.— me giré sorprendido.

—¿Escuchaste nuestra conversación?

—Si no fuera porque distraje a la tripulación, los hubieran escuchado todos y Luffy hubiera entrado a interrumpirlos.

—Bien, gracias.

—No es nada.

Seguí haciendo el desayuno, suspiré mientras preparaba lo último. Para cuando terminé, la mayoría ya se encontraba aquí, serví la comida y me senté a comer.

No era que le prestara atención, de hecho, qué mucho peleábamos, pero noté a Zoro diferente. Usualmente suele ser así de amargado y reservado a la hora de comer, pero tenía la vista fija en su plato y comía muy despacio. Como si algo le atormentara, ¿qué demonios?

Decidí dejar pasar eso, y me uní a la conversación.

[•••]

Narra Autora.

Luffy se dirigió donde estaba Hikari y le sonrió. Bajaron la colina nevada y caminaron unos metros adelante. Los Mugiwaras se despidieron en el puerto, ya dentro del Sunny Go, partieron agitando sus manos hacia, éste giró en sus tobillos y pronunció unas palabras.

>>Prepárense para lo que viene.<< susurró con una sonrisa, y se fue alejando de allí.

Lo que nunca supo fue que el pequeño reno había escuchado las cortas palabras que había dicho. Se quedó estático, quería preguntarle luego a sus nakamas y hablar sobre eso. Pero, no lo veía tan importante, y tampoco quería levantar sospechas innecesarias, así que decidió dejarlo allí. En cualquier caso, notificaría a sus nakamas, pero en lo que, seguiría restándole importancia.

Días después.

Los Mugiwaras navegaban por el pacífico mar, debido a que hacía más frío de lo normal, Robin se levantó de su silla y fue a revisar el cielo –por no despertar a su amiga de su siesta diaria–. Claro, no era una experta, pero hubieron unas veces en las que Nami le hablaba acerca del clima, por lo que pudo aprender algo. Efectivamente, las brisas eran más contantes y largas, probablemente se encontraban con una isla nevada o el clima en esa zona era así de friolento.

—Oe, Robin, ¿crees que podamos encontrar una isla?— cuestionó el renito acercándose a ella todo emocionado.

—La verdad que no sé, Nami es la que lleva el Log Pose. Está durmiendo, no quisiera despertarla.

—Ohh, si encontramos una isla, ¿irías conmigo a jugar con la nieve y a hacer muñecos como los que hicimos la otra vez?

—Por supuesto.— Chopper dio una pequeña risilla y fue a pescar junto a Luffy, Usopp y Brook.

La de orbes azules le dio una pequeña mirada al espadachín, desde que habían embarcado no le había dirigido ni una palabra, y se notaba más reservado. La evitaba cada vez que ella intentaba acercarse a él, no le quería dar mucha importancia al asunto, pero a veces le hería ver que no quería estar junto a Robin.

—Oe, Robin, ¿te SÚPER ayudo a regar las flores?— Franky le sonrió viéndola leer un libro, ella reaccionó volviendo a la realidad.

—Cierto, gracias por acordarme, sería un gusto recibir tu ayuda.— se levantó caminando junto al robot a su pequeño prado.

Robin fue y le entregó un regadero, él se lo devolvió y le hizo señas indicando que estaba bien. Abrió su boca y tiró de un diente, la cerró nuevamente, pero la volvió a abrir, aunque esta vez salió agua. Robin carcajeó fascinada con su nuevo, sí que era una caja de sorpresas. Se acercó a los cultivos y les echó del mismo agua, se pudo notar que la curiosidad de la mujer no se hizo esperar y –literalmente– lo interrogó.

Por el otro lado se encontraba cierto peliverde observando la escena mientras tomaba varios buches de sake aumentando su borrachera.