Kami wa Baka, el amor de un dios entre mortales [Yaoy][Furry]

Cap. 4 / El pasado de un dios

Antes que nada quisiera recordar que esta historia es pura ficción y todo lo que ocurre es imposible que pase o al menos en esta realidad o mundo.

También quisiera pedir que si a alguien no le gusta la historia o está aquí solo para criticar de manera negativa les invito a salirse de manera tranquila. Dicho esto que empiece la historia.

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Es curioso cómo puede una cosa tan simple como enamorarse de alguien que acabas de conocer afectar tanto al cuerpo.

Las horas pasaron y, cuando terminaron las clases, me dirigí hacia mi apartamento, un ático de dos plantas con azotea incluida, todo muy espacioso y moderno. Qué esperabas,
Un dios necesita un lugar tranquilo, algunos prefieren templos enormes y decorativas catedrales mientras otros con algo más sencillo nos vasta.

Al pasar por la puerta la cerré, suspire, y chasquee los dedos para que se echará la cerradura sola, que no utilice mis poderes en publico no significa que no me gusta usarlos. Pase a través del salón para llegar a las escaleras que daban a mi cuarto que solo contaba con una cama, dos mesillas de noche a cada lado de la cama, un armario empotrado en la pared, unas escaleras a la azotea y en vez de tener una pared que cerrara mi cuarto tenia una barandilla que me permitía ver el salón.

Kami - Haaaa - dije mientras me tiraba en la cama para relajarme - ¿por que no me puedo quitar el recuerdo de ellos dos de la cabeza?

Es curioso porque en realidad no necesito descansar, ni comer ni nada, como era un dios no necesito hacer nada para mantener mi cuerpo. Pero eso no indica que pueda disfrutar de cosas como dormir o comer. Tras esto decidí cerrar los ojos y recordar en sueños.

¿¿?? - Hey, que tal el día, - dijo una voz del pasado - ¿que tal si vemos alguna serie mas tarde juntos.

Dejad que os cuente que es lo que paso, en un mundo que anteriormente en el que, muy posiblemente parecido al que este leyendo esto, conocí a un chico, alguien al que le gustaban los mismos gustos que a Loren, y aunque era algo tímido al principio después de conocerme era alguien majo y adorable.

¿¿?? - Dime, ¿Que te gustaría comer? - dijo de nuevo su voz en mi cabeza de nuevo - se que no necesitas comer pero me hace muy feliz cocinarte.

El era un chico de una familia de clase media en un gran pueblo cerca de una gran ciudad importante. Si casa no es que destaca pero era bastante espaciosa. me encantaba pasar los días sentados en el sofá viendo series de televisión juntos.

¿¿?? - ¿Crees que es posible que las series de televisión, los videojuegos, y los libros son  reflejos de otros mundos en el nuestro? - Recordé su pregunta en mi mente.

Cuando me desperté, me di cuenta de que ya era de noche, decidí ducharme para variar un poco y hacer algo distinto. Cuando termine de ducharme volví a chasquear los dedos para que una ráfaga de aire caliente me secase al instante. Después de vestirme con unos calzones negros y una camiseta blanca con un dibujo en marrón de un león con llamar, me dirigí a la azotea para disfrutar del paisaje urbano nocturno. 

Me sorprendía como una civilización podía haber prosperado sin necesidad de poderes milagrosos o de ayuda de dioses. Muchos dioses suelen pensar que todo lo que crean sus civilizaciones es gracias a ellos y si mueren no le importan, si están sufriendo y ellos necesitan su ayuda a muchos dioses suelen no importarles. o incluso si matan ellos a algún ser vivo sueles darles igual porque para ellos son solo juguetes o una raza inferior como una hormiga para ti lector.

Kami - Ufff - dije mientras veía en el cielo algunos hombres aves y dragones volando con sus alas. - ¿le gustara a Loren bolar sobre mi lomo? pero ¿que digo?, todavía es muy pronto para pensar en este tipo de cosas.

De repente sentí una presencia. normalmente ignoraría las presencia de los habitantes de mi mundo, pero aquella presencia no pertenecía a mi mundo. Decidí dirigirme al mismo lugar que aquel ser de otro mundo. Me dirigía hacia la cima de un alto edificio en el centro de la ciudad. Al llegar me la encontré de espaldas con sus pies en el aire.

Kami - Cuanto tiempo sin verte - Le dije de forma amigable y alegre. - me alegro de volverte a ver.

Diosa de otro mundo - Si, ha pasado mucho tiempo. - dijo devolviendo el saludo.