No me creo importante ni nada de eso. Nadie leerá esto y tampoco es algo que me moleste. Pero ya estoy aquí, de vuelta.
Las cosas han cambiado tanto en el transcurso de este año... Me he alejado de mucha gente genial, he perdido momentos increíbles, he odiado a todo y a todos. Me he vuelto más chiquitita e insignificante y he dejado de importar como antes. A veces siento que soy el segundo plato de mucha gente, y me fastidia, porque yo siempre he dado todo de mí por ellos. Pero tampoco quiero exigir nada a nadie. Todo es tan complicado. Sé que si no digo como me siento van a seguir haciéndome daño, pero simplemente no sé expresarme. Más bien, no puedo.
Las inseguridades me siguen carcomiendo por dentro, aunque las cosas están mejor que en verano. Siento tanta presión sobre mí que me vengo abajo con la más mínima tontería. Soy muy susceptible a llorar con cada gilipollez. Pero mira, me las apaño.
Estoy muy jodida por dentro, pero ya es algo que llevo conmigo desde hace mucho tiempo. Estoy acostumbrada a cagarla y pasarlo mal, así que prácticamente se ha convertido en una rutina.
Espero que vosotros esteis genial. Os dejo una canción genial que descubrí hace poco, que es genial.
Hasta pronto.
Sky.