ᴇsᴇ ᴏᴍᴇɢᴀ ||ᴋᴏᴏᴋᴍɪɴ||

Prólogo.

Park se despedía de sus padres, hoy iniciaría su entrenamiento en la milicia.
-Mi bebé creció tanto.-sollozó su madre abrazandolo fuertemente.-
-Mamá no llores, me harás llorar a mí también.- dejó de abrazar a su madre para ahora abrazar fuertemente a su padre.-
-Estoy muy orgulloso de ti pequeño, eres un Omega muy fuerte y eso nos hace muy felices, cuidate mucho hijo, no dejes que ningún Alfa estúpido te corteje o te toque o le cortaré las bolas.- dijo su padre bromeando con lágrimas resbalando por sus mejillas.-
Jimin soltó una leve carcajada para luego dejar un beso en la frente de su madre y recibir uno por parte de su padre.

...

Jimin bajó de aquel camión de la milicia, viendo las enormes puertas de hierro las cuales impedian el paso a cualquiera que no tuviera un permiso para entrar.
Jimin era formalmente parte de la milicia y mañana empezaría su entrenamiento con sus nuevos compañeros y sargentos.

Al entrar vió a muchos soldados ir de allá para aca, pero su vista se fijó en aquel hombre, cabello castaño, cuerpo fornido, y muy guapo. Jimin vió como su cejo se fruncia cada vez que hablaba y sus delgados labios se fruncian levemente, Jimin, imaginó en como se verían esos tentadores labios envolviendo su polla, se veía increiblemente sexy, Jimin gimió levemente ante aquella imagen mental y se relamió los labios coquetamente, su estadía en la milicia sería mejor con aquel hombre ahí.